lunes, 27 de febrero de 2023

Dinamarca Bajo la Ocupación : Antes de ver la novena temporada de Badehotellet

 


Por fin Walter Iuzollino se puso las pilas y tradujo la Novena Temporada de la serie más popular de la televisión danesa. Fans de todo el mundo esperábamos una temporada muy intensa en la cual ni el omnipresente humor puede borrar las cicatrices dejadas por guerra y Ocupación alemana.

Han Pasado Cuatro Años…

El momento en que me enteré de que Seaside Hotel llegaba a pantallas estadounidenses, decidí revisar las últimas temporadas para volver a habituarme con los personajes,  pero también para situarme en el marco histórico. La Novena Temporada tiene lugar en el verano de 1945. Hace apenas un mes que ha acabado la guerra en Europa,  y Dinamarca ha sido liberada.

La liberación ha hecho aflorar diferentes emociones en cada personaje, pero como los productores decidieron saltarse cuatro años del conflicto,  el espectador está un poco confundido sobre los cambios de actitudes de los huéspedes y del servicio del Hotel Andersen. Hubiese sido imposible para un hotel de balneario continuar operando como tal bajo los alemanes, por lo que los guionistas optaron por hacer que el invasor se hiciese cargo del establecimiento entre 1941-1945. Eso también evitó describir los momentos más conflictivos de la Ocupación'.



Parte del encanto de la serie era esta reunión anual en que los mismos huéspedes bajaban a la paradisiaca costa de Jutlandia cada verano. Ahora el espectador sentirá la misma nostalgia y asombro al reencontrarse con personajes que no se han visto en cuatro años.. Hay secretos que se irán revelando a través de los cinco episodios de esta temporada. Para entenderlos hay que remontarse a temporadas pasadasen el caso del egocéntrico actor Edward Weyse a la primera para ver cómo han enfrentado y sobrevivido estos cuatro años oscuros de la historia europea.

En las Temporadas 7 y 8 Badehotellet cubrió los primeros años de la Ocupación germana pero sus encuentros oscuros con el nazismo venían de antes. Obligado por su madre,  y para ocultar su homosexualidad, el Conde Ditmar se casó con su prima Mitzi con la que tuvo un hijo. Alemana y admiradora de Hitler, Mitzi descubrió la relación entre su marido y Philip Dupont. Llorando se la contó a su hermano que había venido de visita a un encuentro de jóvenes nazis.

El hermano y sus amigotes apalearon a Philip. El incidente además de forzar a Ditmar a admitir que era Philip a quien amaba, sirvió para exhibir un tema que se volvería común en las próximas temporadas, la cantidad de daneses que se acercaban a las políticas nazistas. Algo que contrariaba al maniaco depresivo Consejero Hjalmar Haurland que como Casandrapredijo que lo que ocurría en Alemania ocurriría también en suelo danés.



Dinamarca: El Protectorado Modelo

¿Pero ocurrió realmente?  Algo que sorprende de las últimas temporadas es ver lo fácil que fue para los daneses continuar con sus quehaceres cotidianos después de la invasión. Sucede que conscientes del caudal de sangre aria en esa tierra de vikingos, los nazis quisieron crear ahí un protectorado modelo. Se buscaba así agradecer que los daneses se hubiesen rendido sin más oposición que un batallón en la frontera que al no recibir noticia del armisticio recibieron al invasor con fuego . Ahí es donde murió Anders, el marido de la camarerita Nana.



En general, la paz reinó en Dinamarca. El Rey Cristian siguió paseándose a caballo por su capital, el paramento siguió funcionando, la policía danesa siguió manteniendo el orden y hasta 1943, la magra población judía vivió tranquila. Cuando a los alemanes se les ocurrió obligarlos a usar la estrella amarilla, tanto el rey como el Arzobispo de Copenhague anunciaron que ellos serían los primeros en lucirla,  y ahí murió el plan nazi.

Como nos muestra Badehotellet no todo era perfecto. había racionamiento, los automóviles eran requisados, existía la censura periodística y las llamadas telefónicas a países enemigos estaban prohibidas. Incluso las a países neutrales como Suecia estaban circunscritas a comunicaciones de negocios. Sin embargo, desde 1940, elementos del ejército danés habían entrado en contacto con los servicios de inteligencia británicos con el propósito de recaudar información sobre movimientos de tropas.



Debido a eso vemos que Morten retorna a Skagen para montar una red que incluye la observación y reporte de lo que hacen las tropas en el área. Morten, el pescador que hizo fortuna con flotillas navieras y que por varias temporadas fue como el gran galán del cuento,  se había instalado en Inglaterra con su esposa Fiela heroína de facto de Badehotellet y comenzado una familia.

En la séptima temporada, Morten retorna de incognito a atender un funeral y visitar a Molly, su madre y ex dueña del Hotel Andersen, que ahora está casada con el molinero Peter-Andreas, padre de Fie. Ahí les cuenta Morten,  no solo de su actividad de resistente,  sino también de otros esfuerzos bélicos que van desde haber participado en el rescate de Dunquerque hasta recibir niños londinenses refugiados en su casa de Newcastle.

Morten está particularmente interesado en la creación de un nuevo aeropuerto en Aalborg que sospecha se utilizará para servicio del ejército alemán. Como el Mercader Madsen está involucrado en ese proyecto (y otros daneses) Morten consigue que su cuñada Ane lo espié.




Para la última temporada, Morten ya tiene instalado un destartalado equipo de espías que incluye al despistado “Profesor” Klaus Vilmursen que pretende ser arqueólogo, pero no distingue entre Edad de Hierro y Era Vikinga. Rápidamente, Berta Frigh lo descubre y es a su vez reclutada para fotografiar una antena de radar que la Wehrmacht ha instalado en las dunas cercanas al Hotel Andersen.



