miércoles, 29 de julio de 2020

Anne Frank en la Era del Hashtag: Algo que agradecerle a Netflix



Terminado de ver el documental #Anne Frank: Parallel Stories”, me encontraba ante un dilema. ¿Debía recomendarlo? ¿Era un buen momento histórico para verlo? La respuesta me vino en un sueño. Me di cuenta de que el documental me había hecho bien, que era lo que necesitaba, pero que no tenía que recomendarlo. Eso sí, debía hacerle una crítica objetiva y a la vez hacer un relato subjetivo de lo que ha significado para mí, porque este blog no es solo de ustedes, también es mi último diario de vida.

Modernizando el Diario de Anne Frank
Inicialmente, me acerqué al documental casi en puntillas. ¿Otra versión de la recauchada fórmula del Holocausto? Una fórmula que únicamente sirve para ofender a las víctimas y crear más antisemitismo. ¿Y Anne Frank? ¿No que los del Lazio se burlaron de ella en un estadio el año pasado? ¡En Italia, el país menos antisemita de la tierra! Y más encima el documental lo presentaba la sororidad antisemita de Netflix. Pero, alerta, no es producido por Netflix. Es un documental italiano del 2019.

Precisamente por ser italiana (Vite Paralelle es su nombre real) y por no ser un producto Netflix es que presenta lo trillado dentro de un ángulo diferente. La productora ejecutiva Veronica Bottanelli tomó la decisión de dividir la historia en cuatro escenarios que se alternan, a veces de manera abrupta y confusa. Dos están en inglés, dos en las lenguas de quienes atestiguan. Son estos últimos segmentos los más impactantes. A juzgar por los comentarios y criticas también son los preferidos del público.

El Teatro Piccolo de Milán ha recreado uno de los cuartitos del Anexo donde Anne Marie Frank pasó los últimos tres años de su vida ocultándose de los nazis. Es ahí donde Dame Helen Mirren, con su dicción perfecta y talento histriónico, nos brinda una lectura de los fragmentos más significativos del diario. Oírlos en voz alta les da una dimensión vivida que nos saca del ámbito íntimo y personal en el que hemos conocido el famoso diario. La descripción de los primeros besos intercambiados con Peter es tan intensa que me hizo correr a mi viejo diario de 1975 a leer la descripción de mi primer beso.


Es innegable que El Diario de Anne Frank siempre ha tenido mayor acogida entre los jóvenes. Por más de medio siglo, a millones de chicas y niñas (yo lo leí por primera vez unos meses antes de mi decimo cumpleaños) nos ha motivado a llevar diarios de vida. ¿Pero qué pasa hoy en día en que ya no existen los diarios? Los Millenials y algún que otro dinosaurio baby boomer como Servidora, usamos nuestros blogs como breviarios, ¿pero y los Z? Su mayor medio de expresión son las redes sociales y ese ha sido el gancho que el documental ha utilizado para “pescar” pececitos Z.

El hilo conductor del documental es una quinceañera llamada Katerina Kat (Martina Gotti) que comienza un viaje en reversa por el último año de vida de Anne. Lo inicia en Bergen Belsen; sigue en Auschwitz; continua en Westerbork, el campo de tránsito holandés donde Los Frank fueron llevados tras ser arrestados por la Gestapo; y acaba en el Anexo.

Contrasta el estado de Bergen Belsen, un campo ralo, húmedo de lluvia salpicado por falsas tumbas-monumentos (uno de los cuales honra la memoria de Las Hermanas Frank), con el cuidado con el que se han conservado las ruinas de Auschwitz o el Anexo que una vez cobijase a Los Frank. También me ha sorprendido las imágenes actuales de Terezin y Drancy, casi intactos.

En esta era iconoclasta que nos ha tocado vivir tiemblo (y voces hay) que aparezca algún movimiento exigiendo se borre todo vestigio del Holocausto para dar gusto a nuestros enemigos, y no solo hablo de negacionistas. Si un judío mamerto en The Forward exigió la destrucción del Arco de Tito, y todavía no sabemos si era irónico o hablaba en serio, ¿qué podemos esperar?

A través de esa trayectoria, Katerina comenta sus impresiones que cuelga en su página de Instagram. Ese se supone es su diario y ella es la imagen de una Anne Frank moderna. Este recurso artístico ha causado controversia y molestia entre críticos y espectadores que sienten que KK es demasiado moderna.  “Parece una emo” dijo uno en IMDB refiriéndose a su cabellos azules y a la argolla en la nariz. Otros dicen que es un modo superficial de “modernizar” al personaje histórico y que acaba trivializando su tragedia.

Aunque no me molesta la aparición de Kat, si me pareció un poco cursi (“¿Hubiéramos sido amigas”? le pregunta a Anne en el más allá). Es cierto que su inclusión simplifica algo que todavía no puede digerirse en toda su magnitud. Su cháchara ligera contrasta con la profundidad de Anne que, en su encierro y en su miedo cotidiano a ser descubierta y asesinada, desarrolló esa “precocidad monstruosa” como la definiría Daniel Rops en el prefacio a la edición francesa (yo leí el diario en traducción de esa edición).

Cinco Niñas de Auschwitz
Esa precocidad de Anne y esa simpleza de Kat se hacen más evidentes cuando las contrastamos con el tercer y más importante segmento del documental: las entrevistas con cinco sobrevivientes del Holocausto. Para crear estas “vidas paralelas” a la de Anne se ha buscado a cinco mujeres que una vez fueron niñas y quinceañeras y que sobrevivieron Auschwitz.

Tenemos a la checa Helga Weiss, que fue llevada junto a sus padres al ghetto-modelo de Terezin. Ahí tendría su primer romance, pasaría de niña a mujer para luego ser deportada a Polonia y liberadaen Mauthausen. Tenemos a la simpática Sarah Lichtsztejn-Montard quien con su madre lograra huir del Vel d’Hiv en 1942 tras la redada más grande de judíos en territorio francés. Eventualmente, en 1944, la adolescente Sarah fue arrestada, llevada a Drancy, y luego deportada a Pitchipoi (el nombre con el que los niños del campo daban a su destino desconocido en Polonia). En Bergen Belsen, Sarah tendría un breve encuentro con Anne Frank.
Helga Weiss

Tenemos a las hermanas croatas Andra y Tatiana Bucci que sobrevivieron Auschwitz solo porque el Dr. Mengele las confundió con mellizas y las Integró a su zoológico de conejillos de indias. Por último, tenemos a Arianna Szoranyl hija de padre judío y madre cristiana, bautizada junto a sus cinco hermanas lo que no impidió su deportación después que su Italia natal fuese invadida. Cada experiencia es un relato diferente, con el vínculo común de que son voces de sobrevivientes que narran una juventud muy diferente a la de los espectadores, pero que tienen en común con Anne Frank la experiencia de saberse en constante peligro, de saberse rechazadas por la sociedad en que viven.
Andra y Tatiana Bucci

Alternando con las voces de Dame Helen, de KK, y de las sobrevivientes, entran las voces objetivas de historiadores y custodios de centros dedicados a preservar la memoria del Holocausto. Las voces de las sobrevivientes ahogan los textos de KK e incluso la lectura de Dame Helen, Solo se ven equilibradas por los comentarios de los expertos que aportan información que ellas entonces y hoy no saben.

 Ahí tenemos al historiador italiano Marcello Pezzetti que ha colaborado con los testimonios de algunas de estas mujeres y es autor (entre otros libros) de Il Album di Auschwitz y Il Libro della Shoah Italiana. Me gustó ver entre los expertos al vehemente Rabino Michael Berenbaum (graduado como yo de Queens College) autor de El mundo lo debe saber y productor y asesor de galardonados filmes y documentales sobre la Shoah. Es el quien explica por qué el Holocausto es diferente a otros genocidios.

Consciente de que hoy en día el termino "genocidio" es aplicado de manera baladí a cualquier masacre, Berenbaum establece tres puntos de diferencia. A) el Holocausto fue ideado y perpetrado por los habitantes del país más liberal, progresista y humanista del mundo. B) Los nazis mantuvieron cientos de archivos de documentos y fotografías. Es el genocidio mejor documentado de la historia. C) Los nazis no solo querían exterminar a los judíos del Reich. Su propósito era acabar con los judíos (y los gitanos y eslavos) de toda Europa y de toda la tierra.

En otra onda ,Ronald  Leopold que está a cargo del Museo Anne Frank recuerda que los holandeses fueron el primer pueblo de Europa en intentar detener a los alemanes. En 1941, tras las primeras deportaciones de judíos, el partido comunista holandés convocó a una huelga en febrero que duró un mes. Aunque no se detuvo la deportación, queda como récord de que no todos observaron con indiferencia la labor de los nazis.

