Cuando Álvaro
Cuevas, en la revista Milenio, recomendó esta serie como “la mejor del año” me embargó el
escepticismo. Después de todo, ya se ha hecho tanta ficción y documentales
sobre el Terremoto de México de 1985. ¿Sin pasarme de cínica, pero qué puede
ofrecerme a mí que he sobrevivido cinco sismos de más de siete grados
incluyendo el más grande del mundo? Por curiosidad, le hinqué diente esperando encontrar datos nuevos.
Algo que trascendiese el esquema que Hollywood le ha impuesto a las disaster
movies. Nada de eso, ni siquiera los cacareados efectos especiales pueden
opacar malas actuaciones y un argumento que se asemeja más a un episodio de La
Rosa de Guadalupe que a una seria visión de una catástrofe que cambió la
sociedad mexicana.
Recuerdos del Terremoto
Tengo presente
ese terremoto porque fue una de las varias tragedias que cayeron sobre América
Latina ese 1985. Estuvo enmarcado entre el Terremoto de Santiago en marzo y la
Tragedia de Armero ocurrida en Colombia en noviembre. Parecía que los hados se habían enemistado con
nuestro continente. Recuerdo particularmente la mañana del 19 de septiembre
cuando bajaba la escalera para irme al trabajo y mi mamá estaba viendo Hoy Mismo.
De pronto que me
grita: “Está temblando fuerte en México. ¡Mira a la pobre Lourdes Guerrero!” Y
no me olvido del “İAy, Chihuahua!” de la periodista que fue super valiente porque
Televisa Chapultepec sustentó grandes daños. Cada Minuto… nos muestra
una imagen de la torre de comunicaciones de Televisa yaciendo en el suelo. Esa
es una imagen que recuerdo, edificios nuevos arrancados de cuajo, como arboles
después de un tornado, para quedar tendidos en el suelo.
Recuerdo a Don Jacobo
Zabludovsky pasando por sectores afectados transmitiendo desde su auto.
Recuerdo, una imagen nocturna en que Zabludovsky, en el área del Complejo de Edificios
Tlatelolco , reconoció un rostro entre los socorristas. Era Placido Domingo,
entonces el mejor tenor del mundo, ayudando en las maniobras. Aun tras saber
que sus parientes habían perecido en el derrumbe del Edificio Nuevo León, el cantante
continuó en las labores de búsqueda.
Inolvidable Marcos
Efrén Zariñana “ La Pulga” , un hombre humilde que, debido a su contextura física,
podía deslizarse entre rendijas de escombros y encontrar sobrevivientes. Como
la Perrita Frida del 2017, ellos fueron el rostro del terremoto en el extranjero.
Imágenes de esperanza. No es que todo fuese color de rosa. Teníamos conciencia
al otro lado de la frontera de que no se podía pedir peor presidente que Miguel
de La Madrid para enfrentar un desastre natural. Más o menos como vivimos en
Chile el 2010 con nuestra Gorda Bella.
Se dice del
Terremoto del 85 que México descubrió una cultura de terremoto, pero también su
alma. Nacería del desastre un tipo de defensa civil más organizado y útil que
los militares y policías que solo obstaculizaron las maniobras. México, al
menos el DF, aprendió que hay que ser solidario
y crear redes de ayuda civil como los famosos “Topos de Tlatelolco”.
Ese tema ha sido tratado tanto en documentales como en filmes tales como Trágico Terremoto en México (1987) y la aportación de Kuno Becker, El día de la unión (2018). Pues ahora Jorge Michel Grau nos trae otra vez la misma fórmula y Álvaro Cuevas babea con ella. ¿Se entiende? Yo esperaba que apareciesen los verdaderos héroes anónimos u oficiales, pero seguimos con marionetas estereotipadas.
¿Para qué poner a
periodistas como Zabludovsky (hoy cancelado por considerársele un lacayo del
PRI) cuando podemos tener a Camila (Maya
Zapata) la feminista independiente que ha dejado a familia y novio plantados al
pie del altar para venir a México a ser una gran reportera? Solo que el
terremoto le despierta a Camila la conciencia de que un verdadero periodista es
quien da voz a los que no la tienen. Ayy! Un solo de violín por favor.
¿Quién necesita
de La Pulga cuando tenemos a Osvaldo Benavides como el multitasking Dr. Ángel Zambrano,
jefe de obstetricia del Hospital Nacional? El médico que tanto salva a una
parturienta, despide internos, como que
se pone a cavar entre los escombros para salvar a sus enfermeras y sus pequeños
pacientes atrapados en el NICU.
No vamos a
recordar a Placido Domingo, hoy cancelado porque varias señoras lo acusaron de
seducirlas con falsas promesas de llevarlas a la fama. Mejor pongamos a Gabriela
(Damayanti Quintanar), la esposa gruñona a la que agarró el sismo dentro de un
colectivo y emergió con apenas un tacón roto. La serie se la pasa tres capítulos
en lo que le toma a Gabriela llegar al edificio Nuevo León donde toda su
familia ha quedado sepultada.
¿Aporta algo
Nuevo Esta Miniserie?
Francamente, Milenio
se atragantó con tanto elogio innecesario. Si le vamos a la narrativa coral de
personajes ficticios, me quedo con Trágico Terremoto en México. Nunca olvidaré
a Diana Golden―en uno de sus primeros roles―como la joven madre
soltera que el terremoto agarra en la sala de partos. Mientras cae cascote a su
alrededor, Patricia salta de la camilla y se refugia bajo ella con su bebé que
todavía está unido a su placenta. Escena fuerte que me impactó más que todas
las sagas de los personajes de esta historia de Jorge Michel Grau.