El modo en que la serie retrata esta incipiente resistencia es jocoso , no se la toma en serio. Es que realmente el movimiento resistente danés con misiones de sabotaje y ejecuciones de colaboradores solo surgiría dos años más tarde. Tristemente no hay muchos filmes que loen estos actos. El más famoso fue La tierra será roja que recibió premio en Cannes en 1946. Este es el filme que Edward Weyse rechaza en la serie por ser producido por el nazi Henning Karmark



El tema ha sido tratado vagamente en series modernas como Los Nuevos Enfermeros donde se habla que la jefa de enfermeras fue arrestada, torturada por la Gestapo y enviada a un campo de concentración, pero es algo que se menciona muy al pasar. En cambio, se han hecho miniseries y filmes como el de Flamen y Citron con Mads Mikelsen que muestran el lado oscuro incluso vengativo e injusto de la Resistencia Danesa. Aunque todo evento histórico tiene dos caras y los movimientos partisanos no fueron infalibles ni angelicales, es feo mostrar el peor rostro si el público extranjero desconoce el benévolo.



 “No Queremos Aquí Problemas Judíos”

Por suerte, Dinamarca es recordada mundialmente por una inmensa proeza en esos años deshumanizantes:  el rescate del 80%de su población judíaque fue llevada a salvo hasta Suecia. De ese episodio de 1943, se han hecho muchos filmes y se sabe y agradece el rol de la Resistencia Danesa en el operativo. Aunque Badehotellet pega un salto sobre este rescate ocurrido en 1943, el tema judío no está ausente de su trama y aparece muy temprano,  en la Sexta Temporada.

                                     Transporte de judíos daneses a Suecia

Para entender de que se trata ese asunto debemos remontarnos al inicio de la serie. En el verano de 1928, Edward Weyse trajo al Hotel Andersen a su tercera esposa, la bella y millonaria judía Sybille. Debido a que Sybille no quería tener relaciones durante su embarazo, Weyse comenzó a cortejar a la muy casada Helene que se convirtió en su cuarta esposa.

                                          La Cuatro Esposas de Edward Weyse

Sybille se consoló con el tímido y erudito Adam Fjeldso. se divorció de Weyse y pasó a ser la esposa de Adam, con gran alegría de la madre de este que quería ver a su hijo casado. Lo interesante es que, por amor a su mujer, Adam se convirtió al judaísmo y adoptó al bebé que su esposa esperaba. Sarah ha sido criada creyendo a Adam su padre biológico. Ella hará aparición en la Temporada 9, pero antes debemos hablar de su tío Robert, hermano de Sybilla.

                                   Sybille y Adam

Aunque nacido en Dinamarca, Robert vivía en Viena donde se casó con una judía austriaca, periodista como él. Como explica la atribulada Señora Fjeldso en ese verano del 39, a la esposa de Robert la mataron en “los disturbios de noviembre’”(eufemismo para la Kristalnacht). Robert logró llegar a Dinamarca solo para descubrir que, al haberse casado con una extranjera, perdía la nacionalidad. Las autoridades danesas lo entregan a los alemanes (Austria era ya parte de Alemania) ante los horrorizados ojos de Olga quien lo había ido a esperar al aeropuerto. Es que no quieren problemas causados por judíos.


Una llamada de Sybilla informa que Robert está en el campo de concentración de Neuegamme cerca de Hamburgo. Robert logra escapar y llega a Jutlandia donde es rescatado por una persona inesperada, Vera Madsen. Si la pequeña Vera, la niña huraña que hablaba con fantasmas y parecía borderland autista, ahora se ha convertido en una joven tímida y un poco antisocial, que estudia literatura inglesa y ha escrito (bajo seudónimo) una novela de misterio.



Inmediatamente Vera se hace cargo de la situación. Robert es un fugitivo de las autoridades de su propio país. Olga Fjeldso una enamorada de la legalidad no puede ni siente que debe ampararlo. Su hermana en cambio apoya a Robert. Viendo que ninguna de las dos puede ocultar al fugitivo, Vera recluta a Aurland que pone en maquinaria sus contactos para encontrar una salida.




Vera recluta también a Molly Andersen que acepta esconder a Robert en su granja. Ahí tenemos un atisbo de como en los próximos años, Molly y su esposo Peter-Andreas apoyarán a la Resistencia antinazi.




Cuando todas las puertas se cierran y Robert parece perdido, es Madsen quien resuelve el problema. Con tal de que la presencia de Robert no arruine un lucrativo negocio y de alejarlo de su hija, se le ocurre que para subirse al ferry a Suecia solo se necesita de un certificado de nacimiento danés.



Un amigo judío de Aurland consigue el certificado de Robert de una sinagoga de Copenhague, con eso él puede viajar. Para entonces está claro que Vera se ha enamorado de su protegido. Amanda empuja a su hermana a dejar atrás su timidez. incluso le presta su auto para que huyan hasta el ferry. Es en ese navío donde dejamos a Vera y a su ahora amante rumbo a la libertad. En la próxima temporada nos enteramos de que están a salvo y casados en Estocolmo.



El Primer Año de Ocupación

El tema judío reaparece en la Octava Temporada, pero para hablar de él tenemos que hablar de un nuevo e importante personaje de las últimas entregas. El Teniente Uwe con el que Amanda protagonizará su propia versión de Romeo y Julieta en el Tercer Reich.



La séptima temporada inicia en junio 1940, ya la mitad de Europa es de los nazis. En el tren se encuentran Olga Fjeldso y su hermana Lidya Plough con Alice Frigh y una Bertha bien crecidita. Todos comentan lo maravilloso que es no ver uniformes alemanes,  y como Amanda les ha prometido unas vacaciones sin la presencia del invasor.

Es lo que Amanda desea ¿pero cómo hacerlo si su padre está haciendo negocios con el Coronel Fuchs?  El problema inicial no lo provoca Madsen sino el apolítico Weyse. Sus hijos le roban los uniformes a unos soldados de la Wehrmacht que se están bañando en la playa del hotel. Aunque los uniformes son retornados, los niños se han quedado con la libreta de racionamiento de uno de los soldados.