No sé si esta protesta galvanizó a los muchos que ocultaron judíos durante la guerra en Holanda. Gente que arriesgaron sus vidas como los que ocultaron a Los Frank. Tampoco sé si esta protesta incentivó medidas masivas como la de los daneses que lograron enviar al 90% de su población judía al refugio de la neutral Suecia,  o si provocó  las protestas con las que el pueblo y autoridades búlgaras consiguieron evitar la deportación de sus judíos; o inspiró la única protesta contra las deportaciones que tuvo lugar en Alemania, cuando en 1943,  en la Rosenstrasse (la Calle de las Rosas) de Berlín,  las esposas arias exigieron la devolución de sus esposos judíos que iban ya camino a Polonia. Lo extraordinario es que, tal como las protestas búlgaras, si tuvieron efecto sus exigencias. Los maridos fueron retornados.

Mecanismos de Sobrevivencia
Sin embargo, ninguna de estas heroicas medidas afectó el destino de Anne Frank y de sus congéneres. Dos  de ellas acabaron en Bergen-Belsen, tras haber evadido peor destino en otros campos de exterminio. La diferencia es que ellas sobrevivieron y Anne no. La diferencia es que ellas se casaron y tuvieron hijos, Anne no. Anne hubiese complido 90 años este año, sus compañeras o los cumplieron o van a cumplirlos. La grandeza de los testimonios reside en los diversos modos de estas mujeres de seguir sobreviviendo. La liberación no necesariamente significó el fin de la experiencia del lager. Como dice la hija de Arianna, su madre dejó parte de sí misma en el campo.

Las cuatro han escrito sobre su pasado. Helga, como Anne Frank, llevó un diario que publicó recientemente. Lo mismo han hecho las Bucci y Arianna. Sarah tiene un texto, Chazzes les papillons noirs (Alejen las mariposas negras) que usa para dar sus clases sobre la Shoah. Las cuatro están abiertas a dar entrevistas y aparecer en documentales, pero como a muchos sobrevivientes, les ha costado décadas asimilar lo ocurrido y poder articularlo públicamente sea en palabras o por escrito.

Otra virtud que aleja “Historias Paralelas” de la infame fórmula es que cada historia comienza de manera distinta, en países diferentes, con experiencias diferentes. Las Hermanas Bucci tenían un padre cristiano, Arianna es católica, y sin embargo acaban todas convertidas en seres sin más identidad que un número, incluso Anne Frank. Por eso el ponerle un hashtag también la deshumaniza tal como sin darnos cuenta permitimos que las redes sociales nos deshumanicen.

Uno de los momentos desordenados del documental es la presentación de Fanny Hoschbaum quien no es parte del grupo de testigos. A los cuatro años vivió oculta cerca de Grenoble, y así sobrevivió La Ocupación. Hoy es ciudadana israelí, pero ha retornado a Francia a recordar a sus muertos junto con tres de sus diez nietos.  Su historia demuestra la importancia del relato individual antes que la visión global de masas de cadáveres anónimos. Lo dice una de las nietas de Fanny Hoschbaum cuando comenta que ya no se trata de seis millones anónimos, que la experiencia se vuelve personal cuando se reduce a su abuela y a su familia.

Otro nieto es Omer, un ex soldado de Tzahal. Su abuela lo cuenta orgullosa recordando que la acompañó a su última vista a Auschwitz. Para Fanny un motivo de orgullo es que portaron una bandera israelí. Ver ese símbolo dentro de ese campo donde un millón de judíos fueron exterminados como parte de un plan de destruir al mundo hebreo, es un gesto poderoso, una señal de triunfo

Para muchos de mis gatitos lectores, la bandera israelí es un símbolo negativo. No lo es para mí, aunque tenga mis disputas con las políticas de diversos gobiernos israelís, pero oír a Fanny contar la anécdota y visualizarla emocionó hasta el último hueso de mi viejo cuerpo judío. No sabemos qué relación tendrán las otras sobrevivientes con el sionismo. Anne Frank nunca lo menciona en su diario. Pero sabemos que, para Fanny, Israel es un mecanismo de sobrevivencia, como lo ha sido para millones de sobrevivientes y sus descendiente por más de medio siglo.

Pero el gran mecanismo de sobrevivencia, y la serie hace hincapié en ello, es el mandamiento bíblico “creced y multiplicaos”.  Algo que se ha mencionado en los estudios de sobrevivientesreligiosos o no— fue lo imperativo de formar familias.Lo mencionan tanto Ben Shepherd en The Long Road Home como Ian Buruma en Año Cero.  Consciente o inconscientemente se ha buscado derrotar con la fertilidad judía, el plan nazista de exterminio. Como dice Sarah, haber formado una familia “es mi venganza”.

Ese parece ser el sentir de sus compañeras quienes perdieron a todos sus parientes en la Shoah. Nada más Helga y Sarah salieron de Belsen con sus madres. A las Hermanitas Bucci sus padres solo lograron recuperarlas años tras ser separados por los Nazis. De la familia con la que Arianna ingresó a Auschwitz únicamente sobrevivieron ella y uno de sus hermanos. Sus padres, tres hermanas y un hermano acabaron en los hornos. Ella misma pasó años en un orfanato.

Se entiende una necesidad de formar una familia, pero como explica su hija Laura, Arianna también tenía miedo de tener hijos o hablar con ellos de lo ocurrido en los campos con ellos. Le ha sido más fácil hacerlo con los nietos y es interesante como ellos, Francesa y Lorenzo, han reaccionado al legado de la abuela.

Francesca confiesa haber sufrido mucho al enterarse del Holocausto (en la escuela) y luego al saber el rol jugado por su abuela en esos años. Algo curioso, ni Arianna ni Laura se casaron con judíos, pero Francesca se considera como tal. “Sono ebrea, la mia mamma e ebrea, mentre il mio padre e catolico” afirma con seguridad.

Su hermano Lorenzo tiene otra manera de solidarizar con la nonna. Tras leer el libro de Arianna, se tatuó en el antebrazo el número que en Auschwitz asignaron a su abuela. En una entrevista a La Stampa, Tatiana Bucci declaró que no le parecía ese trend de nietos de sobrevivientes tatuándose los números de los abuelos. El mismo Lorenzo comenta que su abuela no aprobó inicialmente su iniciativa. “Hay tanta gente loca por ahí” dijo la anciana. Y sabe de lo que habla.


En febrero, solo unos meses despues que “#Anne Frank: Vite Paralelle” debutara en los cines italianos, una enorme suástica apareció pintada en la puerta y muro de la casa de Arianna. A pesar de las muestras de solidaridad de parte de los amigos y vecinos, hay conciencia entre las sobrevivientes y los historiadores de un auge de antisemitismo em todo el mundo.


En Donde se Equivocó Deborah Feldman
Volviendo al tema de los hijos como una manera de perpetuar las familias perdidas, hubo un momento, cuando Sarah lo mencionaba como su modo de burlarse de los nazis, que me sentí incomoda. Luego reparé en que se trataba de un resabio del “adoctrinamiento” que sufrimos todos los que vimos “Unorthodox”. Una tesis de esa porquería era que todas las desdichas de la pobrecita Ettie nacían de ese empeño de sus mayores de convertirla en una máquina de hacer bebés solo para satisfacer su obsesión morbosa con parientes muertos. Se dice en la miniserie que toda la perversidad del estilo de vida Satmar reside en esa ofuscación neurótica con el pasado.

Cuando el Primo Moishe le recuerda a Ettie la historia del panadero del barrio que perdió a toda su familia en la Shoah, ella burlona le recuerda que el hombre está lleno de nietos. La actitud entre aburrida y burlesca de Ettietal como la de Yael, la israelídemuestran el desprecio por el Holocausto y sus víctimas que existe en gente como Deborah Feldman.

Sin embargo, la Feldman, zorra oportunista que es, escribió un libro Exodus en el que lloriquea sobre la Shoah y se va de peregrinación por diferentes países europeos siguiendo la ruta que cruzó su abuela durante el Holocausto. El libro no tuvo éxito porque se siente totalmente falso y porque la actitud de Feldman es tan infantil que en el Chicago Tribune llamaron su estilo “chick lit”.

Uno de los momentos más risibles de su narrativa es cuando, al retornar de su visita a Auschwitz, se enfurece porque el conductor del tranvía le mira la cola. Lo vergonzoso es que dijo que en ese momento sintió el poder del Holocausto. Que esta mula crea que el Holocausto se basó en nazis mirándole el culo a las judías…. Con eso se entiende su repudio a la obligación de recordar y honrar a los muertos, repudio que lamentablemente se ha colado en la manera de pensar de muchos judíos modernos.

Aunque el tema central de “Parallel Stories”se base en los relatos individuales y singulares de Anne y de las cinco sobrevivientes, la serie acaba con una generalización,  por una vez necesaria. Al hablar del exterminio de toda una generación de niños judíos, dice el Rabino Berenbaum” imagínense el talento que Alemania destruyó al destruir a todos esos niños judíos. Cuando destruyes niños, estás destruyendo posibilidades infinitas”.