No es que pida yo
que nos den una cursilería como El niño y el Papa, donde la Vero Castro
andaba buscando a su hijo en medio del desastre natural. Tampoco necesitamos de
una tragedia truculenta como 7:19 que Michel Grau filmó en el
2016, pero si más intensidad emocional, más identificación con las víctimas de
un terremoto.
No debemos pasárnosla
en flashbacks del pasado de la periodista , del doctor y de los atrapados que
nos alejan de la realidad presente. El mismo terremoto toma menos de tres
minutos en pantalla y sus efectos especiales son menos impresionantes que los
que Kuno Becker incluyó en su fracasado recuento del sismo.
Mucho se han
llenado la boca con el uso de una tecnología de punta para filmar esta
miniserie. Aparentemente, no se utilizó tanto la pantalla verde. En cambio,
ponen de fondo imágenes magnificadas del verdadero terremoto y dicen que han
usado el hiperrealismo que emplean en
El Mandalorian y La Casa del Dragon. Son tecnologías de
videojuegos. ¡O sea, esta visión de tragedia urbana y denuncia social la ponen
al nivel de un videojuego! Qué insulto a la memoria de las víctimas, de sus
deudos y de los rescatistas.
Alvaro Cuevas socarronamente dijo que no podíamos quedarnos
con la versión de Televisa y que esta serie revelaría secretos. ¡Chacha Chan! Pues
no hay nada de nuevo. Sabido es que La Madrid, temeroso que les cancelasen el
permiso para ser sede del Mundial de Futbol, trató de bajarle el tono al cataclismo
e incluso negó la necesidad de la ayuda extranjera, tal como lo hizo la Dra.
Bachelet en el terremoto del 2010.
Pues en Grupo Formula, Michel Grau reafirma que la ayuda internacional
llegaría más tarde debido a esta decisión presidencial. ¿Como así, si en su
serie, a las siete horas del terremoto ya están aterrizando aviones de otros
países cargados de insumos y no se les permite desembarcarlos? Esto ante la cámara
de la omnipresente Camila, que da ordenes en inglés ya que es bilingüe (toda
una MarySue esta chica) hasta que se la lleva la policía.
¿En qué quedamos?
He oído de aviones que no hicieron caso y se aparecieron en México con grupos
de rescatistas, perros e insumos y que sobrevolaban la ciudad sin permiso de
aterrizar, pero nunca a unas horas del sismo. Y así el risueño director le dice
a Joaquín López Dóriga que Cada minuto cuenta mostrará la
demora de la ayuda humanitaria internacional, demora causada por el capricho
del presidente.
Para que Michel
Grau no sea el único mentiroso, el Teacher, que entonces trabajaba para Imavision,
cuenta que el gobierno, tras decir que todo estaba controlado y se las podían
solos, ordenó a la población civil que retornase a sus casas y
dejasen el rescate en manos del ejército. López Dóriga dice que él se negó
a transmitir esa orden. Pues hay videos que dicen lo contrario
La historia
no-oficial declara que De La Madrid fue parte de una trilogía satánica
compuesta por el alcalde de México, Ramon Aguirre Velásquez, y por el Secretario
de Gobernación, Manuel Bartlett. Pero
aparte de querer evitar que la FIFA les quitara la sede y de proteger intereses
ajenos, no hubo otro motivo para impedir la ayuda extranjera. Pues la serie se
pasa de lista e inventan que el gran villano es Ignacio Zambrano (hermano del
Dr. Ángel) que trabaja para el Secretario de Turismo, que aquí se llama
Guillermo cuando en realidad era Antonio Enríquez Savignac, porque quieren sacar
tajada de los dineros que generará el Mundial del 86.
¡Que cuento más
improbable, tremebundo y forzado! En la historia política mexicana siempre hay
alguien que quiere quedarse con el dinero ajeno, pero este no fue el caso,
simplemente porque Ignacio Obregón nunca existió. Inventarse un personaje e
inventarse una estafa es otra manera de encubrir los verdaderos hechos y a los verdaderos
culpables.
En la serie,
Ignacio y el siniestro Guillermo que pasa a ser Secretario de Gobernación, se
van al Universal a amenazar a la prensa si no les dicen donde anda Camila. Es
cierto que se habló de una mordaza que impuso el gobierno a los medios. Tampoco
es como que era posible transmitir mucho,
menos a ocho horas del siniestro, pero también como Camila no existió,
ni Guillermo, ni Ignacio, todo este episodio pierde credibilidad. En realidad,
toda la serie es inaudita. Para ser justos concentrémonos en lo que si fue
cierto.
Un tema que
circula mucho en la decena de episodios es la mala construcción, los manejos
corruptos que han provocado el despido de Alberto, el marido de Gabriela, y el
derrumbe del edificio que lo deja atrapado bajo los escombros. Hago memoria y
como tenía en esos días muchos amigos y condiscípulos mexicanos, el terremoto
entraba en todas nuestras charlas en la cafetería de la uni.
La explicación
para los daños arquitectónicos que se llevaron por delante no solo al Complejo Tlatelolco,
sino también a varios hospitales y construcciones elegantes como los Hoteles
Regis, Continental y Del Prado, es que el DF estaba construido sobre la laguna
seca de Texcoco. Eso era equivalente a vivir en arenas movedizas. No obstante,
antiguas construcciones coloniales y templos aztecas sobrevivieron incólumes.