Esto provoca histeria en Edward y Helene y una de las típicas tragicomedias de errores que son tan comunes con esa pareja. Tras muchas mentitas y decisiones tomadas sin consultarse, los Weyse entregan a un policía danés una libreta medio quemada y mojada.



Lo próximo es que el hotel recibe la visita de Uwe  Kessling, el teniente a cargo de un batallón que se ha instalado en Skagen. Uwe es el epitome del soldado ario perfecto:  rubio, guapo y dotado de una sonrisa y modales impecables. Apenas ve a Amanda se prenda de Frau Breggener algo que la exaspera.







Uwe, con mucha cortesía explica como el ejército alemán está dispuesto a olvidar lo de la libreta siempre y cuando Weyse cante para ellos. Weyse que ha estado huyéndole a los peticiones alemanas de cantar para el invasor,  debe aceptar puesto que si no lo hace la Wehrmacht requisará el hotel.



Weyse se aprende una canción en alemán (todo su repertorio es en inglés o danés) y tiene un gran éxito. El problema es que los alemanes han filmado el concierto y planean usarlo como propaganda. Por suerte, Fugelshold, el alcohólico y comunista director de cine (Segunda Temporada) quema el galpón donde están las grabaciones en celuloides y así Weyse no cae bajo el estigma de la colaboración.



Más peligros corre el incorregible Weyse en la Octava Temporada. Es el verano de 1941. Tras la invasión de Rusia, el partido comunista danés (cuyos miembros eran parte del parlamento) queda fuera de la ley. La generosa Helene oculta a un pintor amigo en su casa y luego lo lleva hasta el Hotel Andersen con pésimas consecuencias para Weyse. Aunque como todo lo relacionado con el actor es presentado de manera caóticamente cómica, no es gracioso cuando lo arrestan y ponen en un campo de detención para disidentes. Al final todo se arregla, pero Los Weyse descubren que ya nadie está libre de peligro en Dinamarca.







Ditmar Anti-nazi y Madsen Cartero

Paralelo a los problemas de Weyse están los del Conde Ditmar. Desde que su madre anuncia que se casa con un editor con simpatías fascistas que Ditmar ve una Espada de Damocles sobre su cabeza. Su padrastro sutilmente le hace saber que le gustaría administrar las propiedades familiares y ser el tutor del pequeño Wilhelm para que no vaya a salir al padre.




A Perben le sale una aliada en Mitzi que está criando a Wilhelm a la manera alemana, hasta lo ha enrolado en los HItlerjugend. Ditmar siente remordimientos por eso y en la Séptima Temporada va en busca de su hijo a Frijseholm y lo trae al hotel.




Ahí con ayuda de Helene lo despojan de su uniforme, lo visten con ropa de Leander y lo mandan a jugar con los niños Weyse y la mandona Emma, hija de Ane. Wilhelm está tan feliz que se niega a regresar con Perben cuando este viene a buscarlo, pero es solo un pequeño triunfo para Ditmar.



En la Octava Temporada,  Dinamarca está mostrando los colores nazis de su propio pueblo. Hasta se ha creado una Legión Danesa para ir a apoyar a la Wehrmacht en el Frente Oriental. Perben decide celebrar un congreso nazi en las propiedades de su mujer. Ditmar se lo prohíbe y cuando su padrastro se niega a cancelar el evento, El Conde llama a la policía exigiendo que ellos lo impidan.



La venganza de Perben se hace sentir pronto. Alienta/obliga a los jornaleros de Frijseholm a unirse a la Legión . Todos lo hacen y no queda nadie para recoger la cosecha. Ditmar debe abandonar sus vacaciones para ir a su castillo donde descubre que no puede contratar nuevos jornaleros ya que nadie quiere trabajar para una familia nazi. La única solución es llamar a la policía, hacer expulsar a Perben de su casa y tomar las riendas de sus propiedades.






Lo que la serie nos muestra es que el nazismo echó raíces entre clases pudientes y educadas, pero no en el pueblo. Los daneses traidores eran o gente rica u oportunista como Madsen que sin embargo para la Octava Temporada ha decidido no trabajar más con los alemanes.

El primer problema de la temporada tiene lugar con Madsen y Therese nadando . El descubre que están siendo observados por una pareja de soldados alemanes. El empresario los apostrofa , por suerte no entienden nada. Uno de ellos es el joven Stefan Berg que jugará un rol importante esta temporada

Amanda tiene sus propios problemas, aunque de manera brusca rechazó el cortejo de Uwe, ahora se arrepiente. Al volver en mayo descubre que el alemán ha estado haciendo (de motu proprio) reparaciones en el Hotel Andersen. Eso la conmueve y la hace verlo con buenos ojos. ¿Se está enamorando? Es lo que temen Therese y Philip.



Uwe hace un pedido a Amanda, quiere que una vez por semana reciba a un grupo de jóvenes soldados y les sirva chocolate y pastel. Le cuenta que sienten nostalgia de su hogar y la convence. Los huéspedes están molestos con esa intrusión.

Amanda y sus camareras reciben a los soldados en la terraza. Sus padres observan desde la ventana de su cuarto. Al final de la velada, Stefan canta una canción, tan triste como hermosa es la voz del soldado.  En estas temporadas hemos presenciado una dinámica interesante que surge de la barrera del idioma. Amanda y su madre son germanoparlantes, tal como lo son Helene Weyse y Otilia. Se crea una situación en que ellas deben ser la voz de sus hombres y dialogar con el enemigo. Esto ocurrió en muchos sitios de la Europa ocupada.

Ahora, Therese le cuenta a su marido que es una canción sobre amor y nostalgia del hogar. Madsen queda muy conmovido. Aparece un sargentoel único nazi de este cuento que reprende a Stefan por la canción y por cartearse con una judía. Rompe la carta en la cara del desolado soldadito.