En este último año, los niños y jóvenes han vuelto a ser tema de conversación, sea por ser víctimas de brutalidad o negligencia policial, o por andar tumbando estatuas, o por ser una molestia para padres al convertirse en una presencia intolerable en casa, o para sus maestros por su falta de interés en los burdos intentos de establecer un homeschooling universal.

Todo esto en una época en que el radicalismo feminista ha eliminado la existencia de sentimientos maternales y rechazado cualquier intento por empujar a la mujer a ser madre o experimentar afecto por los más pequeños y débiles. Me pregunto si todavía se entiende la vergüenza que debería embargarnos a los adultos ante la muerte de criaturas, o siquiera si podemos comprender el sufrimientos de niños separados de sus madres y viceversa.

La relación madre-hija adquiere preponderancia en estas “vidas paralelas”. Todos conocemos por las páginas del diario de los problemas de Anne con su madre. Muchas nos hemos identificado con ese conflicto que marca tantas adolescencias femeninas, pero el documental nos recuerda como Edith Frank se dejó morir de hambre al ser separada de sus hijas. ¿Podemos dudar de su amor por Anne y Margot? 
Edith Frank y sus hijas

Las otras chicas también descubren un vínculo nuevo que las une a quienes les dieron vida. Al llegar a Auschwitz, Helga miente sobre la edad de su madre y de la propia, rescatándolas a ambas de la cámara de gas; Sarah y su madre huyen del Vel d’Hiv, viven ocultas, sobreviven Auschwitz siempre juntas, son socias y compañeras a la par de hija y mamá.

En cambio, para las Hermanas Bucci, los escasos encuentros con la madre en el lager van separándolas. Son muy pequeñas y esa mujer flaca y envejecida prematuramente se les vuelve una extraña. Sin embargo, será su madre quien luchará en la posguerra para encontrarlas y recuperarlas. Ellas contarán que han sido impulsadas a escribir su historia en recuerdo de una madre silenciosa, incapaz de poner en palabras el calvario sufrido.
Mira y Giovanni Bucci

Entre el Antisemitismo y el Victimismo
En un momento en que hay tantos de diversas ideologías, credos y colores cuya felicidad y paz reside en la destrucción no solo del judío sino también de su cultura, el recordar que una vez casi se consiguió tal propósito, o al menos se lo consiguió a medias, es importante. Nos ayuda a los judíos a poner en perspectiva nuestra posición en el mundo.

Este tipo de documentales solo se manufactura en países que donde los judíos no han caído en la apatía, conformismo y cobardía que nos caracteriza a tantos. Por eso debería ser visto tanto por los judíos que militamos en este último bando como por los que, por lucirse en arenas políticas, faranduleras o financieras se olvidan de que en la Shoah no solo murieron los pobres, desconocidos y religiosos.

Vivimos, incluso en este país, un auge de antisemitismo que ya ni es solapado. Los únicos que intentan ocultarlo son los judíos liberales ateos y oportunistas, que les gusta colgarse de cualquier carro que crean los llevará al Desfile de la Victoria.  Es vergonzoso que el gran Kareem Abdul Jabbar, gloria del deporte mundial ( negro, musulmán e hijo de policía),  sea quien haya tenido que rechazar públicamente el auge del antisemitismo en los medios de comunicación y en los deportes. Es vergonzoso cuando hasta judías como la comediante Chelsea Handler, por ignorancia o tozudez, son parte de esa desenfada judeofobia.


Dije al comienzo que no iba recomendar #Anne Frank. Por años me he sentido incomoda con la repetición de clichés que “la industria del Holocausto” ha imprimido a sus productos. El Dr. Ernesto Medalla me comentó una vez que ese tipo de producto era un culto al victimismo “hasta tiene música de víctimas”. El victimismo puede producir en el espectador una reacción contraria de la que se desea lograr. En vez de compasión y solidaridad puede provocar una sensación de alejamiento de la tragedia acompañado de un desagrado por las víctimas.

Por eso es por lo que aconsejaría a otros grupos étnicos que no caigan en ese error. “Nous sommes les victimes de les victimes” dijo Mahmoud Abbas abrazando a Sir Elie Wiesel en su primer encuentro. A mí me dio risa y luego vergüenza ajena, porque Abbas, gordito y próspero, era una imagen muy alejada la del escritor en sus días de ‘victime” tras ser liberado de Buchenwald cuando no tenía fuerzas ni para alzarse del camastro. El mérito de “Vite Paralelle” es que ni Anne en su diario ni las otras cinco sobrevivientes en sus libros y entrevistas se hacen las víctimas. De su conversación resuma revancha, miedo al auge de la judeofobia, tristeza ante lo perdido, pero no hay autocompasión.


Arianna nos cuenta que los alemanes golpearon sus piernas con porras de goma con fierro adentro. No nos dice que esas torturas le costarían meses en el hospital tras la liberación. Nos cuenta de la marcha forzada desde Auschwitz a Belsen en medio de nieve, pero no nos dice que sus dedos se congelaron y hubo que amputarle algunos. Tampoco que fue un guardia de la SS el que se apiadó de ella y la puso en un vagón. De otro modo ella no hubiese sobrevivido.
Arianna a los 11 años cuando llegó a Auschwitz

Las obras más contundentes sobre la Shoah son las que muestran algo original, las que se enfocan en experiencias singulares, las que aportan una luz en medio de la oscuridad. Algo que me impresionó de las historias fue como Las Bucci eludieron los pavorosos experimentos de Mengele.

En el documental mencionan que “una mujer” las aconsejó no ofrecerse de voluntarias para ir al campo de Neuengamme (donde moriría su primito Sergio) celebre por ser un centro de exterminio de conejillos de india infantiles conmemorado hoy por un jardín de rosas. Lo que no dicen (en el libro, pero si en otras entrevistas) es que esa mujer era la boklova, la guardia polaca, ladrona en la vida civil, pero todavía dotada de compasión.
Las Bucci y su primo Sergio

El propósito de todo documental es interesar al espectador a expandir sus conocimientos buscando más material sobre el tema. Tal vez por eso es qué #Anne Frank escatime información. Después de todo, las cinco testigos han escrito sobre su experiencia de la Shoah. El problema es que aparte de Helga’s Diary (traducido al castellano como El Diario de Helga) ninguno de esos libros, ha sido traducido ni al inglés ni al español. Los libros de Arianna y de las Bucci están en Amazon, pero en italiano.

Aunque a cada rato se escriben historias y testimonios del Holocausto en diversos países europeos raramente se traducen, a menos que sean los que siguen estándares conocidos y ocurran en la Europa Oriental. De ahí que el diario de Helga haya sido traducido al alemán, al portugués, hasta el chino.
En cambio, lo que se hace en italiano rara vez encuentra traductor sea novela, testimonio o texto de historia. Por eso terminé por comprarme Gli Soldati Ebrei di Mussolini en el original. A mí me interesa el material italiano, no solo porque me toca personalmente, sino porque es tan especial y exótico, sobre todo para la gente que está harta de leer fórmula.

Acabo de hacer una búsqueda en Amazon.com usando como buscadores “Jewish Holocaust History” e “Italy”, el resultado es el de siempre: De Felice, Michele Sarfatti, Susan Zucotti y mucho Primo.  Lo nuevo, paparruchadas como The Italian Executioners de Simon Levis Sullam que busca desmitificar la narrativa de los italianos como rescatistas natos. Le ha ido tan mal con el esfuerzo que apenas le ha alcanzado para 200 páginas.  Veinte dólares muy mal invertidos por mí al haberlo comprado. Mas dinero invirtió la editorial de Princeton que lo ha publicado.

En cambio, sí pongo “Italia” o “Ebrei” como buscador me salen docenas de textos apetitosos. Por eso tengo que considerar que es una suerte encontrar material en traducción y por una vez le agradezco a Netflix algo, el haber comprado #Anne Frank: Vite Parallele”.
Jeannette y Andra

La dedicatoria del libro


ADDENDUM: Una sorpresa ha sido descubrir que nuestra Gatita Honoraria Jeannette  Kravetz Stoletzka ha conocido a Andra Bucci quien le ha autografiado una copia de su libro. Ese ha sido un hallazgo y la Dra. Kravetz nos ha dado permiso de publicar las fotograf'ías


36 comentarios:

  1. Dsde FB
    Ana Estelwen Muchas cosas me llaman la atención de este artículo. La primera es la imagen del SS salvando a la niñita de morir de frío y subiéndola al vagón. Me da mucha lástima porque es una muestra del hombre bueno que habría sido si un régimen totalitario no le hubiese lavado el cerebro. Espero que la guerra no matara esa humanidad que quedaba en él, y que con el tiempo se arrepintiera.
    La segunda es el tema de la tal Deborah comparando el Holocausto con que un tipo le mirase el culo. Muy woke, muy SJW y muy MeToo lo de convertir las chorradas en crímenes contra la Humanidad, desvirtuando así el sufrimiento de las verdaderas víctimas. Es como las gilipollas, con perdón, que denuncian a su novio por violencia de género porque en medio de una discusión las llamaron "idiota de mierda". Y es que claro, ellas son víctimas de violencia machista patriarcal. ¿Y las que reciben palos del marido borracho un día sí y otro también, o las que están casadas con un controlador celoso que les lee el móvil, no las deja ver a familiares ni amigos y le prohíbe ponerse tal o cual prenda de ropa, esas que son entonces?
    Por último, me da escalofríos el final de Edith Frank. Que me pasara lo que le pasó a ella es la peor de mis pesadillas. Ni me quiero imaginar lo que tuvo que sufrir esa pobre mujer.
    Y me quedó además una duda: ¿cómo escaparon con vida las gemelas italianas que se fueron con Mengele?

