martes, 27 de junio de 2023

Artes Marciales y Los Tongs en el Viejo San Francisco: Warrior (Temporada 1)

 


Cada día me encuentro con nuevas visiones del Viejo Oeste en plataformas de streaming. Recobrada mi HBOMax entro en el mundo de las sociedades secretas chinas de California. Mas violenta y étnica que Kung Fu, Warrior  (ya en su Tercera Temporada) ha venido a ilustrarnos sobre aspectos no muy tratados, Hablo de Los habitantes del Celeste Imperio y su rol en el Far West, el desarrollo de la mayor urbe en la región,  las luchas de poder entre facciones orientales, y el racismo de las autoridades que marcaría la existencia de la comunidad asiática en USA.

El Sueño de Bruce Lee

Comencé diciendo que Warrior, es mucho más étnica que Kung Fu, en el sentido que el rol protagónico lo lleva, Andrew Koji,  un actor del Lejano Oriente, pero la mayor diferencia con la serie de David Carradine, es que el protagonista carece de la serenidad y filosofía taoísta de Caine. Esto convierte a Ah Sahm en un héroe con defectos, el principal el hubris. Por suerte siempre hay otros personajes (sobre todo mujeres) que le dan lecciones de humildad que lo centran.

Warrior está inspirada en un proyecto de Bruce Lee que nunca vio luz en vida de la estrella de la artes marciales. Su hija Shannon lo rescató y funge como productora de esta serie que ha alcanzado un alto nivel de popularidad.  8,4 en IMDB; (9, 4 de audiencia y 8.9 de crítica especializada en Rotten Tomatoes). Aun cuando  la pandemia retrasó la Tercera Temporada por casi tres años.




Como corresponde también provoca quejas, que si los chinos no hablan chino, que si es muy violenta, mucho sexo gráfico, descuidos históricos como que Ah Toy no era lesbiana en la vida real o que el protagonista, no sea chino sino anglo-japones, etc. Lo del sexo y violencia (y el ángulo lésbico) son marcas registradas del producto HBOMax. Sin contar que la mayoría de las series de cable siguen ese ritmo. Hasta Taylor Sheridan se ha desaforado en términos de violencia innecesaria y sexo kinky en 1923.

Cuando los Chinos Cruzaron “La Sal”

Respecto de la historicidad de esta fábula, exploremos un poco el contexto histórico. La cúspide de la inmigración china a Estados Unidos tuvo lugar a mediados del Siglo XIX y se dio más que nada en California. Las razones para cruzar “La Sal” como llamaban al Pacifico,  eran varias: hambruna, catástrofes naturales y desorden político (La Rebelión Taiping). Agreguémosle que California era un sueño dorado para quien buscaba empleo ya que había amplias oportunidades en la minería y en la construcción del ferrocarril. Como vimos los fans de Kung Fu y de Hell on Wheels, los coolies chinos fueron instrumentales en la construcción del ferrocarril que uniría las dos costas del país.

No solo en las minas y poniendo rieles trabajaban los industriosos hijos del Celeste Imperio. En las ciudades también hallaban empleo fuese de criados, en lavanderías,  o en negocios de Chinatown, el Barrio Chino de San Francisco,  donde transcurre gran parte de esta historia. Como cobraban poco, eran resistentes,  y muy trabajadores, no había espacio laboral que no los solicitase. Pronto, hubo empresarios chinos como el Wang Chao de Warrior, que servían de intermediarios entre patronos y mano de obra traída de Asia.

El problema es que la cotización del coolie por parte del patrón blanco lo colocaba en abierta rivalidad con la otra gran fuerza laboral: los irlandeses que también emigraron en masa a la Costa Oeste después de la Guerra de Secesión. Esto iba a causar disturbios muy bien ilustrados por la serie que tiene como el principal antagonista a Dylan Leary, un veterano de la Guerra de Secesión que ya en el primer episodio habla de su servicio a su nueva patria, de los sacrificios de los hijos de Erin a ambos bandos y de la ingratitud de un país que hoy les quita oportunidades laborales trayendo chinos para que los reemplacen. Dylan Leary está basado en el líder sindical y político,  Dennis Kearney.