Esto indigna a Madsen quien se convertirá en el cartero de Berger y su novia judía. Son descubiertos. Stefan huye, regresa a Alemania, se casa con la novia y es aprehendido cuando él y su esposa intentan cruzar la frontera suiza. El atribulado Uwe tiene que decirle a los Madsen que Stefan será llevado a una corte marcial y que el paredón es el más probable veredicto.



Desesperado, Madsen decide volver a trabajar para el Coronel Fuchs siempre y cuando este libere a Stefan. El cínico Fuchs le confiesa a su secretaria (quien será personaje importante en la Temporada 9) que no levantará un dedo para ayudar al desertor, pero hará creer a su nuevo socio lo contrario porque necesita de los servicios de Madsen. Cuando Madsen descubre la triquiñuela rompe el contrato en la cara del nazi. La salvación de Stefan recae en las manos de Uwe.



El Teniente Kessling se aparece en el hotel. Ha conseguido que revoquen la ejecución del desertor a cambio de que Stefan sea enviado inmediatamente al Frente Oriental lo que ya encierra una sentencia de muerte. A cambio, Uwe debe acompañarlo y ha venido a despedirse. Ya Amanda no puede contenerse más y le declara su amor…Y ahí acaba la Octava Temporada.



Por suerte ya la Novena está con subtítulos en inglés en USA y puede verse en PBS Masterpiece en Amazon o por un precio módico en Thirteenth Passport. En España la situación de esta magnífica serie es más compleja.

Por alguna razón y bajo el título de Hotel Voramar fue presentada en valenciano por un canal local. Esto ocurrió en el 2021, pero inmediatamente la compró la televisión catalana que doblándola al catalán comenzó a pasarla. Esto creo un conflicto con el canal valenciano que no sé en que culminó.

La buena noticia es que Filmin compró esta estupenda serie y la puedes ver ahí con subtítulos en castellano bajo el nombre de El Hotel del Balneario. Una vez que ya tiene subtítulos en español, creo será posible encontrarla en lugares donde mis hermanos latinoamericanos encuentran series imposibles de hallar en las sobrevaloradas y mediocres plataformas gringas.

 

jueves, 16 de febrero de 2023

Maratón de Baile en el Mokka Efti: Babylon Berlin 4x03

 


Episodio un poco aburrido y ambiguo en lo que respecta a los protagonistas, pero ya no doy un peso por ellos. En cambio, hemos retomado varias subtramas del primer episodio y eso lo hace interesante,.

Comenzamos en el bar de un Zeppelin que hace una ruta entre New York y Berlín. Dos extraños entablan conversación en el bar. Uno es un ruso que dice haber estado en La Gran Manzana admirando los rascacielos, el otro es un judío de origen alemán llamado Goldstein que dice viajar por negocios. Goldstein le dice a su nuevo conocido que la costumbre en viajes es revelar los secretos a extraños puesto que no volverán a verse.



Por ejemplo,  él cree que el ruso es un espía. Su interlocutor admite serlo, pero ahora  va a Berlín a procurar la huida de la cárcel de una camarada. Goldstein admite que lo suyo es un negocio de familia, que implica venganza por algo que le robaron a su padre. Eso nos basta para saber que se trata del receptor de la llamada del viejito Jakub en el primer episodio,  y que el robo se refiere al zafiro de Helga

Charlotte despierta gritando . Ha soñado que a su hermana la arrolla un bus. A su lado duerme Rudy. Primero pensé que Lotte se había ido a vivir con el forense y la aplaudí. ¡Que lista,  así se ahorra la renta! No, seguimos en la onda Lotte-boba. Se lo ha traído a vivir con ella, llevan una semana de revolcón y eso que se supone que están entrenando para una maratón de baile.



El que esta furioso es Jacky el casero de Lotte, ya que tenía prohibido subir hombres, pero ella sigue desaprensiva sin importarle la opinión de los demás. Convence a Jacky  de que sea su compañero de baile ya que no puede confiar en Rudy. ¿Y tú,  Lotte,  eres de confiar? Pienso en todos los que han confiado en ella y les ha ido mal: Gereon, Greta, Toni.

Otro desempleado es Fred Jacoby, pareja del fotógrafo Graff. El periodista se encierra en una cabina telefónica y llama todos los contactos de su agenda buscando empleo. El único interesado es un gordito, con cara p;icara que parece dueño de un pasquín. Jacoby concierta una entrevista para el lunes puesto que ese fin de semana ya tiene empleo: animará la maratón de baile en el Mokka Efti.



Vemos a Lotte y Jacky pegando brincos en la pista junto a otros bailarines. Esther canta una versión más animada de Ein Dag mit Gold. A las nueve horas, Jacky ya no da más. Lotte tiene la opción de cambiar de compañero puesto que se trata de un concurso con enfoque de género, la ganadora será la última en quedar en la pista.



Aparece Rheinhold Graff, Le hace un discurso a Charlotte de que ambos son niños de la calle y deben apoyarse mutuamente. Ha venido a reemplazar a Jacky. Lotte lo abraza llorando. Debería conmoverme pero ya ella no me parece que merezca ayuda.



Gereon, entretanto anda investigando el asesinato de Oelshlager. Ningún gánster quiere hablar con el policía.Solo Weintraub le concede una entrevista en u gimnasio. Le dice que ahora es promotor de box, vemos a su nueva estrella un gitano de Hanover llamado Rukelli. Weintraub le dice a Gereon que toda el hampa estaba contenta con Oelshlager y que nadie quería matarlo.



Gereon sigue con su operación encubierta. Llega a los cuarteles de la SA a anunciarles que Stenne está detenido incomunicado. demasiado tarde el Fuhrer lo ha reemplazado con el Conde von Hellendorf. El Inspector Rath visita a Stenne que se desespera. Encerrado no puede hacer mucho. Gereon lo presiona deben derrocar a Wendt. Stenne le confiesa que Wendt es homosexual, que años atrás se vio involucrado en orgias con jovencitos menores. Muchos de ellos podrían testificar.



