jueves, 16 de mayo de 2024

¿Existieron John Blackthorne y Yoshi Toranaga? El trasfondo histórico de Shogun

 


Definitivamente Shogun ha sido el fenómeno de esta primavera.  Los Nielsen, Rotten Tomatoes e IMDB la consideran lo mejor de la televisión del 2024. La serie de FX está siendo vista también, gracias a Disney,  en Europa y América Latina. Es imperdible. Sin embargo, antes de verla, antes de yo reseñarla, quiero ofrecerles un poco de historia para que puedan comprender las intrigas palaciegas que hacían al Japón ingobernable en los albores del siglo XVII y las condiciones que hacen tan impactante la llegada de un piloto inglés a las costas niponas.

James Clavell y el éxito de Shogun

Un breve resumen del origen de Shogun. El autor australiano James Clavell sufrió las brutalidades que acompañaron a los prisioneros de guerra de los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial. Logró superar su trauma y amarguras desarrollando un gran aprecio por la cultura e historia niponas.  Este apreció cristalizó en su bestseller de 1971,  Shogun, una historia que tiene lugar a comienzos del siglo XVII y cuyos protagonistas son veladas reencarnaciones de figuras históricas.

Aunque Clavell ya gozaba de prestigio en la comunidad literaria, con superventas (King Rat) y guiones de cine (Al maestro con cariño), fue una sorpresa el abrumador éxito de una novela en la que el autor había puesto cuatro años de trabajo, la mayor parte dedicada a la investigación histórica. Clavell escogió un momento clave de la historia japonesa,  situando su trama en 1600 y describiendo eventos reales y figuras históricas,  ahora con nombres ficticios para poder tomarse alguna que otra licencia histórica.



Comenzaré dando un trasfondo histórico muy somero y pido disculpas a mis lectores japoneses o amigos de la historia,  si lo hago tan breve. La historia de Japón en el siglo XVI estuvo salpicada de guerras, gobiernos débiles,  intercalados por grandes personalidades que transformarían a la nación,  y la muy importante apertura de un milenario imperio al comercio y cultura europeos.

Históricamente Japón había tenido un emperador,  pero el poder estaba en manos del shogun, un líder militar que controlaba a las más grandes familias samurái que vivían todavía en un estado feudal. Los interés diversos de estos “daimios” muchas veces entrechocaban entre sí,  lo que llevaba a levantamientos que debilitaban cualquier progreso y reforma.

Yeyasu el Nacimiento del Shogunato

A mediados de siglo,   y en medio del vacío de poder,  surgió un poderoso líder llamado Oda Nobunaga. Supo mantener las riendas del poder sin inclinarse por ninguno de los daimios y dio al Japón una era pacifica caracterizada por reformas y expansión de comercio.  Sin embargo, fue también culpable de injusticias que llevaron a uno de sus vasallos a asesinarlo. Ese es el origen del calvario de Mariko-san,  la heroína de Shogun , quien ha vivido bajo el estigma,  de ser la hija de un Matarreyes.

Tanto en la serie como en la vida real este Matarreyes se llamó Akechi. Como castigo por su regicidio, Akechi fue obligado a suicidarse y toda su familia fue exterminada. Únicamente se salvó su hija, Tama,  rescatada por su esposo Hosokawa Tadaoki. Eventualmente,  la dama se convirtió al catolicismo tomando el nombre de “Gracia”. Esta figura histórica inspiró la creación de Toda Mariko a pesar de que Doña Gracia y William Adams (el verdadero John Blackthorne)  nunca se conocieron.

                                             Gracia Hosokawa

Tras la muerte de Nobunaga,  su lugar fue ocupado por uno de sus lugartenientes Toyotomy Hideyoshi. Debido a que no era noble, Hydeyoshi nunca obtuvo el título de Shogun, contentándose con el de “Teigo”.Ya anciano al llegar al poder,  Hiyedoshi murió, dejando como heredero a su hijo Hydeyori, demasiado joven para reinar.