Entonces circuló el rumor de corrupción en la construcción del Nuevo
León y de otras obras modernas y caras. Solo que no todas se cayeron. Sobrevivieron
la Torre Latinoamericana y varios edificios
en el Paseo de la Reforma.
Las Costureras
de San Antonio Abad
Una novedad de la
miniserie ha sido la revelación de talleres clandestinos donde las operarias
estaban bajo llave incapaces de escapar durante el sismo. Aunque se han hecho documentales
como el conmovedor No les Pedimos un Viaje a la Luna, que está en
YouTube, esta sería la primera vez que se trata el tema en una serie.
En su exploración post-terremoto, Camila
encuentra un taller de costura, graba lo que ve, escucha los testimonios de las
costureras y consigue que algunos hombres rompan los candados y liberen a las
sobrevivientes. Entre los rescatistas hay un par que” libera” la caja fuerte. Llegan los dueños del taller y
exigen el regreso de la caja fuerte, pero Camila los acusa de la muerte de
operarias que no alcanzaron a salir del edificio que ya experimentó serios
derrumbes y está a punto de colapsar. La reportera los amenaza con su poderosa
arma: su cámara. Primer round lo gana Camila, que sigue su camino puesto que ya
ha hecho su buena acción del día. Ojalá la realidad fuera tan simple.
Los talleres
clandestinos de modistas ha sido una lacra en muchos países. En el Dia de la
Mujer homenajeamos a las casi 200 víctimas de un siniestro en uno de esos
talleres, The Triangle Shirtwaist
Factory en Manhattan . Ahí perecerían 146 operarios (123 mujeres), la mayoría
inmigrantes. Cien eran judíos. Los culpables de las malas condiciones que
provocaron el incendio, eran también inmigrantes judíos. Si me detengo en estos
detalles es porque la historia se repitió en México en 1985.
Los dueños de los
talleres de San Antonio Abad eran inmigrantes, en su mayoría árabes y judíos. Las víctimas
eran mexicanas, tan pobres que debían aceptar las condiciones laborales infrahumanas
que les ofrecían. No tenían contrato, se las despedía por cualquier infracción,
no recibían beneficios y la paga era miserable. El espacio de trabajo era
insalubre y peligroso, tal como se descubriría esa mañana del 19 de septiembre.
Los talleres
estaban localizados en construcciones de no muchos pisos en la calle de San
Antonio Abad. El problema es que habían sido construidos para albergar
oficinas, no para soportar el peso de bodegas de rollos de géneros, de
maquinarias y de tantas obreras que fungían como costureras y planchadoras. Fue
ese peso el que provocó el derrumbe. Cuentan los rescatistas que era un
espectáculo macabro con telas y vestidos ondeando al viento, mientras la sangre
fluía de entre los escombros. La serie
nos hace creer que todas ya salieron, cuando grupos socorristas
extranjeros llegaron a sacar mujeres de debajo del edificio desplomado hasta
diez días después del sismo.
Los socorristas
fueron, como muestra la serie, ciudadanos comunes y efectivamente muchas
mujeres estaban bajo llave. Los dueños se apersonaron, pero para salvar sus
telas, sus máquinas, sus cajas fuertes. Al ver tanta mujer aglomerada exigieron
la presencia del ejército para que con sus armas las desalojaran y para
proteger sus pertenencias, puesto que efectivamente se había perdido una caja
fuerte.
El hoy diseñador
de modas Daniel Ramírez Enríquez ,entonces un simple operario, confiesa que, si se sustrajo una caja fuerte, pero como no
pudieron abrirla, la vendieron como chatarra. En la serie en cambio, al no
poder abrirla, defraudados y enojados, los individuos asaltan a Gabriela y le
roban el bolso. ¿Adónde quedó el mensaje de solidaridad del terremoto y que
debió ser el fondo de la serie? Qué feo modo de ensuciar a los que realmente
ayudaron a salvar a las modistas.
Hubo otros
descubrimientos que salieron a la luz, irónicamente, al quedar bajo escombros. Comisarías
donde se hallaron cuerpos con señales de tortura, el hallazgo del cadáver de un
abogado defensor que había sido dado por desaparecido, etc. El mismo caso de las costureras de San Antonio
Abad es presentado de manera tan paupérrima que se reduce a una bravata de Camila
y es parte del peor error de la serie: la exageración de personajes y diálogos
que no corresponden a una realidad plausible. El haber puesto el peso de la
historia en tres personajes y no hacerlos ni cercanos, ni simpáticos, ni reales
arruina el efecto deseado de crear una obra informativa y conmovedora a la vez.
Lo Inadmisible
y Lo Risible
Uno de los peores
defectos de las recientes series mexicanas de plataforma (ocurre tanto en Las Azules de Apple tv+ como en Como Agua para Chocolate de la HBO) son esto diálogos inconcebibles,
salpicados de errores léxicos, modernismos
y denotada influencia del inglés. En Cada minuto…los personajes se
mandan discursos absurdos que suenan (según los guionistas) épicos; Camila en
San Antonio Abad parece la Libertad de Delacroix guiando al pueblo; Ángel
comienza su trayectoria excavadora encaramándose sobre las ruinas y lanzando
una especie de Grito de Dolores. Como
dijo en Mundiario, Pablo Silva Durán. “así que los diálogos
forzados para denotar cierto heroísmo, estaban de más”.