Wendt y Nyssen han salido a cabalgar por un parque. El consejero busca convencer al industrial que, en vez de viajes por el espacio sideral, encamine sus cohetes para convertirlos en armas de largo alcance. En eso ve una pareja gay acariciándose. El muchacho mira enojado a Wendt como reconociéndolo.

El arco de Gereon Rath cierra el episodio con otra innecesaria visita al Dr. Schmidt quien ahora está torturando animales. Inyecta en una inocente comadreja un elixir que la hace agresiva y le quita el miedo, la lanza contra un perro lobo. Yo apagué la laptop . No me interesa el resultado de estos experimentos nazis que de soporíferos se han vuelto desagradables. No sé dónde quieren llegar los libretistas con esta inclusión de ciencia ficción en un whodunnit histórico.



Entretanto, ¿qué ha pasado con Toni? Pues ha ido a buscar refugio con la última amiga que le queda, su vecinitar Renate , la hija de la mujer que hacía abortos. Llega justo a tiempo. La situación en casa de Renate es caótica, tanto que los servicios sociales se han llevado al hermanito menor. Renate ha quedado a cargo de otros hermanos porque su madre acaba de fallecer. La tienen tendida en una cama de su cuato. Esto le trae recuerdos a Toni de la muerte de su madre.



Renate está contenta de tener otro adulto que la ayude a planear. Si llegan los servicios sociales la separarán de sus hermanos y posiblemente la metan en un orfanato a ella. Es posible que con el frio (abren las ventanas) el cadáver se conserve un par de semanas antes que comience a oler mal. Renate aconseja a sus hermanitos decir que son parientes y están de visita, pero que sus familias los esperan en otros puntos de Alemania. Con eso creen podrán evitar ser separados. Lo principal es conseguir algún dinero, para eso hay que trabajar y para etsas criaturas trabajo es sinónimo de robo.

Toni y el mayor de los hermanitos parten a desvalijar a señoras ingenuas. Su modus operandi es ver en los anuncios alguno ofrecido por mujeres solas que buscan criados o huéspedes. Van a pedir limosna y entremedio les roban. Quiere la suerte que el primer anuncio es de Frau Benkhe que anda buscando un nuevo inquilino.

Ayy no me gusta ver a FrItzi Haberland mal arreglada, con lo guapa que estaba enjoyada y con bebé en brazos en Das Boot. Frau Elizabeth ha comenzado una relación informal con Katelbach. El periodista está feliz no solo por el romance sino porque por fin lo llevarán a juicio. Hans Litten, su abogado, está seguro de poder sacarlo libre.



Golpean la puerta es la banda de Fagin versión Berlín 1931. Toni se presenta , son pobres, su hermanito es mudo, tienen hambre. La compasiva Frau Elisabeth los lleva a la cocina y les da pan con mantequilla. Katelbach protesta que los mendigos les pegarán su piojera. Su amante lo regaña. Toni pide permiso para que su hermanito vaya al baño. El periodista está con la oreja y ojo parado. Siente que el chico se demora y va a verlo. Lo encuentra hurgando en el tocador de Elizabeth. Toni explica que su hermanito nunca ha visto botellas de perfume y solo quiso olerlos. Frau Benhke se apiada de ellos y les permite marcharse. ¿Volverán?

Contenido Violento y Gory: El cadáver de la madre de Renate. El horrible experimento de Schmidt, una pelea de boxeo.



Contenido Sexual y Desnudos: Lotte y Rudy en la cama.

Contenido Feminista: Sigo sin verlo. Tal vez Renate y Toni y su lucha por sobrevivir.

Factor Diversidad: Judíos Katelbach y Goldstein; boxeador gitano. Gay Raff al rescate de Lotte.  Pareja gay en el parque.

lunes, 13 de febrero de 2023

Cuando Solo se Necesita de un Episodio: Glitter y S.A.S. Rogue Heroes



Hay veces en que me he tragado enteras series malísimas siempre con la esperanza de que mejoraran. En cambio, hay otras que me basta un capítulo para cambiar de plataforma o apagar a Ruhami. Esos han sido los casos este invierno con Glitter de Netflix y S.A.S Rogue Heroes de EPIX.

Solo en Netflix podrías encontrar una serie sobre sexo que te hiciese bostezar. Eso aun cuando en el primer episodio, tuvimos varias escenas subidas de tono , y tres desnudos, uno por cada protagonista. A mí me interesó Brokat porque tiene lugar en la Polonia Comunista, 1976 para ser exactos. Me atraen las historias sobre la ex órbita soviética, y más si nos enfocamos en historias de mujeres, más con el frívolo detalle de que la moda de fines de esa década es la más bonita que he presenciado en mis sesenta y tres años de vida.

Un Brocado Sórdido

El titulo ya va asociado con la moda. “Brokat” o brocado se refiere a una tela brillante muy usada en ese tiempo para los vestidos de fiesta. Me imagino que aludirá al falso oropel que simboliza la historia de tres mujeres de diversas edades que desean convertir el oficio más antiguo del mundo en una empresa lucrativa y que les otorgue independencia.



No es la primera serie en usar esa premisa, pero aquí no lidiamos con historias como Harlots o Madame K donde,  a pesar de la belleza del vestuario y el lujo de los escenarios por donde se pasean las protagonistas,  tenemos claro que ser prostituta es un trabajo costoso y arriesgado. En realidad, Glitter (como le han puesto en inglés)  más se asemeja a la brasileña El negocio.



 No sé si vieron esa producción de HBO que tuvo tanto éxito que llegó a las cuatro temporadas   Recordarán que es la historia de Karin, una cortesana de lujo,  harta de ser dominada por clientes y por su “agente” Ariel. Karin decide independizarse y montar su propio negocio en el que la mercancía es ella. Para eso entra en sociedad con Luna y Magali, mujeres más jóvenes, pero refinadas y acostumbradas al mundo de la alta sociedad.