El gobierno cayó en manos de un consejo de regentes. De ese consejo surgiría una de las máximas figuras de la historia nipona. Fukugawa Yeyasu pertenecía una familia de la nobleza samurái no muy importante, pero sus ambiciones eran grandes. Logró desligarse del consejo, conseguir aliados y tras la batalla clave de Sekigahara, convertirse en shogun y fundar una dinastía (El Shogunato) que duraría hasta 1868.

Fue en medio de esta lucha de poder que a las costas de Japón llegó el primer inglés, un piloto llamado William Adams que se convertiría en consejero de Yeyasu. Este es el trasfondo histórico sobre el cual trabaja Clavell quien ha convertido a Yeyasu en el daimio Yoshi Toronaga y al Anjin-San (como llamaron los japoneses) en John Blackthorne.

                                    Los tres líderes del Japón

Europa y el Descubrimiento de Japón

Antes de internarnos en libros y adaptaciones, tenemos que hablar de un fenómeno de los siglos XVI y XVII,  la llegada del hombre blanco a otras regiones del planeta. En la escuela nos enseñan que la Era de la Exploración fue seguida por la de la Colonización que hoy evoca la opresión de la población local por parte de una elite de administradores blancos y extranjeros. Hay periodos intermedios que se desconocen. Por ejemplo, en América Latina tenemos la Era de la Conquista,  y la Colonia presenta un fenómeno desconocido en otros continentes, nos referimos al mestizaje.

En el resto del mundo,  la población caucásica nunca dejó de ser una minoría (a diferencia de USA y Australia donde los nacidos en esos nuevos países pasarían a ser la población dominante por encima de los nativos y de los administradores británicos). En Asia,  el fenómeno es más interesante puesto que los países más poderosos y grandes, China, Japón e incluso la India,  siguieron siendo gobernados por reyes autóctonos, aun cuando las potencias europeas ejerciesen influencia sobre ellos.

Nuestra idea de “poderes colonizadores” nace de las experiencias del imperialismo inglés y holandés. En 1600,  cuando Blackthorne/Adams llega a Japón en un navío holandés, no existía todavía siquiera un concepto de imperios ultramarinos británico u holandes. Las grandes potencias europeas eran España y Portugal (que entre 1590 a 1630, fueron un solo país).

                              Ilustración japonesa sobre la llegada de William Adams

Desde que Vasco de Gama encontrase una ruta marítima —circunnavegando el continente africano—hasta la India,  que Portugal había abierto una vía para la exploración de Asia y para la cristianización de nuevos pueblos. Siempre debemos recordar que el proceso de conquista y colonización iba de la mano con la evangelización.

Cuando, en el siglo XIII,  Marco Polo regresó de Catay (China),  trajo noticias de un archipiélago que quedaba más al norte del Mar de la China llamado “Zipango”.  En los próximos siglos, este reino insular fue incluido en mapas de la región a pesar de que ningún europeo se había aventurado hasta sus costas.

A lo largo del siglo XVI,  se establecieron asentamientos portugueses en la India incluyendo Goa, Cochin y una serie de islas llamadas por los lusitanos “Bom Bahía”(Bombay,  hoy Mumbai)  que pasarían a ser inglesas cuando Caterina de Braganza las trajera de dote al casarse con Carlos II . Los portugueses también se infiltraron en la China y aunque hubo escaramuzas con las fuerzas imperiales,  consiguieron su pied-de-terre en Macao donde construyeron una fortaleza que menciona John Blackthorne a Toronaga.



Donde fallaban las lanzas y arcabuces de los portugueses,  funcionaba la palabra cristiana Más conseguían los misioneros de las ordenes mendicantes de las autoridades locales que el poderío militar. Así se abrieron vías pacíficas de comunicación y del deseado comercio. De esa manera llegarían lo europeos a las costas de lo que hoy llamamos Japón.