A mí me da tristeza que en los western siempre los más racistas son los irlandeses. Lo vimos en Hell on Wheels, pero al menos allá tenían a los Hermanos McGinnes como equilibrio. Aquí, aunque Leary adquiere dimensiones heroicas sigue siendo el malo del cuento, y un representante de la supremacía blanca.

Por otro lado, la serie nos trae la presencia de Los Tongs, una sociedad secreta que apareció en los Barrios Chinos del país, primero con la intención de proteger a los recién llegado, pero luego devino en organizaciones criminales que oprimían a los mismos que debían defender. Los Tongs se dedicaron a la venta de opio y a mantener burdeles que alimentaban con muchachitas que traían de la China y que incluso secuestraban. Pronto estás bandas comenzaron a dividirse en grupos que luchaban entre sí.



Mientras esto ocurría dentro de Chinatown, en extramuros se libraba otra batalla motivada por odio racial. Se creó una imagen de los chinos como entes sanguinarios que buscaban corromper a la puritana sociedad blanca. Apareció el mito del “peligro amarillo” que llegó hasta la legislación, culminando en la Ley de Exclusión de 1882 que prohibía el arribo de nuevos inmigrantes del Celeste Imperio. Incluso si un chino visitaba su país natal,  se le impedía el regreso a Estados Unidos.

Aun así, ya había en suelo americano una amplia población china que seguiría creciendo a pesar de las restricciones. Hasta la Segunda Guerra Mundial hubo toda clase de impedimentos para que los chinos fuesen asimilados por la cultura imperante, comenzando por la prohibición de casarse con blancos. Lo chistoso es que, según las estadísticas,  en estados como Nueva York, donde nunca se impusieron esas reglas ridículas, hubo muchos chinos que se casaron con chicas…¡irlandesas! Después de todo era bueno casarse con personas tan trabajadoras y que no eran maleantes. Pronto se hicieron cargo de algunos negocios como las lavanderías y de restaurantes, por algo en Bonanza los Cartwright empleaban a un cocinero chino.



En Busca de Xiaojing

Warrior se concentra en la era pre-Ley de Exclusión; y en un espacio geográfico especifico, (San Francisco) y un grupo en particular (Los Tongs). La serie inicia en 1873 con un barco que ha llegado de la China cargado de coolies, entre ellos el enigmático Ah Sahm. A diferencia de sus compañeros de viaje,  Ah Sahm no viene en busca de empleo o fortuna. Como Kwang Chang Caine viene buscando un pariente,  su hermana Xiaojing.

Ah Sahm y su hermana fueron criados en la China por su abuelo, un capitán de barco estadounidense que les enseñó a hablar inglés. Aparte, Ah Sahm tuvo un entrenamiento en las artes marciales. En su arrogancia se enfrentó al hijo del señor feudal del lugar y lo mató. El warlord exigió,  para respetar la vida del asesino de su hijo, la mano de Xiaojing. Se la dieron, pero cansada de los abusos de marido, Xiaojing huyó al otro lado de La Sal. Su marido mató al padre de los muchachos , pero eventualmente estiró la pata. Eso ha motivado a Ah Sahm a ir en busca de Xiaojing para regresarla a su hogar.

La llegada de los chinos al puerto es recibida por protestantes portando pancartas y exigiendo que se acabe la inmigración oriental. Descubrimos que son blancos y chinos ricos de California quienes están haciendo venir trabajadores a America. Eso se los explica a los recién llegado,  Wang Chao, un intermediario que les lanza un discurso. Quienes han pagado por su pasaje de barco esperan remuneración. Los coolies deberán trabajarles hasta que hayan cubierto el precio del viaje.



Acto seguido,  viene un rito no escrito de iniciación, los aduanerostodos-irlandesesse complacen en  humillar y maltratar a los chinos. Eso hasta que se meten con Ah Sahm y descubren que sabe inglés y que sabe dar patadas. Tras verlo vencer a tres hombres, Wan Chao lo recluta y vende al Hop Wei, un poderoso Tong. 