Y lo que llega a
un nivel risible son las peleas personales que Ángel sostiene en los túneles
con su hermano y con el esposo de su enfermera. Hoy sabemos que en eso túneles solo
cabían perros y La Pulga, que no circulaba casi el aire. ¿Me van a decir
entonces que se iba a gastar oxígeno y energías con discusiones sobre
pendejadas? ¡Por favorrr!
Las fallas principales
de una serie, que debió ser grandiosa y emocionante recaen en malos diálogos, y un hincapié en tres personajes que son
interpretados por actores de poco rango. A Damayanti Quintanar yo solo la vi
haciendo de Yolanda Zaldívar en La Historia de Selena. No es la peor del
trio, pero el personaje de Gabriela es tan antipático que nos impide
conectarnos con su tragedia de madre cuya familia ha quedado sepultada bajo su
edificio.
Curiosamente, Maya Zapata hizo de Selena en
esa miniserie. A mi Maya me cayó simpática en Casi Divas, y sé que ha
hecho cosas importantes desde entonces. El rol de Camila no es el mejor de sus
logros. Hasta su aspecto, su modo de hablar, tieso y artificial, la hacen
parecer heroína de comic. En cuanto a Osvaldo Benavides….İ Ayy! Este Dr. Ángel no caería
tan pesado si lo interpretase otro más capaz. Como que seguimos viendo al hijo de
María, La del Barrio, ahora con bata blanca.
La última―y no
la menor― falla es que toda la acción , o sea diez episodios, se centra en las primeras
diez horas del cataclismo. Estamos hablando de un suceso que tendría tantas
ramificaciones y variaciones que todavía siguieron las labores de rescate hasta
octubre. Piensen que, aunque en el edificio Nuevo León se comenzaron las
labores de rescate la noche del 19, fueron
interrumpidas al día siguiente por una réplica tan fuerte (7.1 Richter)que tumbó 20
edificios todavía en pie y provocó un cese de maniobras.
Aunque de La
Madrid sobrevoló la ciudad en un helicóptero en el primer día, su primer y
ultra tardío mensaje a la nación ocurrió 36 horas después del sismo. Hubo gente
que fue rescatada entre cinco y diez días después del terremoto. Los Niños del
Milagro, nombre que se les dio a un trio de neonatos que sobrevivió bajo las
ruinas de hospitales, sin auxilio humano ni alimento, estuvieron una semana
sepultados antes que se llegase a ellos.
Entonces es
absurdo dimensionar el desastre a solo diez horas de ocurrido. Es absurdo
imaginarnos que Camila alcanzó a recoger material tan peligroso en un par de
horas y que los del gobierno intentaron detener su difusión, si a esas alturas apenas se tenían noticias de
la magnitud de daños ni motivos para ellos.
Se va a hacer una
segunda temporada, pero con los mismos personajes insulsos. No veo que pueda
mejorarse la cobertura de un mega suceso. Al final Cada minuto cuenta se
queda en minutos perdidos, colgando entre la formula hollywoodense del disaster
movie y la cursilería de El Niño y el Papa. En ningún instante logra
capturar el miedo, la irrealidad que se vive bajo el impacto de las fuerzas
telúricas tal como no sabe retratar el drama político que se desarrolló una vez
que estas se desencadenaron.
Contenido
Violento y Gory. No hay
nada más violento que cuando la tierra nos ataca, pero no hay escenas graficas
de cuerpos destrozados o muertes macabras que suelen ocurrir en los filmes de
desastres. Gabriela es asaltada por unos rescatistas, pero sin violencia.
Camila es asaltada por las Fuerzas del Mal, pero se les escabulle como la Wonder
Woman que es.
Contenido
Sexual y Desnudos:
Ninguno. Algo que se aprecia. Hasta la escena en que Ángel pone a un recién
nacido rescatado en el pecho de la madre muerta para alimentarlo (un hecho
factual) está hecha con buen gusto. En un flashback, Gabriela recuerda ser seducida por su jefe,
pero tampoco es nada gráfico.
Factor
Feminista: Se supone que
Camila Toledo es un ejemplo de fémina independiente y ambiciosa que no deja que
nada se interponga en su camino de hacerse un nombre en el periodismo, pero la
tragedia del terremoto la hace ver que debe luchar por la verdad y la justicia
antes que por sus derechos personales. Gabriela es una mujer que trabaja, pero
vaya que se queja de ser el único sostén económico de la familia y eso que se está
dando un gusto con el jefe.
Chave es una enfermera
devota que es jaloneada por un lado por un marido que quiere llevársela al otro
lado de la frontera, por otro por su jefe, el arbitrario Dr. Zambrano. Al final
de la primera temporada, el marido le da la libertad para que siga al servicio
de Ángel. ¿Es esa la mejor elección? Ninguna de estas mujeres es un ejemplo de
empoderamiento femenino. Yo prefiero quedarme con el sindicato de costureras,
el primero en México, formado a raíz del terremoto por Evangelina Corona, algo
que no aparece en esta temporada.
Factor
Diversidad; Al elegir
contar la historia de la redención de tres personajes y de crear un marco de
tiempo de un par de horas, la serie perdió la oportunidad de mostrarnos la
riqueza de diversidad étnica, sexual y de otro tipo que existía en el DF.
Apenas, casi al
pasar, descubrimos que el médico despedido es gay enclosetado. No se atreve a
donar sangre, porque ese año, allá y aquí se creía que ser homosexual era ser
portador del SIDA. Pero como todo, esta es solo una viñeta que pasa casi
desapercibida entre tanta arenga y tantos brincos de un arco a otro sin que al
final tengamos una idea de cómo era la sociedad entonces.