La Evangelización de los Japoneses

Fue en 1543 que San Francisco Javier y un grupo de monjes arribaron a Kagoshima. La sencillez, buenas intenciones y mensaje caritativo de los franciscanos tuvieron buena entrada no solo entre el hoi polloi, agotado por las guerras y despotismo de los poderosos, sino también entre las mujeres de la nobleza samurái y hasta algunos daimios. Pronto el Reino de Portugal comerciaba con los señores feudales y hacia su aparición el famoso Navío Negro.



No solo franciscanos sino también dominicos entrarían en el Japón. En tiempos de Nobunaga, el shogun abrió las puertas a los jesuitas, maestros de la diplomacia,  que comenzaron a atraer a más daimios a su fe otorgándoles valiosos regalos. Por ese entonces se presentó otro problema, la infiltración de clérigos españoles, como el Fray Domingo al que Blackthorne conocerá en prisión.

Como les explicará Blackthorne a Toronaga y a Senhora Mariko, en 1494, el Papa Borgia dividió el mundo entre dos grandes potencias:  Portugal y España. El Tratado de Tordesillas les dejaba casi todo el Sureste de Asia a los portugueses, quedándose los españoles con el nuevo mundo de Las Américas. No contentos con eso, los barcos de la corona española habían incursionado por el Pacífico llegando hasta Asia y conquistando Las Filipinas.

Desde ese archipiélago bastaba un brinco hasta el Japón y ahí se apersonaron varias órdenes religiosas. Se armaron trifulcas entre portugueses y españoles, tal como entre jesuitas y las ordenes mendicantes. Esto asombraba a las autoridades japonesas que no entendían como correligionarios pudiesen ser rivales. La desconfianza del Teigo Hideyoshi y su corte ( a pesar de que muchos nobles eran cristianos) llevó en 1597 al primer martirio de cristianos en el Japón

Ocurrió en el puerto de Nagasaki, que era como un feudo que el imperio les había dado a los cristianos. Por órdenes imperiales,  26 mártires,  todos varones—entre ellos San Felipe de Jesús— fueron crucificados,  tras habérseles amputado las orejas. Este incidente no afectaría ni el comercio ni los oficios de los eclesiásticos europeos en el Japón.

                   Don Ernesto Alonso dando vida a San Felipe de Jesús (México, 1949)

El Shogun Yeyasu expendería el comercio,  enviaría embajadas a Europa incluyendo una a la tierra del Anjin San. Mas adelante, otros sucesos harían que Yeyasu perdiese confianza en los cristianos y prohibiese el culto en 1614. Tanta prohibición incomodó a los daimio cristianos que junto con la población católica se levantarían en contra del shogun Iemitsu (nieto de Yeyasu) en 1638. Este los aplastaría cruelmente, destruiría las iglesias, acabaría con las órdenes religiosas y torturaría y martirizaría a miles de japoneses cristianos. Eso se puede apreciar en el filme de Martin Scorsese Silencio.



Mas grave aún,  el shogun expulsó a todos los extranjeros de su imperio. Solo los holandeses pudieron quedarse, pero únicamente en Nagasaki con un permiso de comerciar, pero no de integrarse a la sociedad japonesa. Esta situación duraría por más de dos siglos hasta que los navíos del Comodoro Perry obligasen a Japón a abrirse al mundo en 1853.

Un Inglés en un Navío Holandés

Debemos volver a John Blackthorne y ver cómo es que ingleses y holandeses vinieron a husmear en las costas de lo que en Inglaterra ya conocían como “The Yapans”.  El fin del siglo XVI trajo cambios a la geopolítica europea. Los Países Bajos se independizaron de España y, bajo la Casa de Orange, se convirtieron en una nación protestante, pero humanista y muy ambiciosa. El comercio los haría ricos creando una pudiente y poderosa clase burguesa con el ojo puesto en ultramar.

La Inglaterra Isabelina había por fin alcanzado una estabilidad policía y social y ahora quería derrotar a España y crear su propio imperio ultramarino. Sus primeros intentos en América del Norte— con la colonia de Roanoke en Virginia— habían fracasado, por lo tanto, el Reino Unido como Holanda comenzarían la primera fase de su colonialismo, no como invasores y conquistadores, sino como ladrones o mejor dicho como piratas.