Así Ah Sahm pasa a ser propiedad de Padre Jun, , héroe de La Guerra del Opio y líder del Hop Wei. Quien da la bienvenida al recién llegado es el Joven Jun, hijo del líder y que, aunque parezca un junior millenial es un experto tirador de cuchillos. Las aventuras de este par,  que comparten una sinergia muy especial, componen una subtrama de la serie.




El Joven Jun que es parrandero nato lleva a su nuevo amigo al exclusivo burdel de Ah Toy. Ah Sahm se va de boca preguntando si alguna de las pupilas conoce a una tal Xiaojing. Esa noche aparecen en el burdel los pandilleros del Tong rival de Long Zhii y se llevan a Ah Sahm a otra mansión de Chinatown. Allá Ah Sahm se enfrenta con Lin Yong, el sicario de Long Zhii y ante su sorpresa el joven eurasiático es derrotado. La pelea es interrumpida por la aparición de Mai Ling, esposa de Long Zii y la mujer más poderosa del Barrio Chino. El sorprendido Ah Sahm la reconoce, es Xiaojing.



A solas , Mai Ling reprocha a su hermano por haberla obligado a casarse con un abusador y se ríe de su intención de retornar a China juntos. Ahora ella tiene poder, “no soy la puta de nadie” y no piensa abandonar los privilegios adquiridos. El desolado Ah Sahm retorna al burdel y comparte su secreto con Ah Toy. A pesar de que su hermana le consigue un pasaje de regreso, decide quedarse en este nuevo país, en esta ciudad peligrosa, pero prodigiosa y servir los intereses del Hop Wei a pesar de que esto lo enfrente al turf de  Mai Ling.

Ah Sahm Entre “Los Patos”

Los problemas de Ah Sahm aumentan cuando conoce en una tienda de un apotecario chino a una bella mujer blanca. Por seguirla, el joven guerrero traspasa el límite obligado del Barrio Chino y se encuentra en La Laguna (the Pond),  el mundo de los blancos rodeado,  de patos (ducks) el apodo a caucásicos poco amistosos. Por defender a la rubia,  Ah Sahm es golpeado y encarcelado a pesar de las protestas de la mujer que resulta ser Mrs. Penélope Blake, esposa del alcalde.



Ah Sahm ya ha aprendido  cómo funciona el mundo de los “patos “y finge ser un coolie bobo que no habla inglés, pero su situación va de mal en peor. Se aprovechan de su presencia para colgarle cuanto crimen hay en la ciudad. Padre Jun se lava las manos. Aunque Penny logra visitarlo en la carcel y descubre que su defensor es angloparlante y nieto de un estadounidense, puede hacer poco por él. Como toda mujer blanca (y china) de entonces,  es silenciada, suprimida por fuerzas patriarcales.



Buckley, un hombrecillo siniestro que funge de eminencia gris del alcalde amenaza al defensor de oficio. Dylan Leary exige del jefe de policía, Bill que meta unos matones en la celda del chino. Ni decir que salen apaleados. Bill descubre que Ah Sahm, no solo es una máquina de dar patadas,  además es bilingüe y muy coherente.



Será Mai Ling quien deba rescatar,  con amenazas e intimidaciones,  a un hermano que se rehúsa a marcharse e insiste en ponerse en peligro y en el bando de los enemigos de Xiaojing. Ah Sahm retorna al Hop Wei y,  tras dejarse apalear por Padre Jun,  es aceptado como parte del rebaño. Sin embargo, la duda persiste. ¿Qué harán los Jun cuando sepan que Ah Sahm es hermano de su peor enemiga? ¿O cuando descubran que es amante de la esposa del alcalde?



Lo fascinante de Warrior es que, aunque se entra en el desconocido bajo mundo oriental de la época, también nos ofrece el auge de la corrupción en la respetable clase política comenzando por el alcalde que ha comprado a su esposa aprovechándose de la necesidad económica de la familia de Penny, pero en vez de atenderla, se la pasa en el burdel de Ah Toy gozando de parejas de ambos sexos.Mas siniestro es Buckley, aparentemente un individuo insignificante, pero que  tiene sus tentáculos en todos lados incluyendo una ambigua sociedad con Mai Ling que espera destruya el poder de los Tongs.



