A la lista de
detectives literarios, cuyas aventuras
ha dramatizado la RAI, llega ahora El Comisario Ricciardi. Basada en las
novelas de Mauricio De Giovanni (traducidas al español), la serie describe los
quehaceres de un policía napolitano que en la Italia Fascista resuelve crímenes
con la ayuda de los fantasmas de las víctimas.
Un Policía de
la Nobleza
La idea de
combinar los misterios detectivescos con lo sobrenatural no es nueva en
términos televisivos. Recordemos
historias de mujeres que podían comunicarse con los muertos como Patricia Arquette
en Medium, y la encantadora Jennifer Love-Hewitt en Ghost Whisperer.
Mas recientemente hemos podido ver en castellano, en YouTube la serie ucraniana Anna, la Detective.
La diferencia de
estas damas con Ricciardi está en el contexto histórico. Algo que tenía claro De
Giovanni cuando decidió colocar a su sufrido protagonista en un entorno supersticioso
como Nápoles y en una era de represión y silencio como lo fueron los años del
fascismo. La misantropía y atormentado silencio de Ricciardi son ecos del mundo
en que vive.
El Comisario
viene de un mundo más vetusto e inmerso en lo paranormal que Nápoles. Luigi Alfredo Ricciardi, Barón de Malamonte
proviene de la antigua nobleza de Salerno. Huérfano de padre a una tierna edad,
tuvo que ver a su madre Marta enfermar por el mismo mal que le heredó a su
hijo. En términos de El Sexto Sentido, tanto Ricciardi como Marta pueden
ver gente muerta. Peor aún, los espíritus de lo recién fallecidos lo persiguen
con mensajes crípticos que el comisario debe descifrar.
Al comienzo de la
serie, nada de esto está claro, como tampoco hay explicación de por qué un
abogado aristócrata se ha ido a trabajar a una fuerza tan prosaica como la
policía napolitana. Ahí Ricciardi está bajo la bota del inepto y oportunista
Garzo, muy lambiscón con los ricos y
poderosos, pero muy gruñón con los métodos de Ricciardi que insiste en ejercer
justicia aun cuando toque a personajes importantes del régimen fascista.
La historia abre
en 1931, Ricciardi vive rodeado de un triángulo de personajes que componen su
red de apoyo. Su nana Rosa, el noble Sargento Rafaelle Maione, y el Dr. Bruno Modo,
un forense antifascista. A pesar de lo cercanos que son este trio al comisario,
ninguno conoce su secreto. Ninguno entiende
porque un hombre guapo y rico ha dejado descuidadas sus tierras y no ha
intentado formar una familia.
Ricciardi y Maione
Cupido Hace de
las Suyas
Eso no quiere
decir que Cupido no convierta al polizziotto en blanco de sus dardos.
Ricciardi se ha enamorado de Enrica Colombo, su vecina, cuya ventana da al
cuarto del comisario. Cada noche ambos se observan, a veces sin el otro saberlo
o fingiendo no verse. Aparte de un saludo de señas, no intentan conocerse y sin
embargo ambos se saben en algún tipo de relación.
Enrica, veinteañera,
hija de familia, da clases particulares y ayuda en la tienda de ropa del padre.
Según ella, posee un genio insufrible. Por lo cual su primer encuentro “real”
con Ricciardi acaba en desastre. La madre se enoja porque su hija menor ya está
casada y con un hijo y a la mayor no le importa encontrar marido. Se empeña en
encontrarle novio a Enrica lo que descoloca a Luigi Alfredo.
Por nueve novelas
veremos estos desencuentros y malos entendidos . Desde una perspectiva moderna,
este romance puede sentirse cursi y melodramático. Para las mituteras tanto
Enrica como el Comisario son estereotipos de Stalker. Pero en el contexto “patriarcal”
del Nápoles de ese entonces representan un amor que trasciende las bajas
pasiones y que es incondicional porque no necesita de determinadas condiciones
o compromisos para florecer.