En otra
simplificación, los libretistas dividieron la sociedad mexicana entre los ricos
y poderosos, grupo que abarca políticos corruptos y patronos abusivos, y el
resto de la población . También las clases pudientes fueron afectadas, basta
pensar en los huéspedes de los hoteles de lujo que se desplomaron en el Centro Histórico.
Solo en el Regis,
fallecieron Rafael Hernández Piedra, ex Gobernador de Durango, y la escritora y dramaturga, Margarita Mendoza
López García. O si querían basar un personaje en alguna embarazada de “la alta”
y contrastarla con las que murieron en el Hospital Nacional, se pudieron basar
en lo vivido por la vedette Olga Breeskin que, en su octavo mes de gestación,
apenas logró escapar del derrumbe del Hotel Continental. Y si querían leyendas de cajas
fuertes, ahí está la de Rigo Tovar enterrada, junto con el hermano del cantante y
conteniendo toda su fortuna, tras el
derrumbe de su pent-house.
La Primera
Temporada está disponible en Amazon Prime. Y no, no la recomiendo.
I cannot say I was ever planning to watch it LOL
ResponderEliminarBut you led me to believe you would. Otherwise I wouldn’t have tagged you. On Hollywood Spy when we were talking about La Palma, you said (about disaster filsms) “ I like them too and watch then all” And added that you would watch La Palma and “verbatim” :”the one on the quake in Mexico in December”.
EliminarI probably would have if I had nothing else to watch currently, I might have checked them out later in the year, but since you say they are terrible I won't. I did finish Valhalla last night and will have an open spot next week for something new.
EliminarI certainly don’t recommend it. It tries to be historical and ends up in a pack of lies, fails at being a social comment and the special effects stink.
EliminarIn my despair and deprivation, I have turned to spy yarns. I’m watching Black Doves in Netflix, The Agency in Paramount and may give a try to the Day of the Jackal. Care to join me?
Thanks, but no, cannot stand Keira Knightley and Ben Whishaw also grates on my nerves for some reason, probably because he is always the same. I started Dune Prophecy, it is as interesting and riveting as a plate of cold mash potatoes. But it has just six eps so will finish it probably. I am also watching Serpent Queen and La Maison.
EliminarI used to hate Keira, but now she’s my favorite, although I favor her period pieces. I used to hate Whishaw too after Brideshead. How dared he impersonate the most beautiful boy in the world? You are right. He is wooden, and looks like an Irish Setter, but he knows how to pick characters. He was the only personable character in The Hour, he made me cry in Fargo, and he is adorable here.
EliminarContinuing with my modern spy yarns (boy! I miss the old ones. These are pure technology). I hit Slow Horses…and liked it. I also tried The Night Manager. Never saw it back then and second season is only coming this 2025.
What is it generally in the spy series that draws you so much? I usually avoid anything conspiracy related and political because there is so much of it in real life. Have you ever watched Bodyguard with Keeley and Dicky? That one was amazing.
EliminarTo be honest, I’m not drawn to spy stories. I was never a James Bond follower, I find Forsyth and Le Carre’s novels a bit boring, I put up with Cold War tales because it lets me see what the world was like back then, although the contemporary spin of those tales is mistaken and misguided.
EliminarI don’t like modern espionage fiction for the reasons you just stated. Add that I don’t like the agenda behind them. For example, in Jackal and Slow Horses, terrorism seems to come from the far right, and we know where terrorism stems from.
I watched Bodyguard and liked it. You can find my review here, just check Bodyguard in the tags. but I only watched it because some friends watched it with me. I’m watching Day of the Jackal and Slow Horses because they are on several lists of the best of 2024; Black Doves because I enjoy stories of housewives leading double lives and The Agency because my brother wanted to watch it. But I’m not touching things like Mr. and Mrs. Smith or The Diplomat. I have my standards. In truth, if I was not experiencing deprivation and starvation, I wouldn’t watch any of these series. However, there are no period pieces and modern stuff sucks.
Happy 2025 Gattocito!
And it seems we will have even less of period delights and thus this is the first year I am not even making a spotlight on the upcoming shows. Even what Brits have announced will all be shitty. I managed last night to download full Count Monte Cristo series with my husband Sam Claflin, will start it tomorrow if my English subs for it are right and functioning :)
EliminarI don’t remember if it was Variety or Deadline that said “King and Conqueror” was to be a resurrection of period drama, but Period Pieces are not gone, is just that there are very few. We’ ll have westerns this winter; Wolf Hall and Miss Austen in spring. I hope we’ll get King and Conqueror nbd The Leopard before September and then we have Gilded Age 3.
EliminarI get the feeling that is in Europe where they cut off the PP production, lack of money I suppose. But the Brits have a couple of things they could launch: House of Guinness and that one about The Mitford Sisters seem to be ready. In fact, Outrageous is coming via Britbox in the summer, so probably PBS will pick it up for the fall Season.
Wait, we’ll have A thousand Blows in Disney on feb.21
But all those seem shitty to me, nothing big or worth looking forward too, even the King and Conq seems cheapish looking, hope I am wrong about it. Wolf Hall had such bad viewing that nobody is even torrenting it LOL I hope I will find the fourth season and the final one of Sisi and that will be my highlight of the year probably. I will have something Russian period set tomorrow at the spy's. They just started airing Monte Cristo over there as well.