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    1. María Elena Venant Ana Estelwen Uff me has dado harto para hablar. Comencemos con la Feldman, es una oportunista, una ignorante, una ridícula, pero representa la tremenda ignorancia sobre el Holocausto que existe aun entre los judíos. Por eso digo que es muy fácil trivializar algo que todavía no entiende el mun do. Y por eso cuando me salen con que “hay que educar” a los hombres sobre el patriarcado y como ha afectado a las mujeres, a los blancos sobre los horrores de la esclavitud y el racismo, me da risa y rabia. En USA ha sido obligación integrar el Holocausto a los cursos de historia, la materia mas prescindible y sosa escolar. Los alumnos o se quedan dormidos, o se saltan la clase, o aprenden pavadas.
      Tal vez yo est’e equivocada (mucha gente, incluso judíos me han reprochado esa postura) pero yo creo que una manera de entender el Holocausto es ver como gente decente lo perpetró, como gente decente lo combatió, y como hubo gente decente que lo ignoro. Por eso me han interesado mucho los rescatistas, los Justos entre las Naciones, sobre todo los que arriesgaron sus vidas por salvar a gente anónima que no significaba nada para ellos. Y a veces un simple gesto caritativo como el del guardia revela más humanidad que la de los mandatarios de las naciones aliadas que se hacían ciegos y sordos ante el problema judío.
      Yo sabia que Edith Frank se había dejado morir de hambre, pero pensé que era por depresión. El documental nos cuenta que lo que hizo fue guardar sus raciones para sus hijas “para cuando volvieran”, era como una esperanza de volverlas a ver.
      Lo de las Bucci no lo cuentan en el documental, me imagino que lo harán en su libro. En las entrevistas que leí (puse algunos enlaces) dijeron que, aunque las median y les sacaban sangre diariamente, no llegaron a experimentar con ellas, posiblemente porque eran mixtas y los Nazis valoraban cada gota de sangre aria. El momento de mayor peligro fue cuando les ofrecieron volver a ver a su madre, pero la boklova les advirtió que no aceptaran. Ellas trataron de convencer a su primo, pero Sergio si aceptó irse de voluntario y acabó ahorcado en un sótano de Hamburgo con sus compañeritos. Las niñas estuvieron un año en Auschwitz, fueron liberadas por elEejército Rojo, llevadas a Praga, y un año más tarde a Inglaterra un centro que manejaba Anna Freud para niños sobrevivientes del Holocausto. Ahí las localizaron sus padres.

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  2. Desde FB
    Ray Badilla No la he visto, tengo que verla a ver qué tal. Visitar la casa de Anne fue una experiencia sobrecogedora y difícilmente olvidable. Me sentía muy mal y culpable de estar invadiendo los espacios que conforman la vivienda, de irrespetar la intimidad de Anne y su familia del escondite. Al acercarme el diario original que está en una vitrina sentí una sensación rara en todo mi cuerpo, un escalofrío, se me paraban los pelos, sentía frío en los pies y las manos. Cuando salí de la casa casi me desmayo se me bajó un poco la presión, fue horrible! 😢😰🤒

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    1. María Elena Venant Ray Badilla pero estuviste ahi, viste donde vivió, su diario y tuviste esa reaccion. Yo conozco gente que ha ido a Auschwitz y me cuenta de personas sacandose selfies o comiendo palomitas y dejando basura tras de si.

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    2. Ray Badilla María Elena Venant Ay no qué horror. Los milenials se han vuelto locos, son insensibles ante el dolor y poco respetuosos, como que no se dan cuenta nada.
      María Elena Venant Ray Badilla Son poco respetuosos con todo, pero eso incluye a muchos judíos. En ünorthodox"tienen una escena de un grupo de 'diversos" que incluyen a una israeli y lo unico que hacen s burlarse de los monumentos que los alemanes han levantado a las victimas del nazismo (no necesariamente judias) . todo unorthodox es un repudio a la memoria de la Shoah, y despues sale la yegua Feldman a escribir un lbro sobre temas que le quedan grande como el nazismo, la persecucion de los judios, la judeofobia, ect.

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    3. Alfonso Velasco Sendra María Elena Venant La gente ha olvidado lo que representa ese lugar y cree que todo es una atracción turística. Por eso se comporta como se comporta. Ha tenido la inmensa fortuna de no experimentar el sufrimiento y el dolor en sus carnes. Por eso no soy conscientes de lo que representa ese lugar y se comportan del modo que describe María Elena Venant.

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    4. Alfonso Velasco Sendra María Elena Venant De eso se quejaba Sebastián Haffner y ahí tenía razón. Al basarlo únicamente en el holocausto. Se pasó la oportunidad de juzgar al nazismo por los demás crímenes que cometió. Es verdad que Hitler se cebó muchísimo más con los judíos. Pero no olvidemos una cosa y es que cualquiera que se opusiera al nazismo podría haber acabado allí. Eso es lo grave de todo y lo que pasamos por alto.

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    5. María Elena Venant Alfonso Velasco Sendra A ver, en orden, para que no haya dudas.
      Primer punto. Los Nazis mataron o encarcelaron a todo el que se le opusiera. Los primeros campos de concentración (Buchenwald, Flossenburg, etc.) en territorio alemán eran para opositores, si había judíos ahí era por su orientación política no por cuestiones raciales, eso no quita que afuera hubiese docenas de medidas legales que segregaban a los judíos de la sociedad aria.
      Segundo punto: Opositor es un término muy amplio. Abarcaba los Testigos de J. porque se negaban a hacer el servicio militar. Abarcaron a refugiados españoles republicanos, a soldados polacos y rusos (los otros soldados de naciones aliadas recibían trato de prisioneros de guerra, y con raras excepciones, no llegaron a campos de concentración) y eventualmente a resistentes de los países ocupados.
      Tercer Punto: A partir del estallido de la guerra, los nazis mandaban a todo criminal (ladrón, asesino, violador, etc..) a los campos de concentración, allí se convirtieron en una elite, los Kapos que servían de puente entre los SS y los prisioneros.
      Cuarto Punto: Stalin mató mas gente que Hitler, pero siempre los denominó opositores, mató cientos de judíos, pero siempre acusándolos de algún crimen en contra del estado. Las políticas hitlerianas hacían distingo entre opositores arios y judíos. A los opositores se les quitaba del medio porque eran un peligro, a los judíos (y gitanos y eventualmente se esperaba hacer lo mismo con los eslavos) se les exterminaba como plagas, como nocivas para el pueblo ario solo por existir. Tal como a los homosexuales también perseguidos, se les consideraba un peligro social.
      Quinto Punto: Aunque desde el comienzo de la guerra se buscó matar de hambre y enfermedad a la población judía de Polonia, aunque se les hacinó en guetos y fusiló de manera masiva en los bosques, fue a partir de la Solución Final que se buscó exterminar a judíos y gitanos de manera sistemática y científica. Así se crearon los cinco campos de exterminio Belzec, Sobibor, Majdanek, Treblinka y Chelmno. Ahí (salvo pequeños grupos necesarios para la mantención de los campos) al día se exterminaban a unos ocho mil prisioneros, trenes enteros que llegaban de toda Europa eran despachados en horas.
      Sexto Punto: Auschwitz era un campo de exterminio. Ahí murieron un millón de judíos, pero era muchas otras cosas también. Originalmente fue un campo para soldados, resistentes y sacerdotes polacos. Ahí fue asesinado San Maximilian Kolbe (y no en cámara de gas que era solo para judíos y gitanos). Ahí había fabricas (Farben, la de Buna que hacia caucho sintético), los cañones Krupp, centros de experimentos médicos, talleres de costura, granjas etc.. Entonces la población no estaba ahí solo para morir sino para trabajar. Por eso tanta gente murió en Auschwitz de hambre, enfermedad, como conejillos de india, ejecutados de las maneras más horribles y cuyo único crimen fue oponerse al nazismo, pero a los judíos se les mató por ser judíos. Esa es la diferencia.