Algo que hechiza
de las novelas es ese retrato de un Nápoles tradicional con sus fallas y sus
encantos. un mundo en el que la familia no es todo donde lo primordial es la
mamma, aun las adoptivas como Rosa. No que no muestre madres controladoras
y egoístas como la prestamista Calise, la madre de Enrica empeñada en casarla, y Lucía, la esposa del buen Maione.
Raffaele Maione,
además de buen policía y leal subalterno, es un excelente esposo y padre. Tiene
cuatro hijos que una vez fueron cinco. Lucca, el mayor, siguió los pasos del
padre y encontró la muerte en el ejercicio de su trabajo. Han pasado dos años y
Lucia no se conforma. Vive en luto eterno y culpa al marido al que no le brinda
ni una sonrisa. Para colmo se vuelve una madre-monstruo que aterroriz aa sus
otros hijos a los que no le permite ni cantar.
Como suele
ocurrir, Maione comienza a cansarse de esa situación y busca refugio en la
compañía de ‘la mujer más bella de Napoli” o que era la más bella hasta que con
una navaja alguien le hizo un chirlo en el rostro. Lucia cae en que su marido
llega tarde y con olor a comida ajena. Está claro que el Sargento ha encontrado
otro hogar. Eso por fin obliga Lucía reaccionar.
Antes de eso, Ricciardi
intenta convencer a Lucía que deje de tratar mal al marido, que en su mal
comportamiento se ;le va el matrimonio. La Signora Maione responde con una
pregunta “¿Ý usted Comisario? ¿Cuándo se
casa? ”Aunque es obvio que es un ‘¡Metete en tus asuntos! “es una pregunta que
se hacen todos. Recordemos que la Italia fascista—tal como la antigua
Roma- —se imponía un impuesto a los solterones.
Ricciardi insiste
en no casarse porque no quiere legarles a sus hijos su “mal”, o “el Hecho”’como
él lo describe. Pero eso no quita que desde la Nana Rosa hasta la peluquera de
Enrica sepan que la muchacha muere de amor por el policía. Lo malo es que a
Enrica le ha salido una rival de peso al camino.
En su primer caso,
Ricciardi conoce a la viuda de la víctima. Se trata de Livia Vezzi, dama de
sociedad, amiga íntima de Edda Ciano y dueña de una voz privilegiada, aunada a
una elegancia y belleza con la que no puede compararse la simple Enrica. Sin embargo,
para Luigi Alfredo, Livia es al comienzo
una sospechosa más, al final una cómplice. Entremedio, Ricciardi se convierte
en depositario de las cuitas de la viuda.
Famosa soprano abandonó su carrera para unirse a un mal marido. La muerte
de un hijo es el desiderátum de sus desgracias que porta con mucha gracia la
hermosa doliente.
Si Luigi Alfredo
cree encontrar una amiga en Livia se equivoca. La viuda se ha enamorado del
comisario casi a primera vista y tras su periodo de luto en Roma desciende a Nápoles
más seductora que nunca. Aun sabiendo que Ricciardi está enamorado de otra, Livia
está dispuesta entablar batalla con la mujer fantasma. Hay momentos en que mis
apuestas están a favor de la cantante porque me aburre Enrica con su ingenuidad
y sus torpezas.
Sin embargo, Livia lleva las de perder, precisamente porque el talón de Aquiles de Luigi Alfredo es lo espiritual y lo sublime. Esto va más allá del síndrome Madonna-Prostituta. Ricciardi podrá caer en las sábanas de Livia, pero eso solo será un recordatorio de su humanidad, una respuesta física. Livia y Enrica representan los dos aspectos del Anima Junguiana.
En términos más prosaicos. Livia es todo
lo que perturba al policía, ella es el lado oscuro del ser humano que se
manifiesta en los crímenes que el investiga, ella es el privilegio que permite
que existan abusos de los que el humilde y atropellado solo puede huir a través
de la violencia, ella es el fascismo que se está encargando de destruir a Italia.