EliminarDe Macarena Muñoz Ramos desde FB
ResponderEliminarentiendo que a alguien como a ti nadie puede venir a contarle lo que ocurre o deja de ocurrir con un desastre natural como este, pero hay cosas que vivimos los ciudadanos, incluyendo testimonios, que nunca podrán reflejarse tal cual ocurrieron. No sé qué tanto has investigado pero leyendo tu crítica, tengo la impresión de que (incluyendo está nueva serie) todo está elaborado según algunas agendas, sabes a lo que me refiero. Hoy México está gobernado por una seudo izquierda y se ha vuelto costumbre tirarle mierda a cualquier gobierno anterior al de López Obrador. Así que si se investiga mediante publicaciones recientes o inclusive elaboradas en este siglo, todo lo ocurrido hace cuarenta años será sobredimensionado o tergiversado de manera que hunda o ensalze según a quiénes. La ayuda exterior no tardó en llegar porque, a pesar de que eran otros tiempos, la noticia llegó hasta el último rincón del mundo. Cruz Roja nacional e internacional, clubes de rotarios, grupos de boy scouts. Llegó tanta ayuda que fue imposible repartirla y pronto se hizo rapiña. Unos familiares nos comentaron que en un mercadillo de Celaya, al mes del terremoto, ya estaban vendiendo palas y casas de campaña nuevas de la Cruz Roja.
La ayuda internacional fue difícil organizarla y repartirla. Y el ejército y la policía no entorpecieron nada, pero se vieron sobrepasados por los civiles. Yo lo vi, nadie me lo va a contar. Hacía menos de treinta años que hacía ocurrido otro terremoto muy parecido (el del 57 cuando se cayó el Angel de la Independencia) pero la gente casi se manera inmediata empezó a mal organizarse sí, pero a tratar de ayudar quitando escombros con las manos, preparando comida, echando una mano a los vecinos (nosotros íbamos a una casa cruzando una de nuestras calles para tomar agua de su toma de agua que entraba directo de la calle pues en mi edificio no había luz y el agua no podía subir desde la cisterna) y ayudando en todo tipo de cuestiones. La cuestión de los hospitales fue peculiar, sobre todo por los derrumbes (el Hospital Juárez quedó totalmente devastado y es de ahí de donde surgen los chiquitos recién nacidos,creo que siete u ocho, que sobrevivieron una semana debajo de los escombros). El Hospital General también quedó en muy mal estado y es por eso que cuando se reconstruyó se repartieron por todo el predio enorme que abarcaba, construcciones de un piso que son oficinas, consultorios, quirófanos, pabellones y comedores. Hasta hace apenas siete años se construyó una torre de cirugía de cinco pisos que incluye habitaciones, quirófanos y en la parte de abajo consultorios.
Desde FB de Macarena Munoz Ramos
ResponderEliminarMaría Elena Venant Me llama la atención está parte de tu crítica, porque tal pareciera que estás viendo el pasado con los ojos revisionistas del siglo XXI. Aquí, en aquel momento, se creía firmemente que el sida se contagiaba incluso con saludar de mano. Así que meter a un médico que sale del armario en momentos como ese, me resulta incongruente y que no aporta nada. ¿Diversa étnica y sexual? Perdona, pero la Ciudad de México a pesar de lo que se quiera hacer creer de cara al extranjero, no ha tenido ninguna diversidad. Hay millones de prejuicios por el color de piel, la edad, la condición social, las cuestiones moralinas, y no se diga en el plano sexual. A veces parece que la gente extranjera se cree que porque se adoraba a un cantante gay (Juan Gabriel) todos los mexicanos son open mind y aceptan la diversidad sexual alegremente. Así que, no veo que viniese al caso mostrar esa supuesta diversidad que no existía en aquel momento.
Para Macarena Muñoz Ramos Comienzo por agradecerte la tremenda cantidad de datos que has aportado. Básicamente corroboras que la serie miente, que es lo que yo digo/creo.
EliminarLa diversidad se refiere no solo a la sexual, incluyo (por pedido de mis lectores ) un a mini guía sobre contenido que puede ofender o atraer. Factor Diversidad incluye además de orientación y diversidad sexual, religión, etnicidad, clase social, incluso trastornos físicos y mentales. Aunque en Amazon se esmeraron en no teñir de rubio a la gente como en las telenovelas, no me parece que los tres protagonistas sean representativos. Tal como me hubiese gustado que hubiesen incluido a gente de otra clase social, o más pobre o más pudiente.
Aunque aquí en USA cundía la desinformación sobre el SIDA, en 1985, sabíamos (me refiero a mi espacio y amistades) que el mayor contagio venia de una transfusión. En 1983, mi madre, antes de una histerectomía completa, casi se desangró y para operarla hubo que meterle sangre de cualquier hospital. Por años la tuvimos que estar monitoreando para ver si la habían infectado sin querer.
Sobre la apertura de la sociedad mexicana al LGTB, recibo informes discrepantes, hasta el punto que ya no sé qué creer. Te sorprenderá, pero en USA también hay mucha ‘homofobia” (no sé qué otra palabra usar) a pesar de que los medios nos den otra visión. Yo misma he sido acusada de homófoba (y me considero una persona tolerante a pesar de ser cis hetero) por quejarme de esa manía de las series de época de embutir personajes gays o transgénero, como el caso del Dr. Moreno. Es casi obligación hoy en día incluir personajes ‘diversos” en todas las series de época. Lo que te imaginaras es un absurdo, pero no me opongo si la sexualidad del personaje contribuye al desarrollo de la trama. Lo de Moreno pudo serlo, pero se notó que era una venia a esa “inclusión forzada”. A eso me refería, no a que debían convertir la serie en un desfile de orgullo gay.