A pesar de su éxito, a mí nunca me atrapó El Negocio. Ya en el primer capítulo tuve problemas con el trio de prostitutas, no me creí su empoderamiento. Una era muy codiciosa, otra muy con ganas de vengarse de los hombres, y Karin muy ingenua con ese cuento de que lo único que le importaba era su empresa, sin reparar que el negocio de la prostitución está lleno de trampas y peligros. En suma, me irritaba que la serie minimizara esos peligros e hiciera hincapié solo en lo glamoroso del trabajo.



Vi varios episodios de El Negocio sin que nunca pudiera engancharme. No me caían bien los personajes con la excepción del chistoso Ariel que andaba disfrazado de judío  sin serlo. Encontraba a las chicas muy ambiciosas y un poco frívolas y me hartaba Karin con sus ínfulas de mujer dura y poderosa, pero en lo que supera a Brocado es en su argumento coherente y en típica vena brasileña, chispeante y jocosa aun cuando se trataba de un negocio sórdido.

                                            Ariel el "falso"judío

Tal como me enseñó a respetar y a no juzgar a los homosexuales, mi madre me enseñó a respetar y no juzgar a las prostitutas. “Son mujeres que se dejan la vida en ese trabajo” me decía y aunque por años admiré a las Call Girls de la alta sociedad,  finalmente tuve que aceptar que no es una vocación sino una solución muy insegura y miserable. Por eso me desagradó el letrero con el que inicia esta serie polaca que dice que una vez , Polonia vivió una era de libertad sexual y que eso hizo a las mujeres poderosas. ¿En serio? ¿El latrocinio representa el empoderamiento de la mujer y es una expresión de libertad sexual? ¿Quién se cree eso? ¿Los chulos?




Mas que Empoderadas, Desesperadas

Comenzamos el cuento en un elegante hotel playero en el Báltico, en lo que se conocía como la Riviera Polaca. Conocemos a Helena, prostituta de postín, quien está ya acercándose una edad en que sus encantos no van a venderse por un alto precio. Su solución ha sido ceder sus servicios al Estado. Ahora trabaja para un servicio secreto que busca chantajear a funcionarios fotografiándolos en situaciones comprometidas.



Se pudo explotar este aspecto de la historia mostrándonos como Helena al jugar a la política camina sobre la cuerda floja,  o describirnos a fondo la corrupción de un gobierno que usa la prostitución y el chantaje para lograr sus fines. En cambio, este escenario es tratado como algo normal y no como material de discusión. Helena seduce a un italiano, los fotografían. Entremedio conoce un chico guapo que se interesa en ella, pero ella acaba en la cama con su jefe. O sea, el estado comunista es el padrote de Helena.



Si ella me resulta muy aburrida, su colega Pola, me es irritante. La conocemos en una estética vendiendo un shampoo que ha traído de un viaje por el extranjero. Quiere dejar su trabajo de prostitución y dedicarse a los productos de belleza, pero le sale al camino un funcionario que le ofrece una licencia a cambio de sexo oral. Pola le manda un bofetón y se va a quejar con un inspector de hacienda y de nuevo descubre que para los hombres solo es una vendedora de sexo.



Aquí faltó algo que nos hiciera estas escenas más intensas, que nos hiciera sentir a una Pola humillada y acorralada, pero no sé qué falló’;  si la actuación, si la dirección, si el argumento. El caso es que Pola acaba en el mismo resort playero que Helena y en compañía del inspector. Pola busca consuelo de su colega más madura. Helena le aconseja acostarse con Vladek (el inspector),  sacárselo de encima previo intercambio de servicios, solo así obtendrá su licencia.

Lo extraño es que de nuevo no sé para donde va la trama porque Vladek no parece mala persona, nunca se siente como que esté presionando a Pola. En la alcoba es super gentil, hasta le proporciona sexo oral. Recordando las exigencias del primer funcionario,  y si esta fuese una película porno, pensaría que se trata de algún código sexual, pero llevo media hora con mucho desnudo, mucho revolcón, y estoy luchando por no bostezar. No me atrae encontrar códigos ni simbolismos en un cuento tan soso.



A la mañana siguiente Helena le proporciona a Pola fotos de ella en la cama con Vladek. Ahora la futura cosmetóloga lo tiene en el puño porque seguramente el funcionario es casado. ¡Cha-cha-cha- chan! Y yo finalmente suelto el bostezo

Por último, tenemos a Marysia, es más jovencita y ha venido con su amiga a una fiesta a la  que no las han invitado. Un chico guapo (esta serie está llena de chicos guapos, muy parecidos entre sí y todos anónimos) consigue hacerlas pasar. La veleidosa Marysia lo abandona y se va con otro chico guapo. Tras mucho bailoteo en una fiesta del hotel, la pareja parte a la playa a hacer lo que hacen las parejas, pero a Marysia cuando le bajan los calzones,  le bajan las dudas.




El chico guapo #3 no acepta negativas. Está a punto de violarla cuando entra en escena Chico Guapo #2 que lo golpea y rescata a la damisela. En agradecimiento, Marysia pasa la noche con él, pero a la mañana siguiente encuentra que él se ha marchado dejándole dinero en la mesita de noche. Y eso es todo, Amigos.

A Glitter le falta mucho, pero principalmente atmosfera, de época, atmósfera histórica y sobre todo carece de contexto. No entendemos qué sucede, no hay suspenso de lo que puede pasar,  no tenemos expectativas sobre los personajes porque no los conocemos ni nos interesa conocerlos. No hay conflicto.



En el primer episodio de Harlots, conocimos a Margaret (Samantha Morton) y sus hijas. Descubrimos su rivalidad con Mrs. Quigley (Lesley Manville.)  Vimos las diferencias entre sus negocios y anticipamos la venta de la virginidad de la ingenua Lucy.