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    6. Alfonso Velasco Sendra María Elena Venant Yo tenía la impresión de que el primer campo de concentración creado por los nazis había sido Dachau. Ahí fueron a parar muchos sacerdotes y pastores opuestos al nazismo. La cuestión judía fue cambiando incluso se pensó mandarlos a Ecuador, Madagascar (un sitio insalubre para exterminarlos), incluso se pensó llevarlos a Palestina. Persecución contra los judíos hubo desde el principio. Eran una obsesión personal de Hitler, también el comunismo aunque con el pacto Molotov-Ribbentropp hubo algo de cuartel y volvió la persecución con la invasión de la Unión Soviética. Ambos tanto Stalin como Hitler se emulaban. De hecho el nazismo es un socialismo antimarxista que perfecciono los métodos de represión aunque matase el comunismo más gente. Sin el gulag no se hubiera podido inventar el Campo de Concentración. En un suplemento que leía ALBA decían que la idea de los campos de concentración se la dio Ritter. El que recibió el balazo destinado a Hitler en el Pustch del 23 y la idea vino porque lo aprendió del genocidio armenio. Ritter había sido embajador con los turcos. Otro grupo opositor que no se ha citado eran los jesuitas. Hitler tenía fijación contra ellos. Pienso en gente como Ruperto Mayer. Sí había oído lo de los Kapos hay una novela de Stanislaw Lem "El hospital de la transfiguración" que habla de ese tema y sobre todo la colaboración entre ucranianos y nazis, aunque ojo también hubo ucranianos hostiles al nazismo. El tema de la represión de los judíos por el comunismo. Debemos acudir a la última etapa del stalinismo las famosas batas blancas en la que se persiguió a los judíos. Entre ellos la esposa de Molotov. Es bueno citar que no se ha citado la eugenesia y la eliminación de personas con discapacidad durante el nazismo. Sobre todo Haffner hacía constar este punto.

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    7. María Elena Venant Alfonso Velasco Sendra No dije que Dachau (abierto en marzo del 33) fuese el primer o no campo de concentración nazi, dije “los primeros campos de concentración en territorio alemán para opositores” y puse entre paréntesis un par de nombres que se me vinieron a la cabeza. Tampoco mencioné Sachsenhausen, o Ravensbruck, u Oranienburg, que fueron otros campos alemanes creados antes de la guerra en Alemania. Hubo campos de concentración en Francia, Yugoeslavia e Italia. Mauthausen fue el gran campo austriaco y tuvo una gran población de españoles republicanos, tal como Dachau “hospedó” si así puede llamárseles al clero disidente como has señalado, tal como Ravensbruck solo fue un campo para mujeres y Bergen Belsen fue originalmente un campo para prisioneros que se deseaba intercambiar.
      Lo que quiero que quede claro es la diferencia entre campos de exterminio, de concentración, de transito y los Stalags que eran campos de prisioneros de guerra regulares.
      Si me pusiera a mencionar a todos los opositores del nazismo me tardaría tres días. Sobre la iglesia resistente, te recomiendo un libro que estoy leyendo Church of Spies: The Pope’s Secret War Against Hitler de Mark Riebling.
      Sobre precursores de los campos de concentración se citan muchos desde los de los ingleses durante la Guerra Bóer hasta El Valle Nacional de Don Porfirio, aunque ahora se dice que el primero lo crearon en la Isla Tiburón en la costa de Namibia los alemanes del Kaiser para su genocidio africano de fines del siglo XIX.
      JeJe no hemos citado porque estamos conversando sobre un documental, no dando catedra. Eso no quita que podamos traer a la mesa temas adyacentes. De hecho, voy a hacerles una pregunta personal, espero, en unos minutos. Como siempre un gusto leerte.

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    8. Alfonso Velasco Sendra María Elena Venant Igualmente María Elena ya sabes que siempre es un placer. Por cierto leí el Diario de Ana Frank el año pasado. Tenía prólogo de un escritor francés muy interesante Daniel Rops. No vi la película de George Stevens. El libro de la Iglesia de los espías estuvo propuesto en Catholic Book Club, pero como no tuvo votos fue eliminado de la votación. En España lo tradujo una editorial llamada Stella Maris, pero murió el editor y desapareció. Esa editorial editó algunos libros de mi amigo el Profesor Manuel Alfonseca. Es curioso yo oí una teoría diciendo que el origen de los campos de concentración fue en la guerra de Cuba y por obra de Valeriano Weyler. Por supuesto me opuse ferozmente a esa teoría.

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    9. María Elena Venant Alfonso Velasco Sendra Que bueno que esté traducido y ojala lo puedas leer. Sobre las teorias de campos de concentracion y origen hay miles, pero yo si creo que el Gulag es el gran modelo. JeJe no leiste mi entrada, ahi digo que yo lei mi primera edicion de Anne Frank con prefacio de Daniel Rops, el segundo fue en inglés y tenia un prologo de Eleanor Roosevelt. La peli de George Stevens fue una de las primeras pelis sobre el Holocausto que vi y una de las poquisimas en lengua inglesa hecha antes de los 70.

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  3. Muy bueno tu analisis, como siempre. Tambien me molesto mucho lo de los hashtags y chica moderna haciendo preguntas cursis (incluyendo "cuales eran tus sueños?" o algo similar, resulta redundante cuando Anna habla de todo eso en su diario). Es como si hubieran querido encontrar el mínimo común denominador, como si los chicos de ahora solo entendieran frases cortas y posts de Instagram pero no una lectura seria. En general me gusto la lectura de Helen Mirren pero ese final cuando la chica entra al cuarto de Anne se me hizo muy melodramático y para nada triste. Para mi lo mas triste siempre fue el epilogo cuando el papa regresa y encuentra el diario de su hija. A que te refieres cuando hablas de la formula de los documentales del Holocausto?

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    1. Exacto, te debe haber molestado como mam'a de z que no son representativos. Al final era casi ofensiva la KK como "asi debes leer el libro" y asi debes reaccionar, que no es el modo en que reaccionan los nietos de sobrevivientes como nos lo muestra la serie. No me referia a documentales, sino a lo que hemos hablado desde que comenzaste a editar mis novelas, de mi afan de salirme de ese esquema tan trillado de los filmes del Holocausto que termina deshumanizando los hechos, y de los peligros de hacerlo porque uno cae en babosadas como "La vida es bella" o El ni~no del piyama a rayas", no asi "JoJo Rabbit".

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    2. Sobre la f'rmula de a ficcion del Hlocausto hablo más aqui en mi reseña retroactiva de Holocaust https://confesionesgataseriefila.blogspot.com/2018/10/holocausto-el-principio-de-una.html
      Pero si no te da tiemp leerla, aqui te pongo dos parrafos:
      Puedo casi apostar que es cuando se inventan situaciones y personajes y se decae en “La Fórmula” (Léase victimismo, personajes estereotipados y dramatismo sentimentaloide y exagerado) cuando el nivel del relato pierde fuerza y mérito. Pero incluso en este siglo, “La Fórmula” ha atrapado historias basadas en hechos reales. Por eso tanto “El Pianista”(2002) como “The Zookeper’s Wife”(2016)me han dejado fría. También porque no muestran nada novedoso.

      Siento más respeto por los Bastardos de Tarantino. Primero, porque el bandido de Tarantino siempre está parodiando géneros ya existentes de pulp fiction. Segundo porque la novedad de su Fabula/ Fantasía judía (baleamos a Hitler, matamos a palos a los Nazis, mutilamos a los que quieren exterminarnos) me parece más legitima que otras entelequias lacrimógenas, melindrosas y sin sustancia como “ El niño del piyama a rayas”, “El tren de la alegría “y la repulsiva “La Vita e Bella” Al menos nadie puede acusar a Tarentino de perpetuar un lugar común que Sir Elie encontró en “Holocausto”: la pasividad judía ante la agresión Nazi.