En realidad, lo voy a poner de manera mas clara. El trio de protagonistas son tan aburridos, tan antipáticos, tan feítos, que uno querría que metieran a alguien más interesante como la Pulga, o uno de los perros rescatistas, o algún escapado del manicomio, el fantasma de Don Porfirio o un brujo de Catemaco.
Sobre de donde saqué mi información he buscado artículos y la mayoría culpa a determinados personajes. He visto kilos de videos, me he vuelto a ver las películas que menciono, mas el documental “No pedimos un viaje a la luna” sobre las modistas de San Antonio Abad. He vuelto a revisar los recorridos del Licenciado Z (alav-ha-shalom). He revisado entrevistas de mucha gente que vivió el suceso, desde los mas humildes hasta Plácido Domingo y Olga Breeskin. No he inventado nada, he interpretado como siempre hago en mis investigaciones. Creo que a Televisa no la he tratado mal, aunque he escuchado cosas negativas. No he escondido detalles que afectan a mi etnia como cuando describo lo de los dueños judíos de muchos talleres de operarias. Curiosamente no he encontrado sus nombres en ningún lado.
He puesto enlaces y videos, si mienten es bueno hacerlo saber. Pero para eso necesito fuentes. Como periodista tú sabes que se necesita, además de tu valioso testimonio, algún tipo de documento que determine la inocencia de La Madrid y su gabinete, la llegada inmediata de la ayuda extranjera (hay lugres que dicen que llegó sin convocación del gobierno, otros dicen que llegó después de la réplica del 20, unos dicen que el primer avión era chino, otros que venía de Colombia) y otros detalles falseados en la serie, pero si ni sobre la cifra exacta de muertos se ponen de acuerdo, es difícil determinar verdad sobre mentira. Por eso agradezco te hayas tomado tu tiempo para darme tanta información
Desde FB de Macarena Muñoz Ramos
ResponderEliminarToma en cuenta, hablando de verificación de datos, que a pesar de ser los 80, aún teníamos varios retrasos y mucha desidia. Y no hablo de inocencia o culpabilidad del gobierno. Hablo precisamente que por más que consultes diversas fuentes, muchas viran la balanza a favor de unos o de otros. La cantidad de muertos siempre será un cálculo porque con tanto edificio derribado, nunca se sacaron cadáveres y fueron desechados junto con los escombros. Hubo un montón de desinformación debido a que los cadáveres tardaban en ser identificados. Muchos, casi todos, los llevaron a la cancha del antiguo estadio de béisbol (hoy en un centro comercial que cuenta que su vibra está muy pesada en las noches) y a varios los enterraron en fosas comunes. Y bueno, tampoco le puedes pedir mucho a una serie que tiene que cumplir con una agenda supongo para que sea producida y adquirida por plataformas. Y en México, jamás vas a encontrar como protagonistas a gente de piel morena o con rasgos indígenas. No vas a encontrar esa diversidad racial. Lo que hizo Cuaron con su película Roma casi podría decir que fue plan con maña y por eso triunfó en el extranjero. Lo de la diversidad sexual lo entiendo según como lo has explicado en tu reciente comentario, pero es que yo no acabo de entender qué necesidad de que el crítico o reseñista te "certifique" si la hay en tal película o serie cuando en realidad no es trascendente para el desarrollo. Lo entendería de una historia que se enfoque en cultura LGTB y anexas, pero es terrible que el espectador promedio empiece a acostumbrarse a que le "revelen" de antemano si el producto entra en la modalidad de tolerancia y diversidad sexual.
La ayuda es posible que no haya llegado desde el minuto cero pero es que fue todo tan devastador y complicó tanto todo por los cortes de luz y de agua, que todos tardamos en carburar al cien por cien. Y la réplica fuerte fue al día siguiente por la noche, pero durante varios días hubo miles de réplicas de menor intensidad. Las comunicaciones se vieron muy afectadas y por ejemplo, no podíamos utilizar mucho el teléfono en plan civil y mi madre quería hablar con su hermana que vivía en Texas pero no nos daban potencia las líneas. Entonces se comunicó a un programa de radio de la W que durante las madrugadas transmitia para los traileros. La llamada de mi madre salió al aire, dio todos los datos de mi tía y un par de semanas después, cuando ya recuperamos cierta normalidad, mi tía se comunicó y nos dijo que al día siguiente de la llamada de mi madre, un trailero se apersonó en su casa y le comunicó que estábamos bien. A ese grado llegamos. Los primeros días fueron un caos del que ahora es difícil siquiera entender cómo sobrevivimos.
Para Macarena Muñoz Ramos Pero si nos vamos por esas nunca se sabrá la verdad del evento histórico. Entre historias oficiales, agendas y revisionismo, los hechos cambian e incluso se vuelven leyendas. Es la razón por la cual estudie Letras antes que Historia como quería mi maestra de secundaria, porque al final la mejor literatura es el hecho histórico.
EliminarPor ejemplo, yo me quedo con el dictamen del pueblo abucheando a La Madrid durante el Mundial. Pero también habría que ver, si ese abucheo no fue programado, que también leí que había dentro de su mismo gabinete una intención de desestabilizar el gobierno de la Madrid y por eso es que menciono a “ verdaderos culpables” que en muchos sitios son mencionados por nombre, pero a estas alturas ya que importa. lo que importa es lo que señalas, la unidad, la solidaridad, la creación de protocolos y planes de contingencia, lo que en Chile llamamos ‘cultura de terremoto”.