En el inicio de Madame K, sentimos la excitación de abrir el club de Caballeros de Madame Kukk en la casona de los misteriosos Falkenerg. Descubrimos la personalidad de cada pupila y un poco del pasado de Brigitte Kukk. Sentimos el entusiasmo de la novata Linda por comenzar su carrera de prostituta de lujo,  y el miedo y nerviosismo sobre la situación política de Estonia luego de la invasión de Polonia y de la visita de los primeros clientes del alto mando soviético.

En Glitter deberíamos temer al estado policial en el que viven las tres prostitutas, pero nada indica que están en un país comunista, no vemos disidentes, ni falta de libertad y los funcionarios corruptos podrían existir en cualquier democracia. Nada nos hizo sentir que estábamos en Polonia en 1976. Esto fue más notorio en la ropa. No solo hubo una abundancia de minifaldas, sino que Marysia y su amiga parecían disfrazadas de Happenings de los 60s con microminis, pantalones aflautados y detalles como “sacabocados” en caderas y espalda. Así llamaba mi madre a unos vestidos que ella misma diseñaba para su tienda entre 1968-1969 cuya característica eran aperturas redondas en espalda, cadera o cintura.




En esta reseña ,  quien escribe y que obviamente ha visto la serie completa la describe como “oscura y distante” agregado que no se entienden las motivaciones de los personajes. Eso quiere decir que tomé la decisión correcta al no perder tiempo con otro esfuerzo de Netflix de mostrarnos a Polonia, último bastión del conservadurismo europeo, como un país donde se hacen series subiditas de tono. Lástima que mostrar carne y sexo no hagan a una serie más interesante.

Banalizando la Segunda Guerra Mundial

Si Glitter banalizó a la prostitución, S.A.S. Rogue Heroes banalizó el trabajo de los comandos británicos en la Segunda Guerra Mundial casi tanto como Steven Knight banalizó el mundo gansteril en la interminable Peaky Blinders. Como la mencionada serie fue un fenómeno, sus fans esperaban alborozados este cuento lleno de ruidos y furias, pero siguiendo con la cita shakesperiana, narrado por un idiota.

En suma, el primer intento de Steven Knight de adentrarse en el drama bélico será la serie más cara hecha en el Reino Unido pero no se puede decir que valió la pena. Esta colmada de lo que llamaríamos tecnología de punta, en lo que se refiere a efectos especiales;  ejemplos de arrojo machista;  y una banda sonora tan estridente y anacrónica como la de la saga de La Familia Shelby.

Las mayores críticas han sido sobre la musicalización, pero a mí , fanática de los sonidos del swing,  no me molesta, o es lo que me molesta menos. Me lo esperaba o no me lo esperaba porque siempre supe que la serie no me iba a gustar y me alegré de saber que en USA la pasaría EPIX, un canal premium que no poseo.



Sucede que Amazon Prime me ofreció el primer episodio gratis y no iba dejar pasar una oportunidad. Tal vez me esperaba una sorpresa. Lo que me encontré fue una hora de hubris pomposo y caótico. Una historia fascinante mal contada, diálogos imposibles, personajes a los que deseabas que los escabecharan rápido.

Mi problema no radicó ni en la música ni en detalles históricos. Después de todo ya me había leído el libro y sabía lo que iba a pasar, pero hubo momentos en que quería arrojar una bota a la pantalla. Lo curioso es que mi frustración nacía del hastío, del derroche de recursos con los que se podía fabricar un buen relato, pero que acababan en una especie de endiosamiento de un personaje, ridiculización de otro , y atenuación de un tercero.



Si nos quedamos con el primer episodio solo tenemos tres personajes importantes, y una mujer. Un detalle ficticio creado para rellenar la cuota del personaje femenino y para embutir una actriz argelina (Sofia Boutella)  que según los estándares woke pase por ser “de color”.



Héroes de Pacotilla

El supuesto protagonista es David Stirling, escoses de buena familia e hijo de un celebre general. Eso no dice mucho porque David desestima el alto mando. En realidad, es el típico héroe de Steven Knight, uno que desprecia al género humano casi tanto como a sí mismo. Es el nuevo Tommy Shelby, un hombre que se siente atrapado en un mundo absurdo y huye,  no a través de las drogas, sino del alcohol. Una vez convenientemente borracho,  que es su modo de protestar,  sale con discursetes enredados, ampulosos y absurdos que asustan hasta a los australianos que no se asustan de nada.

A mí no me molestó que David fuese un personaje tan repelente puesto que en la vida real fue un tipejo un poco chueco que siempre se adjudicó el crédito de la creación de los SAS, pero me exasperó que la mitad del primer capítulo lo tuviéramos tan presente con sus peroratas desatinadas No ayuda el que lo interprete Connor Swindells de Sex Education, un actor muy poco carismático.



Alternamos las escenas de Stirling con las de Jock que al menos está en el frente de batalla, aunque solo lo vemos entrar en acción una vez en una incursión en el campo italiano donde matan a sesenta sin incurrir en bajas. Espero que el ejército británico de hoy no vea matar italianos como una hazaña bélica de la guerra del desierto que al final la batieron sus tropas coloniales.

Jock está en manos de Alfie Allen que por alguna razón se ve más parecido a Ser Jora que a Theon Greyjoy, aunque no tiene ni la emotividad ni el honor del caballero Mormont. Este Jock es medio payasito y sus soldados no lo toman muy en serio. Algo que no corresponde a los recuentos de las actividades del verdadero Teniente Elwes.



El único personaje más o menos digerible es Paddy Mayne (Jack OÇonnell) al que encontramos en una celda en El Cairo a punto de ser ahorcado por una panda de policías militares enardecidos. Nunca supimos el motivo de su arresto ya que Paddy quecomo indica su apodo es irlandés,  actúa en típica vena celta apaleándolos a todos para ir luego a refugiarse junto a un amigo que parece ser su Pepe Grillo .