Nápoles
Fascista
Es imposible
desligar a la serie del régimen de Mussolini, y Livia es un eslabón al gobierno. Poco después
de instalada en Nápoles, Livia nota que la sigue. Se trata de Falco, un agente de la misteriosa OVRA (la Gestapo
italiana) . Al comienzo, ella cree que es un modo de Edda de cuidarla,
pero Falco la saca de su error. Es “el régimen” quien lo ha enviado a vigilar a
Ricciardi a través de la muer que lo ama. Un solterón, con amigos
antifascistas, que ha abandonado las propiedades familiares para andar de
detective no cabe en la estrecha percepción que los fascistas tienen de lo que
debe ser un hombre confiable.
El fascismo y el
clasismo son dos temas omnipresentes en cada caso, sea la victima una duquesa casquivana o un
huerfanito de la calle. En el primer caso, Garzo le exige a su subalterno
diplomacia puesto que el muerto es cercano al Duce y su viuda, amiga de la Contessa Ciano. En el
segundo caso, el problema es la interrogación de una cliente casada con un importante
abogado. A Garzo le gustan los culpables proletarios, teme a los sospechosos de
alta estirpe.
Es en el tercer
episodio donde vemos a i fascisti en acción. Una squadra de
revoltosos que por tener un uniforme puesto pueden ir asustando a la gente con
sus gritos de “Avanti, Avanti”. Como descubre Ricciardi, gracias a un
fantasma, son capaces de matar mendigos indefensos y de amenazarlo a él, en
presencia de Livia.
Viendo a estos
grandulones actuar como simios tarados, me confirma mi desprecio por las ideologías
totalitarias y por el poder que les otorgan a mocosos imberbes y sin criterio. Pero
me siento incomoda. A diferencia de Alemania, la ficción histórica italiana (y
razones no le faltan para no hacerlo) no se atreve a mostrar el rostro humano
del fascismo. A mí me complica, porque muchos de estos Camiccie Nere eran
chicos de buena familia y hasta el ’38, muchos eran judíos.
La serie, sin
embargo, nos presenta un fascista “presentable”. El asesinato de una joven
duquesa pone en la galería de sospechosos al viudo, un aristócrata invalido; a
un famoso periodista; y al “duchinno”,
hijastro de la víctima. Ricciardi descubre que este último tiene amores con
Achille Pivani, il capo della squadra.
Achille es un
hombre discreto, (obvio en un régimen
que perseguía los homosexuales) caballeroso y justo que agradece a Ricciardi
que mantenga su identidad sexual en secreto. ¿Pero es Pivani, tan diferente a
sus gamberros squadristi, un buen hombre debido a su homosexualismo o
hubo fascistas decentes? No es la serie
quien nos proporcionará respuestas.
Pivani vuelve a
aparecer en el penúltimo caso. Cuando el Dr. Modo se enfrenta a los Camisas
Negras que vienen a ofender a un cortejo fúnebre de una prostituta, uno de
ellos consigue desde Roma un permiso para enviar a l forense al exilio. Toda
esta información se la proporciona a Pivani a Luigi Alfredo, agregando que solo
Livia, por amor, puede ayudarlo. ¡Hasta
los Camisas Negras conocen los problemas sentimentales del Comisario!
Ricciardi
solicita ayuda a Livia y ella contactará a Falco. Solo así, Modo podrá volver a
Nápoles y a su trabajo. Algo que decir respecto a los agentes de la OVRA que arrestan
a Modo, no maltratan al perrito de Matteo que el medico ha adoptado. Incluso lo
dejan atado a la verja de una iglesia para que no se pierda. Ahí lo rescata Lucía
Maione.