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  4. Desde FB
    Quiero agradecer a todos los que han comentado y debatido sobre el documental y el tema del Holocausto. Aprovechando que hoy es un día de luto y ayuno para los judíos, me atrevo a hacerles una pregunta personal. Reinas Ana Estelwen y Any Dominguez, Gatito Alfonso Velasco Sendra y Comendador Ray Badilla. ¿Dónde cuándo y cómo se enteraron de que existía algo que se llama El Holocausto? ¿Fue en una clase? ¿En un libro o filme? ¿Qué edad tenían?
    Dra. Jeannette Kravetz Stoletzka como vienes de un hogar judío mas tradicional que el mío, me imagino que la Shoah era un tema omnipresente, pero igual me gustaría saber a que edad ya tuviste conocimiento del tema.
    En mi caso es fácil recordar. Ya he contado muchas veces que me enteré de que existían judíos al leer El Diario de Anne Frank, en 1969, un año antes que mi madre me confesara que ella era judía y por lo tanto yo también. La ironía es que yo ya sabia que los nazis eran malos porque a los seis años vi “la Novicia Rebelde” en el cine. Sabía que existía una guerra mundial porque Mi Pa se suscribía a una colección de Salvat en fascículos sobre la Segunda Guerra Mundial, pero esta revistase ocupaba solo de batallas. De pequeña estuve rodeada de los tíos de mi madre que tenían números en los antebrazos y yo no captaba su significado.
    Desde hace 30 años que vengo oyendo quejas de que “Como aburren con su Holocausto” “está lleno de películas sobre eso, ya latean”; “en la escuela ya nos metieron lo de Hitler y los judíos. No quiero saber más” esto último por parte de Millenials gringos. En serio, a mi me tocaron el tema en clase por primera vez en una escuela seglar en mi segundo año de secundaria (1975-76) y fue como parte de la historia de la segunda Guerra Mundial. Pero yo noto que hoy nadie se sabe el cuento bien contado, que hay muchas lagunas, falsas impresiones, énfasis en lo que no es realmente importante, mitos y que, de alguna manera, esta ignorancia va conectada con el auge de la judeofobia actual.

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    1. Ana Estelwen Yo la verdad es que ni lo acuerdo. Lo he sabido desde que tengo memoria. Estoy segura de que lo estudiamos en el colegio, pero también sé que para entonces ya lo sabía de antes.
      La que sí te puedo contar desde cuándo lo sabe es mi hija: recién cumplidos los seis años de edad me ha preguntado qué son los nazis, y más o menos se lo explicamos (sabe que mataron gente inocente porque eran muy malos, pero dejamos de lado los detalles más escabrosos, claro).

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    2. María Elena Venant Ana Estelwen O sea, si se enseña en Espana y gracias por enseñarle a La Princesa Ratoncita.
      Ana Estelwen Claro que se enseña!! Y además es un tema completo de Historia en Bachillerato, o al menos lo era en mi época. Recuerdo que los curas (yo iba a colegio de curas católicos) incluso nos pusieron un documental y organizaron un debate en clase sobre el tema.
      De hecho, te puedo adelantar otra cosa: yo en España no veo ni he visto nunca ni gota de antisemitismo. Todas las críticas se las llevan los moros.

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    3. María Elena Venant Ana Estelwen Estoy asombrada y me siento humilde, que maravilla que las escuelas católicas lo enseñen. Con razón eres tan , tan...filosemita? No sé si sea el término adecuado. Amiga mia, hay antisemitismo, en la derecha muy extrema que casi no tiene voz, y en la vociferante izquierda y muchas veces ni se tiñe de antisionismo.Por suerte, tambien hay gente muy decente, como tu y otros que me han mostrado otra cara de España.

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  5. Desde FB
    Any Dominguez Yo me acuerdo cuando vimos la Segunda Guerra Mundial en la media y el tema del Holocausto. Nuestra profe nos habló mucho del tema porque ella era judía y su abuelo había estado en un campo de concentración. Nos puso el Pianista y yo me puse a llorar en la escena donde tiran a un viejo en silla de ruedas por el balcón. Ese mismo año leí el diario de Ana Frank por iniciativa propia.
    Pero desde chica que sé del tema, en parte, por películas como la lista de Schindler.
    Desde esa experiencia en la media, he leído mucho del holocausto y visto documentales. Aunque siempre me afecta (hasta el punto de quedar pegada y soñar con eso), me interesa saber y como ves, aquí estoy jajaaj

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    1. María Elena Venant Any Dominguez Fue en colegio publico o privado?
      Any Dominguez María Elena Venant particular subvencionado y laico
      María Elena Venant Any Dominguez Y como sera en el colegio público?
      Any Dominguez María Elena Venant Yo creo que siempre se nombra, aunque sea a la rápida, hay que considerar que historia tiene cada vez menos horas :( Y el tema de la segunda guerra mundial solo se trata en octavo y cuarto medio (si no me equivoco)

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  6. DesdeFB
    Ray Badilla María Elena Venant En mis años de primaria en Costa Rica, no nos enseñaron sobre el Holocausto, que yo recuerde, solo las batallas de la Segunda Guerra Mundial, aviones y armamento. Durante mi época en el high school en Wisconsin aprendimos sobre el Holocausto y los campos de concentración en las asignaturas de clase, principalmente “English” y “Social Studies”. Pero siempre fue a través de libros y películas: If this is a man, Anne Frank Diary, Schindler's List, Sophie’s Choice, entre otros.

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  7. María Elena Venant Ray Badilla Es lo que pensé, me ha sorprendido mucho saber que en España y en Chile si es parte del curriculum y fue en Winsconsin donde era ya obligatorio. Como yo fue el cine el que te ilustró mas.
    Ray Badilla María Elena Venant En la actualidad el aprendizaje del Holocausto es obligatorio en el plan de estudios de la secundaria en Costa Rica. Tanto pública como privada.
    María Elena Venant Ray Badilla Tiene eso que ver conque hayan tenido vicepresidentes, primera dama y hasta presidente judío?

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  8. Desde FB
    Jeannette Kravetz Stoletzka María Elena Venant Todas las costumbres judías fiestas y Ritos los viví como parte de lo cotidiano y siempre pensé que en todas las familias era lo mismo, en mi casa se encendían las velas los Viernes y creo que nunca pregunté ni sabía por qué , en preparatorias fuimos a un colegio norteamericano presbiteriano sin exigencia de religión y teníamos en casa lecciones de la Torá con una morá, íbamos a clases de hebreo y nunca aprendí nada y pertenecíamos a un grupo dé niños de la sinagoga donde jugábamos y nos divertíamos inocentemente alejados de la situación . El Tema era actual siempre para nosotras con mi hermana, en el cine veíamos las Noticias en “Chile al Instante” y daban los informes de las guerra desfasadas en el tiempo así que llorábamos hasta con las noticias, mi madre siempre buscaba formas de tenernos al día indirectamente y desarrollar en nuestro corazón un sentimiento de pena e injusticia por lo que ocurría a nuestro pueblo en la lejanía y de odio hacia los nazis ( nunca nos dijo “odienlos”) pero en las películas que llegaban y las noticias sabíamos quieren eran los malos!!!.
    El tema de la SHOA se acercó a nuestra vida repentinamente , teníamos una quinta de veraneo en el campo y mi padre la dispuso de Refugio- albergue para judíos que venían de los campos de concentración y donde permanecían hasta que la comunidad les buscaban trabajo , hogar y así rotaban . Con mis padres íbamos semanalmente y les llevábamos provisiones . Cuando niños tenemos el lenguaje del amor y así nos comunicábamos con todos ,con nuestro cariño y demostraciones de afecto y recuerdo muchas veces sobar sus brazos marcados y hacerles cariño

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    1. María Elena Venant Jeannette Kravetz Stoletzka Con todo respeto, pero nunca se me ocurri'o que eras contemporanea de los hechos. Entonces estas mas cerca de la edad de mis padres que la mai? Imaginate, tres años de conocernos y nunca se me ocurrió que la guerra es algo que ocurrió como parte de tu vida. Esto es fascinante.

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  9. Hola! Me interesó bastante esta entrada porque Ana Frank fue un libro que me tocó muy profundo cuando era más chica. Como dices, fui una de esas niñas que leyendo se animó a escribir diarios de vida. Tengo unos cuantos tomos escritos en mi estante y le dejé el primero a mi mamá ahora que estamos a miles de kilómetros separadas. Como dices, quizá soy parte de la última generación de niñas que escriben diarios de vida, o quizá que se animan a la escritura en general (mi mejor amiga también escribía diarios y hasta compartimos uno).

    La verdad valoro que hayas hecho conocido este documental porque sí, la historia de Ana es la más conocida, que sea la que más alcance ha tenido ha opacado otras historias personales y con finales mucho más optimistas y esperanzadores. No sé, pero aunque me tocó hondo el diario de Ana, me deprimía mucho el final además de ser devastador, porque sí, es una historia real, pero echa abajo bastante que la buena voluntad de una familia que ocultaba a los Frank se fuese por el caño por un soplón que hoy en día sigue impune y ni siquiera se le conoce el nombre.