Resulta que Stirling en medio de su borrachera anda buscando a Paddy para no se sabe que proyecto, A Paddy no le interesa y anuncia a su amigo que se irá a Birmania (hoy Myanmar) a pelear contra los japoneses. Como estamos en medio de 1941, meses antes de Pearl Harbor,  no sé con qué japoneses pretende pelear. No importa, una incoherencia más.



Paddy Mayne, a pesar de que Stirling pretendió arrebatarle el crédito, fue el verdadero creador de la SAS. Nunca estuvo preso por matar a un MP, nunca la policía militar hubiese intentado matar a un oficial sin previo juicio. Es cierto que cuando Paddy, cubierto de gloria, regreso de su misión en Siria encontró que un oficial superior le había matado al perrito. Hubo un altercado físico, pero Paddy nunca fue enjuiciado.

La serie intenta hacernos ver a Paddy como un psicópata borracho al que todos temen y se insinúa que vive bajo el desprecio de los inglesessuperiores y subalternos porque es de clase baja, irlandés e ignorante.  Lo cierto es que Robert Blair Mayne nació dentro de una familia de terratenientes acomodada del Norte de Irlanda. No era católico, de hecho, era masón. Aunque acabó alcohólico y había sido boxeador amateur, era un hombre cabal que fue el gran genio detrás de la SAS. Por último, era celebre entre los británicos por ser campeón profesional de rugby y respetado por ser en la vida civil un prestigioso abogado. Como que la realidad choca con este retrato tan poco favorecedor que le hace la serie al Capitán Mayne (llegó a ser Teniente Coronel)



He dejado para el ultimo retrato,  el de Jock Elwes que en manos de Knight es otro de esos inglesitos excéntricos muerto de ganas de matar y morir, desvinculado de la realidad y de sus hombres que lo observan como si fuese un espectáculo de circo. Elwes que en la vida real pasó a ser un héroe romántico en todo el sentido de la palabra (sus cartas de amor a su prometida Miren Banford fueron publicadas póstumamente)  aquí parece un soldado Gung Ho, que sigue sus propias reglas sin método que controle su locura.

Se ha hablado mucho de que la SAS fue un producto celta puesto que Stirling era escoses, Mayne irlandés y Elwes gales. Digamos que ninguno era muy representativo de sus grupos étnicos. Elwes era hijo de australiana y se crio en Australia. Por eso es que resulta tan ridículo que haga que sus comandos se roben las raciones de los Aussies, casi tanto como su comentario de que en el Ejército Británico todo se comparte.

Como en Peaky Blinders, la sutil xenofobia se hace sentir. Vi un clip en el que Paddy (borracho para variar) entrena miembros de la Legión Extranjera y comenta que los franceses segregan en su ejército a negros y judíos. Aparte de que es una tremenda mentiraLa Legión era la sección más diversa y menos racista de las fuerzas militares galas en cambio la discriminación de estos “Héroes” de pacotilla involucra hasta a las tropas del imperio.



Un constante en este infortunado primer capítulo es lo importante que era Tobruk. Existe en la trama la impresión de que si cae este puerto libio, los ingleses pierden la guerra. Eventualmente Tobruk cayó, pero si se dilató esa rendición fue gracias a los esfuerzos de los valerosos australianos que habían cruzado medio globo terráqueo para servir y morir por un imperio que los despreciaba.

La guerra del Norte de África,  más que una extensión del conflicto europeo fue una campaña para proteger las colonias. Se trajo para ese propósito a los habitantes de la Commonwealth y de las colonias. Ahí sirvieron con distinción soldados de las Antípodas, Canadá, Sudáfrica junto a tropas Sikh y hasta judíos de lo que hoy es Israel (Moshe Dayan perdió un ojo en esa campaña del río Litani donde Paddy Mayne se cubrió de gloria).

Sin embargo, la serie no solo no reconoce ese esfuerzo, hasta se burla de los diggers como en esa primera escena en el bar de El Cairo donde el perpetuamente borracho Stirling provoca a unos soldados australianos, se burla de sus muertos,  y finalmente los ahuyenta con sus discursos de orate.



Mi problema con esta serie es que no tengo paciencia para estos personajillos de Knight que se creen dioses y en realidad son trapos. Me aburren, como me aburre el poco respeto por los verdaderos héroes y por una guerra que costó tantas vidas. Knight ha querido hacer Inglorious Basterds sin comprender ni cumplir los propósitos de Tarentino.

A cambio, le ha quedado una combinación de Hogan’s Heroes y Doce en el patíbulo. Estos dos clásicos nacieron de un zeitgeist especifico, de un momento en que los chicos de Estados Unidos morían o volvían despedazados de las junglas de Indochina. Hoy ese modelo no es tan admirado a menos que se lo sitúe en su contexto.

¿Cuál es el contexto de Rogue Heroes ?  ¿Uno en el cual psicópatas, alcohólicos y otros inadaptados pueden ser útiles a la patria desencadenando sus bajos instintos?  ¿Hacernos creer que la guerra es una gran aventura y buena cura para el aburrimiento? Al menos en Peaky Blinders todos los Shelby sufrían de alguna forma de trauma bélico,  y eso le daba cierto tono pacifista a la serie.



Aquí la guerra no se entiende, no se sabe por qué se pelea, la idea es divertirse matando al enemigo y apaleando a los aliados en sus ratos libres. Si en algo se distinguieron los miembros de las SAS fue por su inteligencia, sus estrategias, su sangre fría y don de liderazgo. Aquí son solo una panda de inmaduros llenos de necesidades infantiles como la de destruir. Steven Knight cree seguir trabajando con malandrines de tercera clase, y por eso no entiende el significado de heroísmo. Eso me irrita y me aburre así que les dejo el cuento a los fans de Peaky Blinders.