La mayor corrupción  reside en el cuerpo de policía. Todos irlandeses, todos veteranos del ejército de la Unión, todos en el bolsillo de Leary. El principal entre ello es Bill O’Hara, un hombre honesto que ha caído preso de la mesa de juego. Su debilidad es explotada por Leary. Bill es puesto a cargo de un escuadrón especial que debe patrullar Chinatown. En ese batallón entra Lee a quien todos miran con desconfianza por ser nuevo, sureño y no ser irlandés. Sin embargo, a diferencia de ellos, Lee ni es racista ni es deshonesto, pero como todos en esta serie arrastra un oscuro y trágico secreto.



Para retratar este mundo de odios raciales, guerras de pandilla y corrupción policía, Shannon Lee y Jonathan Tropper han creado un mundo exótico e irreal en Chinatown incluyendo los extravagantes vestuarios de las mujeres sobre todo el de Ah Toy. Inspirada en una Madame real, el personaje de Olivia Chen es totalmente fantástico desde su lesbianismo hasta su capacidad de usar  katanas con las que hace justicia.



Otro detalle muy apreciado es sacar a veces a Ah Sahm de ese espacio claustrofóbico del Barrio Chino y llevarlo a otros lugares. El quinto capitulo es una mini gema con toques de John Ford y Tarentino entre otros. Enviados por Padre Jun a buscar el cadáver de un pariente lejano, Joven Jun y Ah Sahm deben viajar en una diligencia llena de “patos” racistas,  más un whiskie priest (por una vez ponen un cura católico bueno, aunque se trate de un cliché del género). Abandonados por el cochero en un desierto de Nevada donde solo hay una taberna, los jóvenes chinos deben enfrentar desde pullas raciales a un ataque de bandidos que hace al milieu una versión del Oeste de El Boque Petrificado de Robert E. Sherwood.



El buen trabajo de Jonathan Tropper (graduado de Yeshivá University y NYU) ha sabido sacar lo mejor de la obra de Bruce Lee y ponerla al día de una manera que supera al Western exótico que fue Kung Fu. En manos de Tropper, Shannon Lee , y un buen elenco,  Warrior se ha convertido en una combinación de wuxia y genero de gánsteres, que a ratos se acerca a Boardwalk Empire.

Contenido Violento y Gory: Es una neo-wuxia mezclada con guerras de pandillas. No pasa mucho rato sin que corra la sangre.

Contenido Sexual y Desnudos: Mas mujeres desnudas que varones,  lo que garantiza el triunfo del Masculine Gaze. Sexo lésbico y hetero. Sin embargo, hay un par de escenas refinadas. La primera vez de Ah Sahm y Penny es, aunque apresurada, casi romántica y eso se nota en que no hay desnudos. Romanticismo, y ternura casi anticuada juegan un papel en el breve, pero intenso romance que sostiene el Joven Jun con la prostituta India Wanikea en Nevada. Por algo Jun dice a su amigo al despedirse,  en el penúltimo episodio,  “debimos quedarnos allá”.




Contenido Feminista: Hay solo tres mujeres reconocibles, las tres fueron/son víctimas. Ninguna acepta ese rol. Vemos a Penny rebelarse en varias maneras. Incluso su adulterio es un gesto en contra del racismo. Aunque ella y Xiaojing han sido obligadas a casarse para salvar a sus familias, Penny todavía no puede reinventarse como lo ha hecho su cuñada. Mai Ling se convertirá en cabeza del Long Zhi, pero su reinado es frágil y tambalea si sus hombres no la apoyan.

Diferente es el caso de Ah Toy quien ha hecho del latrocinio una carrera con la que puede darse el lujo de comprar tierras, comprar policías y comprar huerfanitas vírgenes para protegerlas. Ah Toy es un personaje multifacético. Lo vemos cuando llega a la pelea pugilística de los Campeones Tong y toda Chinatown,  incluso los policías,  le abren paso a ella y su sequito de “damas”.