    La verdad el feminismo en muchos aspectos se está yendo de las manos. No sé si estés al tanto del caso de Ámbar en Chile, de una muchacha que acaba de ser asesinada por su padrastro ya asesino y se sospecha que la madre sea cómplice pues en ningún momento mientras la niña estaba desaparecida se preocupó ni la buscó, todo eso lo hicieron los demás parientes. Sectores feministas están defendiendo a la mujer, con el clásico de que ella nunca quiso ser madre y que esto se arreglaría con el aborto. Aunque esté a favor del aborto, esto me parece mezclar peras con manzanas, el aborto no va a resolver un problema que es que nos hemos desensibilizado en general. El sentimiento de empatía por los menores y desválidos es tan natural en los seres humanos que las feministas de un sector están tratando de igualar para abajo respecto a que las mujeres dejen de sentir amor por el otro como acusan que hacen los hombres. Nadie marcha por los niños asesinados en el SENAME o los niños abandonados por uno de sus padres, y me carga que digan "eso no nos corresponde a las feministas" no, pero te corresponde como ser humano.

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    1. ¿Gatita Geni, cómo anda la salud? ¿Cómo están los cien barrios porteños? No hay caso, eres una Old Soul total. O sea, vives desfazada en el tiempo y para nada (Gracias a D-s) eres ni Millenial ni Z. Nunca dejes de escribir, mira que a mi me cuesta tomar una lapicera. Me acostumbré al teclado. Qué bonito que le dejaste tu primer diario a tu mamá. La mía me hizo quemar los dos primeros y tiró a la basura el tercero. Tengo todavía los de 1975-1985, pero tuve que desarrollar una estrategia para protegerlos. Una amiga tiene otro que escribí entre 1992-1995, pero desde el 2008, mis blogs son mis diarios.
      Es cierto, desde ese ángulo los finales infelices, sea la muerte de Anne, el suicidio de Primo Levy, etc.. Disminuyen su poder para inspirarnos. Por eso es necesario el final feliz, y a su manera la historia de estas señoras lo proporciona.
      Qué vergüenza lo de Ámbar, me refiero a la postura feminista que es totalmente Me Too. Las mituteras españolas también hicieron lo propio con el caso de Ana Julia una dominicana que en revancha por haber peleado con la pareja asfixio al hijo de ocho años de él. Y las mituteras alegando que ella solo se había defendido porque el mocoso la agredió con un hacha. ¿Defenderte de un cabrito de ocho años? ¿En qué mundo vivimos?
      Yo soy pro-choice, o sea creo que debe existir la opción, pero que sea el último recurso, pero como dices ¿qué tiene que ver el aborto con que seas cómplice del asesinato de tu hija adulta? Es que también las mituteras le tienen fobia la maternidad, desearían que ninguna mujer pariera y tratan de convencernos de que no hay tal cosa como sentimientos maternales. Eso también, lo que dices de los niños del Sename, su maternofobia incluso las lleva a odiar a los niños. Volviendo a nuestro tema central. Anne se encontró en Westerbork y en Auschwitz con antiguas amigas (Lies y Sanne) y no recuerdo cual contaba que, en medio de ese horror, Anne conservaba la compasión, sobre todo por los pequeños y como lloraba cuando se decidió exterminar a todo el campo de niños gitanos.
      Te hago la pregunta que le hecho a todos los Gatos Seriefilos. ¿Cuándo y cómo te enteraste del Holocausto? ¿Fue en el colegio? ¿En un libro? ¿O película?
      Un abrazo.

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    2. Acá estoy mejor de salud, espero que tú también, me compadezco que tu mamá te haya hecho quemar dos diarios :c la mía en el peor momento de nuestra relación me hizo quemar uno y yo siendo milenial tenía un blog donde subía dibujos y donde conocí a mi pareja. No se enojó por él, sino por el contenido de mis dibujos (según ella satánicos) y más escritos, además que no me estaba yendo bien en el nuevo colegio donde me había cambiado que era más exigente. Me hizo borrar una cuenta con un montón de cosas lindas que había hecho. La verdad mi novio aún no se lo perdona, igual él pudo recuperar algunos dibujos...

      Al menos creo que en Latinoamérica los jóvenes no somos tan el estereotipo Z o Millenial en su mayoría porque lamentablemente los extremistas son los que hacen más ruido nomás. Y ante eso el resto como que nos apocamos. Igual eso hay que evitarlo, no tener miedo a decir lo que pensamos aunque sea una opinión impopular, no sé si supiste que en Chile se estrenó hace poco en Amazon una serie llamada La Jauría, trataba de venderse como LA SERIE FEMINISTA Y PROGRESISTA DEL MOMENTO. Hace unas semanas criticarla te hacía machista o facho pero un par de vloggers en Youtube presentaron argumentos que la sacaron del pedestal y salió un montón de gente a criticarla. Igual, también pienso que esta generación es más que nada cobarde, aún la que hace ruido, y me incluyo, porque nos tomamos demasiado en serio lo de "lo personal es político" que bailar twerk ya se considera algo político o una selfie cuando hay hasta gente que ha dado la vida por sus ideales. Es una falta de respeto, y tiene mucho que ver con lo de Ana Frank porque era una época donde la gente hasta se jugaba la vida por ayudar a los demás, y no es que fuesen pocos, cuántos haríamos lo mismo hoy? Es algo que hasta yo me pregunto, pero varios que chillan por causas de boca para afuera están lejos de jugársela de verdad.

      Además de Ana leí el libro de Víctor Frankl "El Hombre en Busca de Sentido" para filosofía en la media. Me encantaba como humanizaba a las víctimas del Holocausto, porque muchos sobrevivientes posteriormente se volvían personas oscuras y crueles, pero otras podían tener actitudes totalmente opuestas, o cómo aún libres no habían podido recuperarse del todo. Según sé, el mismo Frankl siendo un especialista de psicología tenía secuelas que nunca lo abandonaron. Respondiendo a tu pregunta, la verdad no recuerdo muy bien. No he visto muchas películas centradas en el Holocausto, aunque sí vi La Vida es Bella en el colegio y varios lagrimeamos menos uno (varios nos enojamos con él :c), pero antes de es ya había leído el Diario de Ana Frank. Puedo decirte más o menos que habría tenido en el periodo que empecé a conocer del Holocausto a los 12 a 13 años, y al menos el profesor que nos enseñaba nos presentó una pirámide simple ilustrativa como para entender de qué manera discriminaban a los "no-arios" (y se entendía que habían muchas etnias como gitanos, los opositores al régimen y los homosexuales, entre otros) y que en lo más bajo estaban los judíos. Recuerdo mucho que el profe nos decía "Para qué decir nosotros, ni siquiera estaríamos en el cuadro, de haber ganado el Eje quizá no la contábamos", no sabemos cuánto habría alcanzado la influencia de la ideología nazi, pero creo que mínimo los "arios" ni nos mirarían a los ojos. Yo amaba las clases de Historia y siento que nos enseñaron lo justo como para interesarnos, pero bueno, son mis clases favoritas y estoy estudiando Historia otra vez en la universidad, así que por ahí mis compañeros dicen otra cosa.

      Espero estés muy bien. En Buenos Aires seguimos en cuarentena y no podemos salir más allá de nuestros barrios. Están empezando a haber días bonitos y ojalá pronto esto termine. Hecho de menos a mis suegros y cuñado, que es la familia más cercana que tengo, aunque también a mi madre y mi ciudad natal, aunque no dejo de estar en contacto.

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    3. Me moría de ganas de contestarte anoche, pero tenía un sueño. Así que prefiero hacerlo hoy. Mi experiencia dice que los que amamos la historia somos Old Souls natos y amigos del vintage (aunque ahora los analfabestias andan diciendo que vintage es garabato, o léase=retrógrados). Yo creo que los que nos hermana a los gatos es que los humanos somos únicos, pero por siglos, primero algunas religiones, luego ideologías totalitarias y finalmente las redes sociales han tratado de homogenizarnos. Quieren convertirnos en Borks, que en el universo de Viaje a las Estrellas son una raza de gente que suelen compartir un cerebro entre media docena de individuos. Ni tu ni yo queremos ser Borks y me parece que hay muchos como nosotros, pero para la gran mayoría de gente que nació y creció con Twitter, Facebook e Instagram le es muy difícil escapar de esa tiranía que, como siempre, para dominarte usa la vergüenza, el desprestigio, la amenaza de convertirte en un paria, lo que implica estar solo y aislado. De ahí a cobardía que tu mencionas.
      Por eso es mejor desligarse de esa tiranía sin abandonar la arena de las social network. Yo por ejemplo huyo de Twitter, pero planté mi bandera en YouTube y FB, y por supuesto, este es mi espacio y desde aquí puedo quejarme a mi gusto, empapelar a quien quiero, y agarrarme de las mechas con cierto decoro con contrincantes que me hagan el peso. Imagínate, si sobreviví a mi mamá…De paso, también me rompió unas pinturas (no eran mías sino del chiquillo que me gustaba a los quince años) por ‘satánicas”. ¿Puedo saber que representaban las tuyas? La mía unos dioses con pentagramas en el pecho, pero uno tenía una Estrella de David, así que Mi Ma decidió que además de satánica eran antisemita.
      No han pasado La Jauría por acá (no que quiera verla), pero ahí me has dado a razón. El primer valiente que se atreve a hacer pedazos una serie (con argumentos válidos) pronto tendrá seguidores. Eso pasó con “” Unorthodox”. Al comienzo todos de guata alabándola y cuando surgieron voces diciendo “no es así en el judaísmo” y “la Feldman no escribió eso en el libro” a la par de señalar errores argumentales, comenzaron a abrir los ojos y a verle las fallas.