Los casos que
Ricciardi debe resolver se vuelven complejos por los cortapisos que Garzo,
representante del poder imperante, le coloca y por confusiones que apuntan a un
sospechoso para que luego descubramos era inocente. Una particularidad muy
interesante, es que Ricciardi administra su propia justicia. En más de una ocasión
deja escapar al criminal, apiadado de sus circunstancias. Casi tan interesante
como ese modo de administrar justicia, es la ayuda que recibe el comisario que
puede venir de un párroco enamorado de Bel Canto, una niña deficiente
mental y Bembinella, el simpático travesti que sirve de informante de Maione.
La serie nos da
una visión global de la sociedad napolitana desde el elegante Tetro di San
Carlo y sus entretelones del universo de la ópera hasta el teatro de revista
con sus rutinas de bailarinas semi vestidas, desde las recepciones para honrar
la visita de Mussolini a Nápoles, hasta las barriadas de Capodimonte donde pululan
niños en estado casi feral.
Las Novelas
La serie es
tremendamente humana, lo que no disminuye el misterio y suspenso tras cada
asesinato. Si no pueden verla busquen los libros que por suerte están
traducidos al castellano bajo los títulos de El invierno del Comisario
Ricciardi (2011); La primavera del Comisario Ricciardi (2012) y El
verano del Comisario Ricciardi y El otoño del Comisario Ricciardi,
ambas publicadas por Lumen el 2013.
Maurizio De Giovanni
se ha encargado de la adaptación de su obra en la primera temporada usando su
experiencia en otra popular serie policiaca italiana Los Bastardos de Pizzofalcone,
también de su autoría. Esta primera temporada cubre las cuatro novelas más Y
todo a media luz que fue publicada en español el 2015. De Giovanni lleva
seis libros más escritos sobre este Comisario y sus fantasmas, así que hay
esperanzas de que haya más temporadas. Por ahora ya sabemos que se está
preparando la segunda parte.
Hermosamente
filmada en el viejo Nápoles y sus alrededores, Il Commisario Ricciardi es
elegante— el vestuario de Livia es exquisito—romántica y a su vez misteriosa, llena de suspense
y denuncia social. ¿Qué más decir para recomendar esta serie que viene a unirse
a los dramas de misterio de la RAI, pero que tiene una personalidad muy propia?
Igual de elegante un burdel napolitano
Livia y su espectacular vestuario
Contenido
Violento y Gory: Muchos
crímenes y escenas de exámenes forenses, pero nada muy Gory. ¿Lo peor? Unos
niños vagabundos lapidando a una rata y tratando de envenenar a un perrito.
Contenido
Sexual: Mucho crimen
pasional, pero sin desnudos y una sola escena de cama con topless de Livia.
Contenido
Feminista: A pesar de ser
un mundo patriarcal y bajo un régimen totalitario, la mujer napolitana en esta
serie nos muestra maneras alternativas de sobrevivir y llegar a tener voz y
poder. De hecho, mujeres como Livia, vigilada por la OVRA, y la esposa de un
abogado, clienta de la Calise, tienen menos poder que la dueña de un burdel o
Lucía cuyo control autoritario casi destruye a su familia.
Factor
Diversidad: Comenté la
relación homosexual entre Ettore y Achille. Es un vistazo a la clandestinidad
de un tipo de relación que el crimen fascista condenaba al confino
(exilio) en islas semi desierta o pueblitos en zonas alejadas. Por otro lado,
tenemos a Bambinella, tan alegre, tan sagaz, tan servicial que ha encontrado un
modo de vivir su orientación sexual al margen de la ley.
Il Commisario
Ricciardi puede verse en
PBS Masterpiece con subtítulos en inglés.
desde FB de Valentina del Rosario Parraga
ResponderEliminarMe encanto.
Para Valentina Del Rosario Parraga Y a mi encanta que la hayas podido ver. Eres la segunda persona a la que se la recomendé que le ha gustado. Recuerda que , en lo que esperamos a la segunda temporada, puedes conseguir los libros que continuan la saga. Han sido traducidos al inglés y al español.
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