                                         Barco Negro portugués
                                       Navío holándes visto por artistas japoneses

Isabel I fue famosa por otorgar patente de corso a sus navíos comerciales. De esa forma los “corsarios” argüían que cada vez que atacaban un barco portugués o saqueaban algún reducto español lo hacían de manera legal. Ni los españoles ni los portugueses se creían esa legalidad de “Los perros ingleses” que pasaron a ser “perros de mar”.  Por algo la primera etapa de la piratería hablaba inglés con Sir John Hawkins, Sir Walter Raleigh y Sir Francis Drake.

 William Addams,  el verdadero Blackthorne,  navegó bajo la bandera de Drake, pero llegó a las costas niponas en un navío holandés. Es que pronto, los holandeses se hacían a la mar para ejercer el noble empleo de la piratería. Los bucaneros holandeses navegarían por el Caribe y los Mares del Sur (Océano Pacífico) y del Sur de Asia,  siguiendo el ejemplo de sus aliados británicos.

Shogun establece en la primera página del prólogo quien es John Blackthorne, su propósito en llegar a “Yapan” y a quien sirve. En todo coincide con ese primer viaje de William Adams. Aunque la obra es narrada por un narrador omnipresente, el prólogo es visto desde la perspectiva de Blackthorne.

Así nos enteramos de que la escuadra holandesa,  de la cual solo ha sobrevivido el Erasmo,  ha sido la primera en cruzar el secreto mejor guardado de los iberos,  el Estrecho de Magallanes y de esa manera,  ser los primeros holandeses (más tres miembros de la tripulación que son ingleses) en llegar a los Mares del Sur. La misión de la escuadra es saquear y asolar las posesiones españolas en la costa americana del Pacifico.

Tanto libro como Blackthorne en la nueva versión de Shogun se regocijan recordando como saquearon e incendiaron reductos en la costa chilena. En realidad, Adams y sus compañeros fueron decimados por los araucanos, el pueblo nativo chileno.  Aunque Blackthorne recuerda haber atacado a un galeón español cerca de Manila, Chile fue la última tierra que pisaron. Imagínese lo largo y agotador del viaje hasta Japón.



Otra cosa importante que descubro leyendo el prólogo son las aspiraciones holandesas para el viaje. Una es establecer relaciones comerciales permanentes y otra es establecer bases militares. Vamos,  que querían tener un imperio como sus enemigos. La diferencia es que el imperio español y el portugués durarían tres siglos (más en África) y que dejarían en sus colonias un legado de idioma, religión y civilización europea. Eso es lo que no entienden los historiadores que nos aglomeran a todos bajo el rotulo de “Colonizados”.  Bueno,  se tenía que decir y se dijo.

Sinopsis de la Novela

En esta entrada me limitaré a dar un breve resumen del argumento del libro, dejando para la próxima la reseña de “Shogun 2024” y su comparación con la aclamada primera versión de 1980. Tal como William Adams, John Blackthorne, un piloto inglés, llega a las costas japonesas como el líder de un puñado de sobrevivientes del Erasmus,  único navío que ha sobrevivido de la primera escuadra holandesa en cruzar el Estrecho de Magallanes. Los marineros y su piloto arriban a Anjiro, una villa de pescadores de la prefectura de Izu.

Son recibidos por el líder, el samurái Omi quien se los entrega su tío, el poderoso Yabushige. Llaman a un sacerdote portugués , el padre Sebastiao, para que sirva de interprete, pero se arma un trifulca entre Blackthorne y el cura que lo acusa de piratería y herejía. Yabu no entiende, hace hervir vivo a un marinero, pero deja vivos a los demás. Entremedio, se apodera del navío y del resto de los tripulantes.



Japón está viviendo un momento crítico. El heredero al trono es solo un niño y el gobierno ha quedado en mano de ambiciosos regentes. De ese Consejo de Regentes emerge el sensato, inteligente y muy noble Yoshi Toranaga que se enfrenta a Ishido quien maneja el consejo. Ishido es menos inteligente, más brutal y no es de sangre noble como Toranaga.