Ah Toy sabe complacer a sus clientes, proteger a sus pupilas, hacer negocios y soñar, como le dice a Ah, Sahm,  en un mundo en el que los chinos sean ciudadanos estadounidenses con derechos al sueño americano. Sin embargo, la audiencia conoce otro aspecto de la Madame. La vemos salir de noche,  encapuchada y armada de su espada,  para convertirse en guerrera vengadora.

En esa guisa,  Ah Toy establece un vínculo cultural con su tierra oriental. Es una figura legendaria, una diosa, pero también un hada protectora ya que vela por Ah Sahm con más poder que Penny y con más afecto que Mai Ling. Por todo eso, es Ah Toy la verdadera reina badass de Warrior y su mejor icono feminista.



Factor Diversidad: Estadounidenses WASP, chinos e irlandeses. Vemos racismo de los WASPS contra los del Lejano Oriente y los Hijos de Erin. Vemos desconfianza de parte de los últimos por el Oficial Lee que no es irlandés y,  para colmo,  es sureño. Resulta que Lee es el menos racista ya que tuvo amores con una joven negra que fue asesinada por sus primos.



En el último episodio,  un par de afroamericanos entra a La Banshee, la taberna de Leary,  y piden un trago. Un irlandés en la barra se indigna y azuza a la clientela en contra de los humildes negros. La situación se está poniendo fea cuando entra Leary que ordena que les sirvan a sus parroquianos de color.

Les recuerda a sus compatriotas que los negros vinieron arrastrados a la fuerza y encadenados a America. Merecen respeto. Les dice a los parroquianos de color que se beban su trago y se marchen, dándoles una amonestación por su temeridad. Lo que implican sus palabras es que no todos los bares de blancos les van a servir y él no va a estar siempre en La Banshee para defenderlos.

Sorprende la tolerancia emanada por las palabras del irlandés, cuando escenas más adelante ordena a sus hombres que les rompan las manos a unos pobres coolies. Sin embargo, sabemos que Leary no odia a los negros, aunque los vea también como competencia laboral.

En el primer episodio , Leary hace un discurso evocando La Guerra de Secesión donde sirvió en el ejército de la Unión. Recién llegado a Estados Unidos se encontró matando hombres y viendo morir a sus amigos. No se arrepiente porque entendió que era una causa justa, que acabaría con la esclavitud. Sin embargo, la postguerra no trajo el resultado que esperaba,  que los Libertos se marchasen de regreso a África. En cambio, se quedaron en USA para quitarles lo empleos a los nuevos inmigrantes.

Encontré esta explicación fascinante y me pregunto si era esa la intención de los abolicionistas: propiciar un retorno de los exesclavos a su país de origen. Por algo James Monroe fundó , en 1822 la Republica de Liberia para que fuese un hogar de los manumitidos, pero pocos de ellos viajaron a la nueva nación. Es posible que ya no tuviesen vinculación con el continente africano, que tras generaciones de vivir en USA quisiesen, como entes libres, encontrar una patria en suelo americano. Más o menos lo que desea Ah Toy para los chinos.

Warrior puede verse completa en MAX.

3 comentarios:

  1. Wonderful, wonderful characters. I'm in love with Andrew. One character I hated and was glad when she got a bullet was Vega, shame she was a estereotiped latina. Have a problem with your hubby, in Season 2 he's become whiney and stoned most of the time. He's beginning to bore me.

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  2. Because he ended up in the corrupted police force as a good and just boy and is now lost, poor chap, and is returning to drugs. He needs a hot hug from that gay tong boy and some cuddling LOL The only characters I truly despise in it are the majors wife and her disgusting vile sister that whores herself with the enemy, not that I would resist the Irish hunk myself....

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  3. ohh I hated Sophie too. You'll be glad to know that none of the Mercer Siters is coming back, which is extremely odd. I'm not alone in thinking that Penny was Ah Sahm's true love.He said so, and yet he'll forget all about her (after betrtraying her) and leave her in the looney bin? Hong and Lee that would be a good couple.

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