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    4. Que bueno que pienses y no dejes que los demás piensen por ti. Ciertamente, para mí los rescatistas (los que los judíos llamamos “Justos entre las Naciones) son no solo superiores a los resistentes (impulsados por necesidad, nacionalismo o ideologías) sino que son los que realmente vencieron a Hitler. Yo también leí a Vktor Frankl, y me ayudó a sobrevivir muchos momentos duros y degradantes de mi vida. Todo el sobreviviente del Holocausto, incluso quienes no estuvieron en campos, quedó marcado por traumas imposibles de borrar y lamentablemente, permitieron que esos traumas marcaran a sus hijos también. Lo vi en mi madre, lo vi en compañeros de escuelas y hasta en alumnos. Es como la marca de Caín, un daño irreparable que lleva la gente por dentro y hereda a nuevas generaciones. Por eso me pareció sano como los nietos en el documental encaraban su legado.
      Fíjate, tu educación sobre el holocausto ya trae dos errores. Primero La vita e bella (como El niño del pijama a rayas) es un mal ejemplo para comenzar a ensenar el tema. Es casi tan mala como los filmes-formula. Primero porque es una fantasía imposible que no muestra realidades coherentes, segundo porque es una peli “sin alma”. Benigni la escribió en un acceso oportunista para ganarse un Oscar y entrar en Hollywood.
      Segundo, no hay que creer que, si Hitler hubiese ganado, le hubiera ido mal a America Latina. Por algo, los nazis infiltraron tanto el continente (Sobre todo en Chile y Argentina) y no miraban con desprecio ni a los criollos ni a las poblaciones autóctonas. DE hecho, admiraban a ciertas tribus norteamericanas. Si te fijas en los neonazis chilenos y argentinos, no todos son rubios de ojos azules. El racismo nazi era muy incoherente, no despreciaban a los japoneses y sentían adoración por el mundo árabe por eso hasta hoy juran que no son antisemitas, solo odian a los judíos.
      Espero que con la primavera baje esta pandemia y puedas reunirte con tus seres queridos. Gracias por seguir leyéndonos y compartiendo opiniones con nosotros. un gran abrazo.
      PD: ¿Que dicen tus compañeros de la uni sobre el Holocausto?

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    5. PD: Ah, no, mis dibujos eran de anime o de caricaturas como Phineas y Ferb de la que fui extremadamente fan. Pero mi mamá estaba muy metida en la religión entonces, la verdad fue una etapa complicada.

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  10. Igual con el tiempo me di cuenta de los errores de la peli La Vida es Bella y como bien dices, las contradicciones del nazismo respecto a los latinoamericanos. Pero tenía entendido que los nacis (con "c") chilenos tenían sus diferencias ideológicas con el nacional socialismo alemán, y justamente los nacis chilenos reivindicaban mucho el origen mestizo de los chilenos. Por otro lado, los nazis tampoco miraban con mucha confianza a los latinoamericanos, estudié que hubo inmigrantes judíos a pesar de las restricciones durante la colonia, así que estamos "contaminados". Serían las mismas razones por las cuales los europeos desconfíaban históricamente tanto de los españoles por ser muy "semitas" o no "lo suficientemente blancos". No podemos saber con certeza lo que hubiese pasado después si ganaban los nazis, pero yo que vengo del sur de Chile no he visto que los alemanes tengan una buena opinión del pueblo mapuche más que servirse de sus tierras y conocimientos, porque por el lado de la convivencia hay una endogamia, y sí, esos alemanes no llegaron en plena hegemonía nazi sino antes de S. XX, pero es verdad que llegaron con el propósito de blanquear la zona y amparados por un estado chileno que creía que traerían el tan ansiado progreso europeo, no dudo que los colonos alemanes tuviesen conocimiento y hasta afinidad con el nacionalsocialismo alemán y cerca de Valdivia hubo una sede del partido (creo que en Máfil o en San José de la Mariquina, un amigo mío se encarga de restaurar fotos antiguas y tiene muchas).

    Bueno, en mi facultad poco hemos podido juntarnos por obvias razones, no hay clases presenciales aunque sí virtuales y hace poco recién nos organizamos a estudiar por videollamada solo los alumnos, pero sabrás que Buenos Aires tiene una enorme comunidad judía y hasta hay un centro dedicado a la memoria de Ana Frank. Yo postulé para presentarme en alguna conmemoración con mi música pero me rechazaron jaja, ya habrá otra oportunidad.

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    1. Argentina tiene una gran comunidad judía, pero también tiene una gran comunidad judeofoba, por eso te preguntaba porque creí que te habías encontrado con algún negacionista.
      Me gustaría desligar a la comunidad germano-chilena del nacismo, pero es imposible. Los nazis sabían donde meterse y era donde hubiese grandes comunidades alemanas. Ni los nazis inventaron el antisemitismo racial ni la variedad chilena nació sola. Todo está combinado.
      La infiltración nazi comienza antes del ascenso de Hitler al poder y ya para febrero del 33 hay un primer partido nazi chileno con sede en Valparaíso. Aunque la mayor razón para infiltrar la sociedad chilena es para tener aliados y espías, muchos chilenos y no solo alemanes se sienten atraídos por esa filosofía de una raza superior. La idea del supremacismo ario nació en Europa antes de Hitler nacer y viene de la majamama darwiniana sobre especies que sobreviven porque son más poderosas que otras.
      En Chile, mucho antes de Hitler, un médico de Colchagua llamado Nicolás Palacios escribió un libro llamado Raza Chilena en el que exponía unas teorías bien loquillas como que los araucanos eran una raza superior, muy aguerrida tipo pueblos barbaros europeos de los que descienden los alemanes. Que su cruce con conquistadores “visigodos” (nada de contaminación mediterránea) había provocado un mestizaje ejemplarizado por el Roto Chileno que valía más que los europeos del Sur. Los que abrazaban esta visión se sintieron muy cómodos con las políticas raciales nazis que venían de todos lados, cada jerarca nazi tenía su propia visión sobre la superioridad aria y pueblos inferiores.
      Miguel Serrano, nuestro “gran filósofo nazi” comenzó su visión de la superioridad racial y del peligro judío con la lectura de Raza Chilena. Es por eso como han notado muchos investigadores de la obra de Serrano que en Chile los fanáticos de MIguelin son no precisamente los descendientes de europeos, sino lo que los clasistas llamarían “cabros de la pobla”.

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  11. Desde FB
    Male, quería preguntarte algo de hace tiempo y ahora justo me salió una publicación en instagram. Qué opinas de estos libros que salen ambientados en auschwitz? Respetarán los hechos?son historias verídicas? Hay muchos...

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    1. Uff, hay libros y hay libros, pero ultimamente me encuentro con literatura del Holocausto que es como calcada del libro anterior, llena de cliches y con ellos perpetuaciones de mitos y falsedades, poco documentada, increible, ect. Por eso es que yo deje de escribir ficcion, me sentia incapaz de escribir algo fidedigno y digno y eso que a) yo escribo/escribia fantasia (hay muy poca en tprno al Holocausto) y b) no solo me he pasado la vida leyendo sobre el tema, ademas tuve el privilegio de escuchar las historias de muchos sobrevivientes.

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  12. Any Dominguez Una vez alguien me dijo de Las 50 Sombras de G es un libro para gente que nunca ha leído ni erótica ni pornografía. Lo mismo opino de libros como El Tatuador de Auschwitz que ha recibido tantos elogios. Son para gente que sabe muy poco del Holocausto. Obviamente los hay peores, existe un subgénero de explotación del Holocausto con novelas como Las Benévolas de Jonathan Littel u otros que nunca debieron ver la luz como El niño del piyama a rayas que sin ser utilitario es igualmente nocivo.
    Sobre los mejores libros sobre Auschwitz tenemos una división entre las memorias de sobrevivientes que por ser reales son mejores, y la ficción. Ahí hay poco sobre la vivencia en el Lager, por qué ..aunque suene cínico…un sobreviviente me dijo que lo peor de estar en un campo era “la monotonía del horror” Ver día tras día el mismo ciclo de muerte y tortura puede (no en el cine) en papel volverse tedioso e insoportable. Por eso la mayoría de las novelas sobre el Holocausto no se detienen mucho en la experiencia en los campos mismos, sino en el preámbulo y la secuela.
    Así que lo mejor de esa escasa literatura, según mi opinión (y pensando en libros traducidos al castellano) voy a darte una mini lista con enlaces a Amazon (por si otros lectores se interesan).

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