Yabu es un oportunista que tiene el buen juicio de notar que eventualmente Ishido y Toranaga se van a enfrentar y que eso significa guerra. Antes de ofrecer su lealtad a ningún bando, prefiere jugar a ser doble gente y jura lealtad tanto a Ishido como a Toranaga. Este último está semi prisionero en el Castillo de Osaka donde vive el heredero y se reúne el consejo.

Toronaga se entera que han llegado “bárbaros” a sus costas que no son ni portugueses ni españoles y envía por su líder. Blackthorne,  ahora conocido como Anjin -San (Señor piloto),  viaja junto con Yabu en el navío de Vasco Rodrígues (sebastian Rhys Davis lo interpretó en la original y ahora es Nestor Carbonell de Lost) un marinero español. Varios sucesos convertirán a Blackthorne y a Rodríguez en frenemies.



En Osaka, Blackthorne es entrevistado por Toranaga y tiene como interprete al Padre Martin Alivito de la Compañía de Jesús. Aunque el sacerdote es imparcial en su traducción, Toranaga queda con la impresión de que lo holandeses son unos rebeldes que no obedecen a su señor y que Anjin San es un mercenario. La entrevista es interrumpida por la llegada de Ishido. Toranaga envía al “bárbaro” a una prisión.

Blackthorne,  que sabe varios idiomas,  hace amistad con un franciscano español. Creyéndolo católico, el Padre Domingo informa al Anjin San de la perfidia jesuita que lo tiene prisionero, de los planes portugueses de dominación expansionista que abarca al Japón,  y de la situación política del imperio.



Gracias a una estratagema de Yabu, Blackthorne logra evadir prisión, una sentencia de muerte,  y retornar a la casa de Toronaga. Ahí descubre que tendrá un nuevo interprete. Consciente de la fricción entre su invitado y los portugueses, Toranaga ha reclutado a su fiel vasalla, Toda Mariko, de noble familia samurái, católica y que habla portugués y latín.

Blackthorne explica a la azorada Mariko los planes expansionistas de los portugueses asistidos por la Compañía de Jesús, de cómo el Tratado de Tordesillas ha dado a Portugal poder sobre el Japón y les revela de la existencia del enclave de Macao. Incomoda,  Mariko debe traducir y Toranaga queda impresionado ante estas revelaciones.

Temerosos de la influencia del inglés, los portugueses envían un asesino que se equivoca y ataca a Toranaga. Blackthorne interviene y lo mata. Toranaga sabe que Ishido quiere sacarlo del consejo y posiblemente obligarlo a cometer seppuku (suicidarse). Decide escapar llevándose a Mariko y al Anjin San. Durante el viaje hasta Edo (hoy Tokio), en dos ocasiones Anjin-San demuestra su valor e inteligencia salvando a su nuevo señor.



En agradecimiento , Toranaga lo nombre hatamoto (una clase alta de samurái), le da casa, sirvientes, pensión y hasta una esposa, Fujiko. Sin embargo, Mariko es quien debe estar siempre con el inglés, traduciendo, enseñándole japones y las costumbres de su nuevo país. Esto provoca muchos choques culturales, algunos cómicos otros trágicos, pero entre el bárbaro y su traductora se establece una amistad respetuosa que deviene en amor.

Mariko está casada con el noble Buntaro y tienen un hijo, pero todos saben que el marido la maltrata. Durante una cena, Buntaro bebe de más y obliga a su esposa a revelar su secreto. Es hija de un Matarreyes. Su padre asesinó a un malvado shogun. Toda su familia fue exterminada y él obligado a cometer sepukku. Solo Mariko fue eximida de castigo. Suplicó a su marido permiso para seguir a su padre, pero Buntaro se lo prohibió, prefiriendo obligarla a una vida de malos tratos y humillaciones.