Eso en la serie esta presentado de manera ultra dramática, como peli de los 30, a ratos cursi, a ratos inverosímil y reitero. El mayor error fue condensar todo lo que pasó, se logró y se perdió en el post terremoto, nada mas en las primeras nueve horas, cuando la gente todavía estaba tratando de llegar a sus casas y viendo lo perdido.
Sobre los rasgos del elenco, ayayay, ya me van a decir racista, pero mira el tráiler , mira las fotos, aparte de Osvaldo Benavides y del Dr. Moreno, los actores del reparto no pasarían por blancos, ni aquí ni en sectores de “La Alta” mexicana. Eso es algo común en las series latinas de plataformas gringas, hay que enfatizar el color, los rasgos indígenas, lo étnico, tal como se enfatiza lo queer en las series de época.
Me he reído con la escena que pusiste de Verónica Castro. Se me había olvidado lo dramática que era ella. Por eso no me gustaban mucho sus novelas, pero me encantaba en sus shows nocturnos o en películas o series que ha hecho recientemente como "La casa de las flores" o "Cuando sea joven".
ResponderEliminarNo puedo opinar mucho de esta serie porque no aguante más de un capítulo. Como te comenté en privado, un problema importante (bajo mi punto de vista) es que no hubo oportunidad de identificarnos con los personajes antes de la tragedia o de que nos importara mínimamente su suerte. Los flashbacks de los siguientes episodios (al menos la corta escena que vi al principio del segundo capítulo) no sirvió para nada. La reportera igual me cayó mal y noté el personaje muy forzado, como dices, había que meter por algún lado la feminista fuerte que no le teme a nada.
Como te comenté, un ejemplo de una serie de desastre natural que para mí si funcionó para engancharme (aunque aún no la termino) es la noruega La Palma, que trata del tsunami en esa isla española. Cualquiera que sea el desastre natural, todas las películas o series de desastre natural siguen un formato similar, pero a veces en películas se quiere enganchar inmediatamente a la audiencia mostrando la tragedia enseguida. Para mí esto es un error, especialmente en una serie que tiene varios capítulos para desarrollar los personajes y los sucesos. Lo que quiero es hacer notar los puntos que me engancharon en “La Palma” y no en “Cada minuto cuenta”.
1. La primera escena de “La Palma”, como en las películas de terror, nos da una pequeña muestra de lo que viene más adelante sin sacrificar a los protagonistas (sino otros personajes sin importancia que se ahogan en un bote por causas extrañas, pero con quienes podemos identificarnos brevemente). O sea funciona para intrigarnos sin 'desperdiciar' el desastre natural, que en el caso de "Cada minuto cuenta" surge en los primeros 10 o 15 minutos del primer episodio.
2. Los personajes generan interés. En el caso de La Palma es una familia de cuatro pero notamos enseguida que hay tensión en la pareja y no sabemos porque. Tambien simpatizamos de inmediato con la hija mayor que está dedicada al cuidado de su hermanito con autismo y a la vez, nos damos cuenta que guarda un secreto y que sufre en silencio por las peleas de sus padres. También conocemos a una estudiante noruega haciendo una tesis en el instituto meteorológico de La Palma y la vemos interactuar con su hermano. Ella es muy buena con el y además descubrimos que sus padres murieron en un tsunami cuando eran niños. Todo esto logra interesarnos en la historia más allá del desastre natural y simpatizar rápidamente con los personajes, lo cual para mí es indispensable en este género.
3. La tensión y el peligro se desarrollan lentamente con la estudiante que empieza a notar algo raro. Esto crea anticipación. Es como lo que decía Alfred Hitchcock que suspenso es cuando tienes una bomba bajo la mesa y la audiencia lo sabe, mientras que si la bomba explota al principio hay un elemento de sorpresa para la audiencia, pero se pierde la tensión. El opinaba que el suspenso era mejor que la sorpresa.
Uff Amiga, no te perdiste nada. Esta no era una disaster movie, era un desastre de serie,
EliminarMe ha costado ver los videos de las marejadas de Chile, no tengo estomago para ver tsunamis. El mismo poster mostrando esa ola más alta que rascacielos, ya desinforma. Yo hasta el tsunami del 2010 no entendía que es el impacto de muchas olas, no de una monstruosa, a lo mejor si nos cae un meteoro…
Concuerdo en que el poder del disaster movie está en hacernos conocer y simpatizar con los personajes (no todos). Aquí se fracasó en ese punto importante y luego los flashbacks no ayudaron a hacerlos más simpáticos. Debieron aprender de lo que hace novedosa cada nueva dramatización del Titanic, los personajes y sus historias. Te hable de este telefilme “Hiroshima” también con un preámbulo tan completo y complejo que la tragedia te toca. Entre mis filmes favoritos hay algunos clásicos incluso basados en novelas como The Rains Came, o San Francisco y la miniserie los Últimos Días de Pompeya (la de los 80s) y cumplen todos los requisitos que señalas
¡Pobre Vero! Pero vale recordar que era hermosísima, una mujer fascinante y una gran comediante, eso ayuda a perdonarle estas cursilerías.
Exacto. Titanic es un excelente ejemplo. Por que nos dolió tanto que Jack muriera y no los cientos de otras personas que vimos morir en esa película? Porque no los conocíamos. Mientras que pasamos al menos una hora enamorándonos del personaje de Jack y del romance con Rose.
EliminarEn mi opinion, "Cada minuto cuenta" muestra demasiados personajes en escenas muy cortitas para que lleguen a importarnos. Especialmente la mamá histérica y la reportera...