Buntaro cree que el “bárbaro” despreciará a Mariko al saber su historia, pero ocurre lo contrario. Buntaro golpea a su esposa para luego pedir disculpas a su anfitrión por haberlo hecho bajo su techo. Enterado del incidente, Toranaga ofrece a Mariko la posibilidad de divorciarse, pero ella se niega. En el fondo,  entiende que el amor romántico del inglés no es compatible con su cultura japonesa.



Ishido exige el retorno de Toranaga. Para obligarlo,  toma de rehenes a otros miembros del consejo y a sus familias, entre ellos a las esposas de su enemigo. Tanto él como la ambiciosa Oshiba, madre del Heredero, quieren obligar al daimio a retornar a Osaka. En cambio, Toranaga envía a Yabu y a Mariko a rescatar a los rehenes. Anjin-San los acompañará. Es durante este viaje que Blackthorne y Mariko consuman su amor.

Aquí me detengo.  He contado a grandes rasgos la trama, pero hay que leer el libro, y también ver las versiones televisivas, muy diferentes entre sí. Solo de esa manera se comprende la grandeza de la obra de James Clavell y su impacto en la imaginación colectiva.

6 comentarios:

  1. Da only thing I know about the history of Nipon is that they have the longest ruling dynasty in the world, ruling without breaks for 26 centuries now! Very crazy indeed, it would piss us off here in my country so much because we love throwing down our rulers LOL it is our national sport.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Not without a break. Precisely, Shogun shows how government passed from hand to hand in the XV and XVI centuries. Yeyasu (Toranaga in the story) established the Tokugawa dynasty in 1600 that lasted until the mid XIX century. In 1868, the last Tokugawa emperor stepped down and was replaced by the Meiji dynasty from which the actual emperor (Naruhito) descends.

      Eliminar
  2. Gracias por compartir el trasfondo histórico de esta novela. Que interesante que los personajes principales hayan existido y que en realidad Mariko y Blackthorne no se hayan conocido. Ahora quiero ver la versión de 1980 para ver como desarrollan el romance (ya encontré la serie online y he visto la primera media hora). Que diferente la escena en que Blackthorne salva a Toronaga! Me sorprendió la diferencia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Amiguis,
      Gracias por pasar. es lo bueno de la ficción histórica o trabajas con personajes reales o te inspiras en ellos para crear tus propias figuras y no necesitas de licencias literarias para hacerlos interactuar, aunque no se conocieran ni en pintura.
      ¿Te refieres a cuando Toronaga se escapa del castillo de Osaka? En la versión del 80, Blackthorne de pronto comienza a tener como un ataque de locura y Mariko enseguida se da cuenta del propósito del inglés y se vuelve su cómplice. aquí lo hicieron más chistoso, Cosmo Jarvis lo convierte todo en un choque cultural. Se muestra escandalizado por como invaden la intimidad de Lady Kiri y hace aspavientos. Mariko pone cara de fuchis, como que no se daba cuenta de lo que intentaba hacer el Anjin-San. ¡Que mal me cae ella en esta versión! Encontraste la de 1980 en Paramount? Es bien simple. En libro y primera versión hay un gran romance, aqui hay cero romance

      Eliminar
    2. Si, esa es la escena. El coronel dice que en el libro, Blackthorne actuó como Chamberlain.

      Otra cosa que me olvidé de comentar es lo que mencionaste en tu otro articulo sobre la ambientación. Tienes razón que la versión 2024 es mucho más gloomy. A los hombres en mi casa les gustó más así, pero a mi si me gustó la colorización de la versión original, especialmente las escenas de playa y el castillo. Por cierto, la intro de la versión 2024 no me gusta. Hacía falta ver el mar. Es una isla, no desierto!

      Eliminar
    3. Ahí vemos como las estéticas cambian. Hoy todo period piece debe ser oscuro, lúgubre (ahi la diferencia con Bridgerton y es que Shonda es romántica). En los 80 nos gustaban los colores, el sol (todavía uno puede encontrar esa estética en series europeas) Al no existir el CGI, tenían que apoyarse en la realidad que muchas veces es más alegre y colorida que los que nos ofrecen los efectos especiales.

      Eliminar